La autoridad disciplinaria de la NBA ha decidido sancionar con un partido de suspensión al pívot de los Phoenix Suns Robin Lopez por lo que ha calificado como “conducta impropia respecto a uno de los árbitros”. Lopez no podrá jugar contra los Blazers.
La sanción, que incluye como es habitual la pérdida de la parte proporcional de sueldo correspondiente al partido que no podrá jugar, ha sido anunciada por Stu Jackson, Vicepresidente Ejecutivo de Operaciones de Baloncesto de la NBA.
La acción objeto de castigo se produjo en el segundo cuarto del partido que enfrentó el pasado martes los Suns con los Raptors en Phoenix. Lopez, enfadado por no haber señalado los árbitros falta a su favor en su acción de ataque anterior, cometió una clara falta sobre Linas Kleiza en medio del campo que sí fue sancionada.
A continuación, mientras se dirigía al banquillo tras pedirse tiempo muerto, siguió con la mirada al árbitro objeto de sus iras y se cruzó intencionadamente en su trayectoria, tocándole levemente en una suerte de movimiento intimidatorio. Algo que no ha gustado nada a la liga, que castiga habitualmente cualquier tipo de contacto intencionado de un jugador, por leve que sea, con cualquiera de los miembros del trío arbitral.