Serge Ibaka volvió al Nou Congost. La cancha de baloncesto en la que el público del Bàsquet Manresa vio emerger a un joven jugador que luego triunfaría en la NBA. Por eso, no había mejor escenario para presentar un proyecto así. El proyecto no es otro que la llegada a Manresa de jóvenes jugadores africanos.
El nuevo jugador de Orlando Magic se involucrará en esa llegada. Su fundación trabajará codo con codo con la Fundación Bàsquet Manresa. Entre ambas aportarán dinero y asesoramiento a los chavales para cubrir su estancia y formación. Gran parte de ellos habrán pasado antes por el campus para jóvenes que Ibaka impulsa en Congo, su país natal.
El proyecto no busca solo descubrir grandes talentos. Es, además, una forma de sacar a esos jóvenes deportistas de una realidad difícil para llevarlos a una realidad más amable.
Los primeros en llegar a Manresa a través de esta iniciativa serán David Efambe y Christ Bonazebi. Ambos nacieron en el siglo XXI.
Mientras, el internacional español se prepara con intensidad para afrontar la pretemporada de Orlando Magic. Para ello se entrena estos días con el Barça B, el equipo filial del FC Barcelona Lassa.