JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2020-2021

Los Bucks dominan a los Lakers en el debut de Drummond

Jrue Holiday lidera el claro triunfo visitante y Andre Drummond se lesiona en su estreno

Nigel Correas |

Expectación en torno a los Lakers con el debut de Andre Drummond en el foco. El equipo afronta una etapa de mera supervivencia. Y se esperaba que Drummond pudiera contribuir al éxito de la empresa. Pero Drummond ha podido contribuir poco. Y los Lakers han perdido ante un equipo superior.

Derrota ante Milwaukee por 97-112. Tras llegar a ir perdiendo por 20 puntos en el tercer cuarto. Lakers peleó en la cancha. Nadie lo puede negar. Pero se mostró impotente para poder llegar con opciones al final del partido. Lo más que hizo fue ponerse a 10 puntos.

Jrue Holiday sumó 28 puntos, 8 rebotes, 6 asistencias y 4 robos. Con 11 de 15 en el tiro. Partidazo el suyo. En ataque y en defensa. Va a más desde que volvió de su lesión. Giannis Antetokounmpo ha logrado 25 puntos, 10 rebotes, 4 asistencias y 3 tapones. Con buenos porcentajes de tiro. Khris Middleton ha añadido 17 puntos y 8 asistencias. Y Brook Lopez ha puesto 4 tapones. Además de hacer un poster tremendo en el primer cuarto a Montrezl Harrell.

La holgura del resultado ha dado al final para una pequeña fiesta griega. Los tres hermanos Antetokounmpo han llegado a coincidir en la pista. De forma efímera, eso sí. Y al final, Giannis, Thanasis y Kostas se han abrazado en la cancha al finalizar el partido.

El pequeño drama angelino se extiende en el tiempo. Y no es tanto un drama de resultados. Es más bien un drama de perspectiva. De inquietud por lo que viene. Llevan ya los de Vogel 6 partidos sin LeBron James y 20 sin Anthony Davis. Es decir, acumulan ya 6 partidos sin poder contar con ninguna de sus dos estrellas. Y eso es un poderoso lastre. Hoy, derrota ante Bucks por 97-112. La marca del equipo queda ahora en 30-18. Lakers es cuarto. Y el quinto y el sexto, Nuggets y Blazers, están en 29-18.

El arranque del partido no pudo ser más esperanzador para los locales. La presencia de Drummond insuflaba un pequeño motor extra a los californianos. Lakers defendió bien en el primer cuarto. Intenso. Drummond arrancó el partido de muy buen modo. Y el equipo local entró en una especie de éxtasis desde el triple. Un auténtico terremoto desde más allá del arco.

¡Lakers ya había metido 5 triples en los primeros 5 minutos del partido! Y acababa el primer cuarto con 8 triples de 13 intentos. Su mejor marca en un cuarto en toda la temporada. Para imponerse 30-24. Pese al gran primer cuarto de Jrue Holiday, el que sería a la postre el mejor jugador del partido.

El problema de Lakers es que la fiesta inicial no tuvo continuidad. Bucks bajó el culo en defensa en el segundo cuarto. Y a los angelinos se les fue toda la puntería. ¡De meter 8 triples en el primer cuarto a hacer 0 en el segundo! Segundo cuarto: 0 de 5 en el triple por 3 de 3 de Bucks. Y lo peor es que esa disfunción ya no abandonó al equipo durante todo el partido. ¡En los tres cuartos finales Lakers hizo una serie de 2 de 23 desde el triple! Del festival al funeral del tiro.

Bucks fue otra cosa. Poco importó que no contara con dos jugadores de rol muy importantes: Bobby Portis y P.J. Tucker. El equipo de Budenholzer se repuso rápido de la lluvia de triples del primer cuarto. Empezó a defender. Empezó a dominar el juego y el marcador. Y ya se fue al descanso ganando 49-57. Con Holiday y Khris Middleton encabezando la victoria parcial.

Los Lakers, hasta aquí, se mostraron competitivos. En un partido con demasiadas pérdidas de balón (22 hizo Lakers en el partido y 21 Bucks).

Pero llegado el tercer cuarto el encuentro se quebró. Milwaukee empezó a acumular ventaja. Drummond cometió su cuarta falta y salió del partido lesionado. Los Bucks empezaban a ejercer de favoritos. Hasta el 69-89. Con Lakers sumando imprecisiones en ataque. Muchas pérdidas de balón que acababan en puntos del rival. El mal final de cuarto de los de Budenholzer dio un respiro a Lakers. Para el 75-89. Quedaban 12 minutos.

Jugó el defenestrado Marc Gasol los primeros 6 minutos del último cuarto. Había que dar descanso a Montrezl Harrell. Y no lo hizo nada mal. Es más, hizo un poco de todo: 2 puntos, 3 rebotes, 1 asistencia, 1 robo y 2 tapones. Luego volvió Harrell, que hizo un buen partido. Pero con Harrell o sin Harrell la suerte estaba echada.

Caruso quiso ponerle algo de mordiente a un equipo herido. Hizo un coast to coast para culminar con un gran mate. Pero acabó sentado en el suelo. Taponazo de impresión de Anteto. Poco después, Bryn Forbes puso el 84-99. Lakers ya no daba más de sí.

Otra derrota. Esta, más que lógica. Los 19 puntos de Harrell no sirvieron. Tampoco los 17 y 8 asistencias del errático Dennis Schröder. Ni los 16 y 7 asistencias de Kyle Kuzma (1 de 9 en el triple). Ni los 15 de Markieff Morris. Gran inicio de partido el suyo. De Caldwell-Pope mejor no hablar. Otro día ejerciendo de hombre invisible. Y Bucks respirando. Llevaba Milwaukee 3 derrotas seguidas. Ante Celtics, Knicks y Clippers. Esa cuenta negativa ya está rota.