JORNADA NBA / Duelo estelar en la Conferencia Oeste

Phoenix gana a San Antonio defendiendo más que su rival (94-87)

Los 22 puntos de Ginobili no fueron suficientes

hispanosnba.com |

Los tiempos están cambiando. La frase dylaniana cobra fuerza en la Conferencia Oeste tras lo visto anoche en Arizona. Y es que Phoenix, el equipo que hasta el mes pasado hacía de la velocidad y la anotación su 'modus vivendi', ha cruzado nadando en un abrir y cerrar de ojos a la otra orilla y ahora quiere basar sus triunfos en una buena labor defensiva.

La última jornada fue un auténtico banco de pruebas de cara a los playoffs. Phoenix ganó a San Antonio jugándole de tú a tú en los tableros y en la defensa.

Como bien dijo al término del partido el técnico local, Mike D'Antoni, había en la pista y en las gradas una atmósfera de playoff. Y en ese ambiente cargado de sensaciones los Suns se quitaron de encima un sambenito que les venía lastrando en los últimos años, el ser incapaces de vencer a su bestia negra, los Spurs, y a otros equipos grandes del Oeste en un cuerpo a cuerpo defensivo, en un cara a cara basado en la dureza física y mental.

Qué mejor que el excampeón del mundo de boxeo, Mohammed Alí, como maestro de ceremonias. El gran Alí presenció el partido 'in situ' y a buen seguro que el encuentro le retrotrayó a viejos duelos cargados de cruda rivalidad.

En el partido había dos jugadores hispanos, ambos en las filas de San Antonio. Ginobili logró 22 puntos y 5 rebotes en 32 minutos. Estuvo muy bien en el triple (4 de 6), pero anduvo muy discreto en el tiro de campo (7 de 19). Oberto, por su parte, hizo 4 puntos y 5 rebotes en 10 minutos. Y es que parece claro que la llegada de Kurt Thomas está relegando al argentino en la rotación del equipo.

Reivindicación de Steve Kerr

El partido fue de Nash y de Shaquille O'Neal y resultó, por lo tanto, una reivindicación, aunque sea parcial, del General Manager de Phoenix, Steve Kerr, que de prolongarse en las eliminatorias esta imagen de los Suns podría pasar en un instante de villano a héroe de la película tras su apuesta de febrero por el 'viejo' y 'pesado' Shaq en detrimento de Marion.

El encuentro resultó igualado de principio a fin, como muestra el hecho de que el resultado a 1:38 del final reflejaba un apretadísimo 88-87, pero ese minuto y medio postrero sirvió a los locales para endosar al contrario un 6-0 definitivo a través de una canasta de Grant Hill, dos tiros libres de Bell y otros dos de Nash.

Nash (19 puntos, 14 asistencias y 5 rebotes) y Hill (18 puntos y 6 rebotes) fueron los máximos anotadores de los Suns, que dominaron en los tableros a su rival (52 rebotes por 44) gracias al fantástico trabajo de su pareja interior O'Neal-Stoudemire. El primero hizo 14 puntos, 16 rebotes y 2 tapones y el segundo 16 puntos y 11 rebotes.

Mientras, en San Antonio sus tres figuras tiraron del carro: el citado Ginobili, Parker (21 puntos y 5 asistencias) y Duncan (17 puntos, 10 rebotes y 2 tapones). Pero la extraordinaria labor defensiva de los Suns se pudo apreciar en la baja efectividad de la que hicieron gala los tres pilares de los Spurs para lograr sus puntos, ya que sólo Parker estuvo medianamente aplicado en el lanzamiento. Los tres sumaron 20 canastas de 53 intentos, un pobre bagaje.

Ese gran planteamiento defensivo del equipo de Arizona dejó a San Antonio en un 34,9% en el tiro de campo. De hecho, los Spurs tiraron bastante bien de tres (43,8%), pero se hundieron en el lanzamiento de dos puntos y se vinieron abajo en la capacidad de engarzar un juego colectivo (sólo dieron 11 asistencias).

Los de Mike D'Antoni dejaron a los de Popovich en 17 puntos en el último cuarto, lo que implicó la segunda derrota consecutiva de los texanos, que les impide acceder al liderato del Oeste.

Durante el partido Shaquille O'Neal logró una estadística histórica. Shaq, recién cumplidos los 36 años, se convirtió en el tercer jugador que alcanza los 26.000 puntos, 11.500 rebotes y 2.500 tapones, lo que demuestra que en la NBA hay estadísticas para aburrir y se miden cifras que desde la óptica de Europa o del resto de América no tendrían sentido alguno. Shaq es el tercer jugador que alcanza esa conjunción de cifras. Le precedieron en la hazaña dos auténticas leyendas del baloncesto: Jabbar y Olajuwon.