JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2010-2011

Manu Ginóbili da la victoria a los Spurs con un canastón sobre la bocina

Los Hornets ganan a los Kings tras remontar 23 puntos de desventaja

Paul Pierce decide un espectacular Knicks-Celtics

hispanosnba.com |

El argentino Manu Ginóbili sigue escribiendo su fantástica historia en la NBA, que no parece tener fin. El de Bahía Blanca firmó anoche ante los Bucks un partido excepcional. Anotó 26 puntos en 30 minutos. Pero lo más grande fue su canasta ganadora sobre la bocina. Salvó a los suyos.

Los Spurs sufrieron para ganar a unos Bucks sin Delfino (92-90), pero mereció la pena sólo por ver el desenlace. La estrella argentina más que brillar, nos dio un fogonazo.

Mientras, los Hornets lograban la mayor remontada de la historia de la franquicia al superar una desventaja de 23 puntos con los Kings. Aquí, la participación hispana resultó más que prescindible: Ariza no anotó en 20 minutos que anduvo en danza y 'Cisco' García ni siquiera pisó parquet.

Por otra parte, Paul Pierce decidió el partido de la jornada, un gran Knicks-Celtics jugado en el Madison en el que a la canasta casi sobre la bocina del alero céltico le siguió un triplazo de Stoudemire que llegó fuera de tiempo, por lo que no fue válido. Y los Sixers ganaron a los Clippers sin el concurso de Nocioni, una vez más.

San Antonio 92 Milwaukee 90

Manu es grande, muy grande. Y su equipo bien que lo agradece. Anoche, por ejemplo, el argentino sacó de un verdadero atolladero a los Spurs, un atolladero por otra parte inesperado, porque el rival era Milwaukee.

No jugó bien San Antonio y el equipo de Skiles planteó firme competencia al mejor equipo de la liga, que suma ya 21 triunfos en 24 partidos. Los de Wisconsin, sin Delfino una vez más, aguantaron el tipo y el marcador hasta llevar a los locales al límite. En ese límite, se encontraron con Ginóbili. En ese límite, el argentino es feliz.

Gooden había empatado el partido a 90 tras palmear una complicada y errada entrada a canasta de Jennings. Y ya no hubo más cambios hasta la jugada final. Empate a 90, Ginóbili botando en mitad de la cancha con 6 segundos por jugar, lejísimos de la línea de 3 y el de Bahía Blanca que se marca un uno contra uno espeluznante ante Luc Mbah a Moute... Ginóbili avanza hasta 5-6 metros de la canasta y con su rival encima se marca un canastón de media distancia sobre la bocina de los que hacen época. Su defensor todavía le está buscando.

Delirio en las gradas gracias a la genialidad del argentino, una genialidad que se hacía colofón de un partido inmenso: 26 puntos, 6 rebotes y 4 asistencias en 30 minutos y el internacional argentino abonado al 66% (en tiro de campo -9 de 13-, en tiro triple -2 de 3-, en tiro libre -6 de 9-). Ver a este señor jugando resulta impagable. ¡Qué espíritu y qué clase!.

A las bondades baloncestísticas de Manu, le acompañaron la profesionalidad y calidad de sus compañeros de 'big three'. Parker sumó 16 puntos y 8 asistencias y Duncan aportó 13 tantos, 11 rebotes y 7 tapones. La mala noticia para los locales fue el abandono de la cancha de Tiago Splitter en el tercer cuarto por problemas físicos, que no parecen serios.

Los de Skiles se quedaron con cara de tontos al final a pesar de cuajar un partido excelente. Douglas-Roberts sumó 21 puntos, Gooden hizo 20 y 11 rebotes en 25 minutos sin ser titular, Bogut aportó 15 tantos, 7 rebotes y 7 tapones (¡brutal el duelo en tapones Bogut-Duncan) e Ilyasova fue titular y logró 13 puntos.

New Orleans 94 Sacramento 91

Si Ginóbili fue protagonista en San Antonio, los Hornets como colectivo lo fueron en Nueva Orleans, ya que fueron capaces de romontar una desventaja de 23 puntos, algo que nunca había conseguido la franquicia.

Sacramento había alcanzado el descanso 16 puntos arriba y llegó a acumular después esos 23 tantos, que se desvanecieron en una segunda mitad en la que el ataque californiano hizo aguas (53-34).

