Ray Allen pone fin al ‘big three’ de los Celtics y elige Miami como destino
El escolta elige firmar con un rival directo por la mitad del salario ofrecido por Boston
Desagradable sorpresa la que ha deparado el veterano Ray Allen a los responsables de los Boston Celtics y a sus aficionados. El escolta ha decidido finalmente abandonar la franquicia para unirse a los actuales campeones, Miami Heat, rival directo de su hasta ahora equipo.
La decisión sorprende aún más por cuanto se había hecho pública la intención de los Celtics de ofrecer a Allen un contrato por 2 años y 12 millones, es decir, 6 millones anuales. Una cifra que era el doble de la que podían ofrecer los Heat que, eso sí, alargaban hasta los 3 años el acuerdo con el escolta.
Los Celtics habían llegado incluso a ofrecerle la inclusión de una nada habitual cláusula de no traspaso –sólo Kobe Bryant y Dirk Nowitzki tienen una en sus contratos- que hubiera impedido al equipo mover su contrato sin el permiso del jugador, después de que éste se mostrara molesto por haber sido ofrecido como moneda de cambio continuamente en los 2 últimos años.
Sin embargo, según relata el Boston Herald citando fuentes de la franquicia, Allen se habría descolgado exigiendo un contrato de 3 años y 27 millones, 9 por año, algo que los Celtics no estaban dispuestos a asumir. En el fondo de todo este desacuerdo, parece subyacer el descontento de Allen por verse relegado en la rotación, ante el ascenso de Bradley y la contratación de Jason Terry, y, según algunas fuentes, su mala relación con el base del equipo, Rajon Rondo.
Los Heat le ofrecen unas condiciones económicas mucho más modestas, algo más de 9 millones por 3 años, pero a cambio, le otorgan muchas más posibilidades de luchar por el título y sobre todo, un papel más claro en el equipo, como sexto hombre y francotirador dispuesto a sacar ventaja de posiciones abiertas como consecuencia de las defensas sobre James o Wade.
Con la marcha de Allen se pone fin al que ha sido durante años el ‘big three’ de los Celtics, la conocida como PGA (Pierce-Garnett-Allen), la combinación urdida por Danny Ainge en el verano de 2007 que revitalizó a unos decaídos Celtics llevándoles a hacerse con el título en 2008 ante los Lakers y perder la final ante el mismo rival 2 años más tarde.