Orlando Magic está de enhorabuena. Jonathan Isaac tiene vía libre por parte de los médicos para jugar hoy ante Denver Nuggets. De hacerlo, sería el primer partido del jugador después de estar 7 meses en el dique seco por una lesión de rodilla.
El año 2020 ha sido prácticamente inexistente para Isaac. Se limitó a jugar el 1 de enero y aquel día apenas pudo empezar el partido. A las primeras de cambio sufrió un esguince de rodilla.
La llegada de la pandemia de Covid-19 no favoreció los tiempos de recuperación de Isaac. Eso sí, en la recta final el jugador ha sorprendido gratamente a su equipo por cómo ha ido elevando su carga de trabajo hasta llegar a estar listo para jugar, según informa Josh Robbins en The Athletic.
De hecho, en junio se daba como poco probable su reincorporación al juego en la burbuja de Orlando.
El jugador ha explicado a Robbins que ha aprovechado su largo parón para mejorar algunas facetas del juego, haciendo hincapié en el tiro en suspensión y en crecer en la cancha a partir de ensanchar su conocimiento del juego.
Para mejorar su IQ en la cancha, Isaac ha observado muchos vídeos. Sin duda, un ejercicio que bien podría seguir más de un jugador de la NBA.
Isaac, ala-pívot de 22 años, está en su tercer ejercicio como profesional tras haber pasado en su etapa universitaria por Florida St. y haber sido seleccionado en el sexto puesto del draft de 2017.
El jugador neoyorquino ha ido mejorando año a año y en esta tercera temporada estaba mejorando sus estadísticas hasta el momento en el que se lesionó.
Promedia Isaac en la presente temporada 12 puntos, 6,9 rebotes, 2,4 tapones y 1,6 robos de balón en 32 partidos. Su vuelta al juego la va a agradecer, y mucho, Orlando.