El partido llegó tremendamente igualado a su fase final. Dominaban 91-88 los locales cuando Marcus Thornton se disfrazó de héroe para llevar la alegría a las gradas. Atacaban los Kings y David West erraba un tiro desde la lejanía. Entonces, el empeño, casi empecinamiento, de Thornton en la pelea por el balón le llevó a palmearlo y conseguir la canasta del partido (93-88 a 17 segundos de la conclusión).

Thornton fue hombre clave en la remontada de los suyos. Anotó 19 puntos en 24 minutos y fue el suplente perfecto, sólo superado en rendimiento por la estrella local, Chris Paul, que terminó con 22 tantos y 11 asistencias. Mientras, David West se notó irregular en la ofensiva y trazó un partido inteligente para acabar con 11 puntos, 9 rebotes y 7 asistencias.

En Sacramento, Tyreke Evans regresó para encestar 22 puntos y dar 7 pases de canasta y Beno Udrih le acompañó con 20 tantos.

Lo peor de la noche fue la actuación hispana: Francisco García no jugó con los Kings y Trevor Ariza tuvo una noche aciaga con los Hornets. El ex de Lakers y Rockets se fue en blanco del partido: 0 puntos en 20 minutos. Fue, sin duda, la peor actuación que se le recuerda esta temporada.

New York 116 Boston 118

Era el partido de la jornada. El enfrentamiento prometía mucho y no defraudó. Desde hacía años que no se veía un tan atractivo Knicks-Celtics, porque desde hacía años los neoyorquinos no tenían un nivel de juego aceptable. Ahora, lo tienen.

New York vio cómo se quebraba su fantástica cadena de victorias, pero presentó su candidatura a hacer grandes cosas. Lo hizo en un Madison que vibró con un partido de marcado tono ofensivo y tremenda igualdad. Una gozada para el espectador.

Ambos equipos superaron el 50% de acierto en el tiro en juego y los célticos encestaron todos sus tiros libres, que fueron 21. El equipo de Rivers perdió en el último cuarto a su base Rajan Rondo, que se torció un tobillo, pero superó ese gran inconveniente y terminó ganando con una impresionante canasta final de Paul Pierce. A ese tiro de media distancia decisivo le siguió un triple alucinante sobre la bocina de Stoudemire que no fue tal, ya que se anotó fuera de tiempo. Era la canasta de la victoria que nunca existió.

Stoudemire fue otra vez una máquina de hacer basket. Acabó el ex de los Suns con 39 puntos y 10 rebotes tras una primera parte extraordinaria, aunque nunca bajó el pistón. Felton estuvo otra vez asombroso (26 tantos y 14 asistencias), Gallinari hizo 20 puntos y Chandler 18 con 12 rebotes. Porque los mejores jugadores de ambos conjuntos no fallaron. No en vano, en Boston brillaron Paul Pierce (32 tantos), Ray Allen (26 con 4 de 5 en el triple), Kevin Garnett (20 y 13 rebotes) y Rondo, que repartió 14 asistencias antes de lesionarse.

En el Madison, no faltó de nada. Y es que hubo muchas jugadas espectaculares: el triplazo de Felton sobre la bocina del segundo cuarto, algunas acciones estelares de Gallinari, la fuerza explosiva de Stoudemire jugada tras jugada, la tremenda torcedura de tobillo de Rondo, las 2 canastas finales de Pierce y Stoudemire... un atracón de baloncesto del bueno.

Philadelphia 105 L.A. Clippers 91

En Filadelfia, décima victoria de los Sixers amparada en un tremendo tercer cuarto (34-18) y en la debilidad del rival que le tocaba en turno, los Clippers.

Nocioni se quedó otra vez fuera de la rotación de Philadelphia, lo que es una situación sin duda preocupante por mucho que Collins quiera quitar hierro al asunto y ser amable con el argentino.

Los locales trataron con mimo el balón -sólo 5 pérdidas- y tuvieron en Holiday (24 puntos), Iguodala (20 con 8 de 10 en el tiro doble) y Hawes (16 y 12 rebotes) a sus mejores hombres.

En los Clippers, lo de siempre. Partidazo de Griffin (20 puntos, 18 rebotes y 5 asistencias), que ya suma su decimotercer doble doble consecutivo, 18 puntos del veterano Baron Davis y buen papel de DeAndre Jordan, que anotó sus 7 tiros de campo para sumar 15 puntos. Todo ello para perder una vez más.