JORNADA NBA / temporada regular 2013-14

Los Lakers arruinan el partido de Vásquez con Young y Gasol en 29 y 22 puntos

San Antonio derrota con completa facilidad a Milwaukee a pesar de la baja de Tony Parker

hispanosnba.com |

Nick Young fue la estrella de Lakers tras anotar 29 puntos en la victoria (Zuma Press/Icon SMI)

Los Lakers encadenan 2 victorias y eso es noticia en un equipo que solo ha ganado 3 de sus últimos 15 partidos. Con Nick Young y Pau Gasol a la cabeza, y con la inestimable ayuda de Kendall Marshall y Ryan Kelly, el equipo de Mike D'Antoni remontó por 2 veces un marcador bien adverso que llegó a situarse en 19 de ventaja para Toronto.

Los Raptors, un equipo en plena forma, no defendieron esta vez como en anteriores ocasiones y no aprovecharon el que ha sido hasta la fecha el mejor partido del venezolano Greivis Vásquez con el conjunto de Ontario. Porque el piloto caraqueñó sí que brilló con luz propia en el partido más tempranero de la jornada dominical de la NBA.

Mientras, San Antonio solucionó como un mero trámite, tal y como se suponía, su partido ante Milwaukee Bucks. No jugó Tony Parker por lesión y Manu Ginóbili solo metió 1 puntos, pero los texanos ganaron por 28 tantos con Patty Mills y Tim Duncan como jugadores más destacados.

Toronto 106 L.A. Lakers 112

Sorprendente victoria de Lakers en el Air Canada Centre tanto por la trayectoria de ambos equipos en el campeonato como por el desarrollo del partido, que fue bien bizarro. Porque los Lakers ganaron un encuentro que tuvieron prácticamente perdido hasta en dos ocasiones.

Porque el equipo angelino llegó a protagonizar hasta dos remontadas en el mismo partido. La primera, en el segundo cuarto, cuando llegó a ir perdiendo por 19 puntos (50-31) tras que perdiera pie en la parte final del primer cuarto y en el inicio del segundo con Pau Gasol fuera de la pista y Greivis Vásquez dentro de ella. Y la segunda, en el tercer cuarto, cuando los locales volvieron a abrir brecha para colocarse con 17 de ventaja (73-56) tras un parcial de 15-2. Pero en ese delicado momento, Lakers fabricó un increíble 8-26 para cerrar el tercer cuarto por delante en el marcador: 81-82.

Fue, por lo tanto, el partido una montaña rusa incomprensible, aunque tuvo su gracia. Los Lakers encajaron en el primer cuarto 36 puntos con unos Raptors casi infalibles, que se fueron a un 73,7% en el tiro de campo y 5 de 6 triples, pero ese acierto desde más allá del arco de los locales se trastocó en un 0 de 10 en el segundo cuarto, llegándose al descanso con un 58-54 tras salvar los Lakers milagrosamente los muebles con Pau Gasol en 14 puntos, 6 rebotes y un +15 de su equipo con él en cancha. Y es que Lakers cambiaba mucho con o sin Pau. El otro hombre que sostenía al equipo visitante era Kendall Marshall, estupendo en la dirección.

En esta primera parte, Vásquez ya había demostrado que estaba caliente, que era su día, aspecto que corroboró en la segunda parte, donde llegó a tener momentos de éxtasis que encandilaron a la grada, que por instantes se encendió fervorosa, rendida al juego del venezolano.

Así se llegó al último cuarto, el decisivo, en el que el valiente y nunca suficientemente ponderado Dwane Casey apostó por sus hombres altos suplentes, Patrick Patterson y Chuck Hayes, con toda la razón. El primero había brillado en los dos lados de la cancha y el segundo estaba defendiendo con poder a Pau Gasol. Se quedaban fuera del final Amir Johnson y un Jonas Valanciunas que fracasó ante Gasol cada vez que se enfrentaron en el poste y que se metió desde el principio en problemas de faltas.

En ese final, capital la mejora paulatina de Ryan Kelly, que hizo su segundo buen partido consecutivo, y el espectáculo tremendo de un Nick Young que decidió el partido con sus genialidades en el encuentro en el que volvía de cumplir sanción. Acabó Young con 29 puntos y 5 de 7 triples tras su final apoteósico. Pau Gasol se fue a 22 tantos y 9 rebotes en 36 minutos, Kelly sumó 17 tantos y Marshall, 10 con 11 asistencias.

Los locales dominaron el rebote, lo cerraron con eficacia, pero no supieron cerrar el partido, entre otras cosas porque no defendieron a su nivel. DeMar DeRozan sumó 23 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias, aunque hizo un 3 de 13 en la segunda parte, Kyle Lowry sostuvo a los suyos en los momentos complicados del final y acabó con 21 tantos y 9 asistencias, Patrick Patterson hizo 17 con 7 rebotes y Vásquez bordó su mejor baloncesto finalizando con 11 tantos, 8 asistencias, 5 robos y 0 pérdidas de balón en 21 minutos. Bien que lo necesitaba.

San Antonio 110 Milwaukee 82

Este partido tuvo bastante menos historia. Los Spurs no pudieron contar con Tony Parker y Matt Bonner, lesionados en un gemelo el francés y con una fractura de nariz el veterano pelirrojo, y tuvieron a Manu Ginóbili en solo 1 punto, pero aún así le metieron una paliza a un equipo que es una auténtica bazofia. Al menos, en lo que va de temporada.

La primera parte ya acabó 53-38 tras abrir hueco los locales en el primer cuarto a partir de la salida a pista de Ginóbili, que si bien no metió una sola canasta en juego, dio 7 asistencias y movió inteligentemente la ofensiva de su equipo. Una ofensiva que durante el partido tiró del colectivo. Cory Joseph fue el base titular, pero Patty Mills fue el máximo anotador de Spurs con 20 puntos que acompañó con 7 asistencias y 4 triples. Fue la punta de lanza el australiano de una segunda unidad que hizo 58 puntos.

Mills lideró el triunfo junto a Tim Duncan (11 puntos y 13 rebotes). Hasta 7 jugadores locales sumaron 10 o más puntos. Uno de ellos fue el francés Nando de Colo, que hizo 13 en una jornada feliz dentro de una temporada dura y amarga para él.

Si al descanso se llegó con 15 de ventaja para el equipo de Gregg Popovich, la reanudación suspuso el final del partido. En el tercer cuarto, Spurs puso la directa definitiva para acabarlo con 24 puntos de ventaja y dejar el último cuarto como un pasar el tiempo a título de inventario.

La diferencia que hay en la clasificación (32-9 los Spurs por 7-33 los Bucks) fue la que hubo en la pista. San Antonio metió el 56,6% de sus tiros y un gran 11 de 18 desde el triple. Anduvieron sobrados los locales, dominando el rebote y ganando sin despeinarse en el partido de debut de la temporada de Malcolm Thomas.

Los Bucks, una pena, que se hizo más grande cuando uno de sus jugadores más serios, Luke Ridnour, se lesionó en el primer cuarto una muñeca. Brandon Knight -21 tantos- fue una isla en el equipo. Doble doble de John Henson, algunas cosas defensivas de Larry Sanders y pare usted de contar. El mejor ejemplo del desastre lo teníamos en el desnortado O.J. Mayo, que acabó sin anotar un solo punto.