Lakers y Celtics han sido los grandes protagonistas del año 2010. Los Lakers, además, lo fueron de la década que termina y los Celtics de la parte final de esa década. Sin embargo, ninguna de las dos grandes franquicias de la NBA ha finalizado el año 2010 en un momento bueno de juego.
Al menos, los de Phil Jackson despidieron el año con una victoria ante Philadelphia, partido en el que Pau Gasol logró 20 puntos y 8 rebotes y Andrés Nocioni 13 también con 8 rechaces. Porque Boston cayó en el último encuentro de 2010 en casa con los Hornets de Ariza y ha cerrado el año perdiendo 3 de sus últimos 4 encuentros.
L.A. Lakers 102 Philadelphia 98
Los Lakers terminaron la década ganando, justo final a 10 años en los que han obtenido 4 títulos de la NBA, pero injusto premio al juego que desarrollaron en este su último juego de 2010, en el que un equipo joven, con talento, pero aún por hacerse, les puso contra las cuerdas. Y eso que tenía la baja de Iguodala.
El equipo de Phil Jackson casi muere mirándose al ombligo. Llegó a contar el conjunto californiano con 14 puntos de ventaja y nunca perdió la delantera en el marcador, pero en un ejercicio bipolar -de poderío y dejadez-, plagado de suficiencia llevada al extremo y de autocomplacencia, estuvieron los locales a punto de regalar el partido a su rival, que bien es cierto que cuajó una gran actuación y dio motivos para el optimismo.
Uno de esos motivos es la recuperación en el juego, aunque anoche no estuviera especialmente brillante, de Evan Turner. Otro, la demostración de que, como todos intuíamos, a Nocioni no se le ha olvidado jugar a esto. Otro, el crecimiento del joven Holiday. Otro, la mejora del tono defensivo del equipo...
Los Lakers, mientras, a lo suyo, que muchas veces es ganar al tran tran. Y es que ganaron fundamentalmente porque sus 5 jugadores más notables funcionaron: Kobe Bryant fue el mejor con 33 puntos en 35 minutos, anotando más del 50% de sus tiros, pero lanzando 24 veces y dando sólo 2 asistencias, Pau Gasol terminó con 20 tantos, 8 rebotes, 2 tapones, 2 robos y 9 de 12 en el tiro de campo en 34 minutos, Odom hizo 18 puntos, 7 rebotes y 4 asistencias desde la supencia, Bynum añadió 15 rebotes y Artest hizo un buen papel defensivo y aportó sus puntos. Así y todo, sufrieron.
Tras un tercer cuarto de sabor hispano, llegaron las rebajas para los de Jackson en el último acto, cuando los de Doug Collins apretaron los dientes.
Ese tercer cuarto hispano fue una gozada para nuestra vista. 12 minutos inundados por el mejor juego de Pau Gasol (que anotó 11 de sus 20 puntos) y de un encendido Andrés Nocioni (que logró 12 de sus 13 tantos en dicho cuarto y buena parte de sus rebotes). Gasol y Nocioni estuvieron en boca de todos durante minutos. Gran espectáculo el de ambos, aunque no pudieran rematarlo en el cuarto período.
En ese último cuarto, Gasol sólo jugó los últimos 4 minutos y apenas tocó bola porque Kobe Bryant se quedó con el balón y no lo compartió con nadie, un error de bulto que pudo costar el partido a los Lakers. En cuanto a Nocioni, cometió 2 pérdidas de balón absurdas y Collins le condenó a la banda, un castigo que no le fue conmutado. No jugó en los minutos finales, los decisivos.
Unos minutos finales en los que dio pena ver el juego de los Lakers, un equipo sobrado de recursos ofensivos cuya única jugada era dar el balón a Kobe y que éste no lo soltara. Por más que algunos de sus compañeros le pidieron el balón, éste no salió de las manos de la estrella local. Terminó decidiendo con los 4 puntos finales, pero no es forma ésta de ganar un encuentro para un equipo grande.
Los Sixers, con un juego mucho más colectivo, empataron a 98 a 1:33 del final. Bryant anotó poco después (100-98) y los visitantes buscaron el empate con Young, pero su intento de canasta fue respondido con un soberano tapón de Gasol. Luego llegaron los máximos apuros locales, pues los Sixers llegaron a errar ¡hasta 2 triples en los segundos finales para adelantarse en el marcador!.
Con 100-98, Holiday erró un triple y en la misma jugada Williams falló otro. Acto seguido, a 1,9 segundos de la conclusión, Kobe definía desde los tiros libres.
Y Philadelphia se fue de vacío del Staples Center. De nada sirvieron los 19 puntos y 11 asistencias de Holiday, los 18 puntos de Louis Williams, ni los 13 con 8 rebotes y 2 asistencias en 23 minutos del titular Nocioni, que al final se fue de L.A con un sabor agridulce.
Boston 81 New Orleans 83
¡Vaya mal final de año de los Celtics!. Cuando el equipo de Rivers navegaba viento en popa, liderando el Este, que aún lidera, llegaron las rebajas: 3 derrotas en los últimos 4 partidos. Se notó a la larga la ausencia de Rondo y en la matinal del 31 de diciembre, se notó también la añadida baja de Kevin Garnett. Sin Rondo y Garnett, estos Celtics no fueron lo mismo.
