Los destinos de Paul George e Indiana Pacers parecen estar bien unidos. La solidez de esa relación la corrobora el propio jugador al afimar al Indianapolis Star que quiere quedarse en los Pacers porque es el sitio adecuado para jugar al baloncesto.
"Habrá un contrato firmado y sellado sobre la mesa antes de la temporada", afirma el jugador, que añade su intención inequívoca de quedarse: "Quiero estar aquí. Es un gran lugar. Sin distracciones. (Donde) Puedo estar centrado y hacer mi trabajo".
Parece que la sintonía entre los dirigentes del club y el alero californiano no ofrece dudas. George es un jugador elemental en el actual crecimiento de un equipo que ya fue la pasada campaña finalista de la Conferencia Este. Sus números así lo atestiguan: 17,4 puntos, 7,6 rebotes, 4,1 asistencias y 1,8 recuperaciones en 79 encuentros. También su recién estrenada categoría de All-Star, su inclusión en el Tercer Mejor Equipo de la liga y su elección como Jugador Más Mejorado. Y solo tiene 23 años.
Es cierto que durante el verano surgieron rumores sobre el posible interés futuro de los Lakers por el alero nacido en California, pero no es menos cierto que dichos rumores parecen ahora quedar atrás.
De no firmar una extensión a su actual contrato, George se convertiría en agente libre restringido el próximo verano.