Tim Frank, portavoz de la NBA, ha anunciado que la liga está terminando de definir los procedimientos con los que pretende luchar contra las polémicas simulaciones de los jugadores para engañar a los árbitros. Entrarán en vigor esta temporada.
Frank ha asegurado que el comité de competición se reunió hace 2 semanas para discutir las medidas a tomar para para frenar lo que en Estados Unidos se conoce como ‘flopping’, o el arte de dejarse caer en busca de la señalización de una falta sin que exista previo contacto que lo justifique.
Se sabe que el procedimiento de revisión de este tipo de jugadas se realizará postpartido y que probablemente se saldará con multas a los jugadores, pero la liga no ha definido todavía los detalles del mismo y tiene ante sí la difícil tarea de establecer qué se considera contacto suficiente y qué no, un límite difuso que puede terminar acarreando aún más polémica.
El comisionado de la NBA, David Stern, ya anunció en junio la intención de la liga de actuar ante lo que consideran generalización de este tipo de simulaciones, una práctica que “no queremos que forme parte del juego”, según declaró.