Ningún homenaje mejor para el fallecido Sam Jones que restaurar la imagen del equipo en esta lastimosa temporada. Los Celtics recuperaron esa imagen ganando 123-108 a los Suns y dejando atrás el impresentable 4 de 42 que hicieron desde el triple ante Clippers.
Espectacular primera parte de los locales (67-41) para aguantar el intento de reacción de los Suns en la segunda.
Primer triple-doble de Robert Williams III en su carrera NBA. Completísimo su partido: 10 puntos, 11 rebotes, 10 asistencias y 5 tapones sin fallar ningún tiro (5 de 5 en campo). Jugó el pívot con la ventaja de no tener como rivales ni a Deandre Ayton ni a JaVale McGee. Eso facilitó su exhibición.
Jaylen Brown (24 puntos y 11 rebotes) y Marcus Smart (24 puntos y 9 rebotes) lideraron la anotación de unos Celtics que volvieron a jugar, entre otros, sin Jayson Tatum.
Josh Richardson metió 15 de sus 19 puntos en el crucial primer tiempo, Romeo Langford hizo 16 tantos en 23 minutos y Grant Williams añadió 15, mientras que Al Horford jugó 25 minutos para hacer 4 puntos, 7 rebotes y 7 asistencias.
No vio pista Juancho Hernangómez, que ya no entra en la rotación ni siquiera con todas las bajas que tiene su equipo.
Fue una jornada especial en el TD Garden. Despedida del año y despedida al gran Sam Jones, leyenda de la franquicia fallecida a los 88 años la noche anterior. Hubo silencio en homenaje a Jones antes del partido y también un vídeo de tributo a lo que fue Jones para los Celtics en el mejor momento de su historia.
Aquel momento imparable de Bill Russell y compañía contrasta con la gris temporada que están haciendo estos Celtics, pero hoy el equipo nada tuvo que ver con sus tropiezos anteriores, como nada tuvieron que ver los Suns con arreglo a su gran temporada. Ausentes Monty Williams, Ayton y McGee, y perdido en la pista Devin Booker, que fue el máximo anotador visitante con 22 puntos, pero con un horrible 7 de 26 en el tiro.
Cam Johnson anotó 20 unidades, Jalen Smith hizo 19 puntos -Smith es una de las mejores noticias para Suns en estos últimos partidos- y Chris Paul se quedó en 14 más 8 asistencias.
La primera parte fue demoledora para Phoenix. Boston cerró el primer cuarto con parcial de 18-6, se impuso en el segundo 35-21 y llegó al intermedio con un apabullante 67-41, con sus suplentes metiendo 32 puntos por 4 de los suplentes rivales. El equipo había calibrado mucho mejor su punto de mira desde el triple y había defendido con excelentes prestaciones.
La segunda parte fue un intento de remontada de Suns que Celtics aguantó con solvencia tras haber llegado a tener 30 puntos de ventaja en la primera parte.
Con 113-99, la afición local vio cómo Williams III le ponía un soberano tapón a Cameron Payne y como en la siguiente jugada Josh Richardson y Grant Williams le colocaban al alimón otro tapón a un Booker desesperado para regorcijo del personal céltico.
Boston ganó bien en el Garden para situarse 17-19 y dejar a Phoenix en 27-8.