Los Hornets se presentaron en el TD Garden confiando en sus opciones y buscando con toda la ley la victoria. Lo hicieron en un pabellón entregado (¡da gusto ver la pasión por el baloncesto en Boston!). El Garden presentaba un ambiente de fábula y el vocerío en los minutos finales era infernal. Pero ni aún así pudieron doblegar el carácter ganador de los de Monty Williams.
Eso sí, ese ambiente ensordecedor fue a más gracias al pequeño milagro obrado por la segunda unidad del equipo céltico. Porque los suplentes de Rivers lograron un imposible durante buena parte del último cuarto. Jack colocó nada más iniciarse el último cuarto a su equipo 9 arriba 57-66. Pues bien, a partir de ahí un parcial de 16-0 puso a los bostonianos en el partido. Un parcial espectacular, pero nada singular, lo insólito fue ver cómo se produjo.
Ese 16-0 lo logró Boston con un quinteto integrado por Marquis Daniels, Luke Harangody, Jermaine O'Neal, Nate Robinson y Ray Allen, enfrentado a prácticamente el quinteto titular de los Hornets. Ver para creer. El pabellón se caía. El público vibraba.
Luego, todo se normalizó. Una canasta de Belinelli puso fin a la pesadilla y los visitantes volvieron al juego para aferrarse a él con ganas y ganar.
En ese final de encuentro tuvo un importante protagonismo un Trevor Ariza (7 puntos, 2 rebotes y 2 robos en 30 minutos) que hasta entonces había desarrollado un papel más bien gris. El jugador de origen dominicano anotó un triplazo sobre la bocina de la posesión con Paul Pierce encima que adelantó a los suyos (77-80 a 1:34 del final). Poco después, West aprovechaba un fallo garrafal en defensa de Davis para poner el 77-82. Pero en ese momento delicadísimo, Allen y Pierce salieron en defensa de su equipo y nivelaron la contienda.
Es cierto que Ariza no anotó una suspensión crucial a 21 segundos del final, pero no es menos cierto que su estupenda defensa en la última jugada de partido a Ray Allen provocó el fallo de éste y dio la victoria a los suyos. Aquí Ariza hizo algo que se le exige, defender. Y defendiendo se ganan muchos partidos.
El partido anduvo muy equilibrado en todos los apartados del juego. Boston estuvo negado en el triple (3 de 16) y New Orleans en los lanzamientos de personal (12 de 21). Los locales no cuidaron en exceso el balón y eso les costó caro.
Chris Paul fue el mejor visitante con 20 puntos, 11 asistencias, 6 robos y 5 rebotes. David West añadió 19 puntos, Emeka Okafor se fue con 18 y 13 rebotes y Marco Belinelli anotó en momentos importantes, como lo hizo Ariza con ese triple. El lastre del equipo de Monty Williams fue su segunda unidad, cuyo trabajo en ataque fue nulo.
En cuanto a los Celtics, Ray Allen sumó 18 puntos -brilló en el cuarto cuarto- y otros 4 jugadores alcanzaron la decena o la superaron por estrecho margen. Glen Davis fracasó como titular sustituyendo a Garnett y Shaquille O'Neal metió 10 puntos en 15 minutos, pero cometió 4 faltas.
Chicago 90 New Jersey 81
Los Bulls (21-10) continúan su buena trayectoria pese a la baja de Joakim Noah en sus posiciones interiores. Anoche, se impusieron a los Nets en un partido igualado, marcado por la escasa efectividad ofensiva de ambos conjuntos (ninguno llego al 40% de acierto en el tiro), que los Bulls inclinaron a su favor en los minutos finales.
Boozer, 20 puntos y 15 rebotes, Rose , 19 y 9 asistencias con 5 de 16 en el tiro, y Luol Deng, 19 y 8 rebotes, fueron los 3 vértices sobre los que giró el juego de los locales. En los Nets, Brook Lopez, 19 tantos y 8 capturas bajo los tableros, Outlaw y Stpehen Graham, 16 puntos cada uno, fueron los más destacados.
Indiana 95 Washington 86
Los Wizards continúan sin conocer lo que significa ganar fuera de casa y eso que ya llevan disputados 16 partidos como visitantes. Anoche, ofrecieron poca resistencia a unos Pacers que controlaron el encuentro de principio a fin aprovechando las facilidades ofrecidas en las cercanías del aro por la defensa de los de la capital federal.
Hasta 58 puntos anotaron desde el interior de la zona los locales por sólo 28 de sus rivales, que tampoco fueron capaces de frenar el contragolpe rival. Los 17 puntos de John Wall en el tercer cuarto evitaron que la derrota de su equipo fuera aún más contundente, pero los Wizards no llegaron nunca a estar de nuevo cerca en el marcador una vez que los Pacers abrieron hueco al inicio del segundo cuarto.
Granger y Collison fueron los máximos anotadores de los locales, 18 puntos cada uno, y Hibbert sumó 17, con 8 rebotes, aunque perdió 7 balones. Entre los hombres de banquillo, destacaron los 13 puntos y 7 rebotes del novato Paul George.
En los Wizards, Wall terminó con 25 tantos, pero flojeó en la dirección del equipo, con más balones extraviados (7) que pases de canasta distribuidos (4). El resto, mediocridad general, y escaso acierto en el tiro de hombres importantes como Andray Blatche (4 de 16) y Nick Young (2 de 11).