ALL-STAR / ALL-STAR WEEKEND 2014

El Este vence al Oeste 155-163 en un partido de récords con remontada final

Kyrie Irving fue nombrado MVP y lideró la victoria ante el Oeste junto a Carmelo Anthony

hispanosnba.com |

Kyrie Irving fue elegido como el MVP de un partido con récord de anotación
Kyrie Irving fue elegido como el MVP de un partido con récord de anotación (Xinhua/Zuma Press/Icon SMI)

Fue un festín pantagruélico, una fiesta cargada de excesos, una cita en la que al final se coló un invitado inesperado. Porque el MVP no fue ni para Kevin Durant, ni para LeBron James, ni para Carmelo Anthony, por mucho que Durant y Melo hicieran soberbios partidos. Tampoco para uno de los jugadores más en forma de la NBA, Blake Griffin, que también hizo números estelares... el MVP fue para Kyrie Irving tras completar una segunda parte fabulosa, anotar 24 puntos tras el descanso y finalizar con 31 tantos y 14 asistencias siendo el motor de la remontada del Este.

El 155-163 final supone un récord de anotación conjunta. Esos 318 puntos superan a los 303 de 1987. Además, Melo logró una mejor marca de triples anotados, con 8, y Durant y Griffin se meten en el Top 5 de anotación en un partido con 38 cada uno, pese a lo cual el Oeste perdió, rompiéndose así su racha triunfal de los últimos años.

Todo ello, en el primer Partido de las Estrellas disputado con camisetas con manga corta.

Oeste 155 Este 163

Inicio de fiesta en el Smoothie King Center con Chris Paul y LeBron James presentando la actuación musical previa al partido de Pharrell Williams, presentaciones de los equipos con Kobe Bryant de calle, vestido con un elegante traje, Gary Clark Jr. interpretando el himno estadounidense con la guitarra de forma excelente, aunque con menos virtuosismo que el gran Jimi Hendrix, e inicio del partido con LeBron James robando en los primeros minutos 3 balones como si el encuentro fuera a tener una intensidad distinta a otras veces. Algo que no solo no fue así a la larga, sino que desembocó en todo lo contrario.

Partido jugado a una velocidad celérica, con más posesiones que nunca, con más puntos que nunca, con más abuso del triple que nunca (¡se lanzaron 100!)... eso sí, con momentos estelares, fantásticos mates, jugadas de verdadera fantasía y diversión para el espectador que gusta del espectáculo sin grandes pretensiones.

La primera parte, en cuyo transcurso el pabellón cantó el cumpleaños feliz a Bill Russell, acabó 89-76 para el Oeste, con récord de anotación de un equipo y de conjunto al descanso. Para entonces, el dominio del rebote del Oeste resultaba crucial, un dominio nacido del desequilibrio de los quintetos iniciales. 

También por entonces, todos apostábamos por el triunfo del Oeste con Kevin Durant (22 puntos al descanso) y Blake Griffin (20) peleando el MVP. A Durant se le veía muy empeñado en ello y a Griffin se le había visto meter 18 puntos en el primer cuarto tras anotar 8 mates. En los del Este, el líder era Melo con 20 puntos.

Pero todo se volcó en la segunda mitad. Se pasó de ese parcial de 89-76 a uno de 66-87 con Kyrie Irving llegando al partido sin pretender ser un líder para al final serlo. Metió 24 puntos en la segunda mitad y fue el dueño de la remontada del Este, que llegó a ir perdiendo por 18 puntos en el tercer cuarto.

Al final, triunfo defendiendo el último par de minutos. Parcial final de 0-10 para ganar con Paul George, Carmelo Anthony y LeBron James anotando esos 10 puntos.

El Este acabó anotando el 60,9% de sus tiros y equilibrando el rebote en la segunda mitad. Irving, merecido MVP, finalizó con 31 puntos, 14 asistencias y 14 de 17 en el tiro de campo. Además, Carmelo sumó 30 puntos con 8 triples, LeBron se fue a 22 con 7 rebotes  7 asistencias, aunque un 0 de 7 en triples, y George añadió 18. Dwyane Wade fue el titular que menos jugó dado su estado físico y Joakim Noah fue el único suplente del Este que alcanzó los 20 puntos.

En el Oeste, 38 puntos, 10 rebotes y 6 asistencias de un Durant que firmó un 6 de 17 desde el triple y estuvo siempre muy ambicioso. Griffin terminó con 38 tantos también y un 19 de 23 en el tiro de campo. Además, dobles dobles puntos-asistencias de Chris Paul y Stephen Curry. Dirk Nowitzki fue el único jugador del partido que no anotó (y fue el que menos jugó con 8 minutos). Al alemán no le interesan estos partidos. Está comprobado. Y Dwight Howard hizo muy buenos números, pero solo le dejaron jugar 13 minutos.