La jornada del martes sólo tenía 4 encuentros, pero dio para mucho. Esos encuentros han provocado importantes variaciones en la clasificación: Chicago ya es primero en el Este y los Lakers son segundos en el Oeste al pasar a Dallas. Horford, Delfino y Fernández cumplieron.
El jugador dominicano, el argentino y el español hicieron buenos números. Atlanta, el equipo de Horford, destrozó a Milwaukee, el equipo de Delfino. Y Portland, con 12 puntos de Rudy, derrotó a Dallas, en un discreto partido de Barea. De este modo, los Blazers son sextos en el Oeste y los Mavericks caen al tercer puesto.
Además, Indiana derrotó a los Knicks con una canasta en el último segundo de Granger y JaVale McGee logró un triple-doble con 12 tapones en la derrota de los suyos, los Wizards, en Chicago.
Portland 104 Dallas 101
Los Blazers experimentaron una regresión hipnótica a una infancia feliz en la que Aldridge y Roy convivían en armonía y lideraban al equipo. Y es que anoche se dio esa circunstancia, que parecía que no se repetiría jamás esta temporada.
La unión del titular Aldridge (30 puntos y 8 rebotes) y el suplente Roy (21 puntos en 28 minutos) terminó fundiendo a unos Mavericks que perdieron con la derrota la segunda posición en el Oeste. Tuvieron los texanos el empate en sus manos, pero el triple final de Nowitzki no entró.
Portland, mientras, sigue instalado en playoffs (es sexto). Anoche, tenía un difícil compromiso, pero si unimos al binomio Aldridge-Roy el buen rendimiento de Matthews (18 tantos con 4 triples sin fallo) y el buen desempeño de Rudy Fernández (12 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias en 22 minutos con 2 de 3 en triples) se puede empezar a vislumbrar las razones del éxito local.
Nate McMillan empezó el partido con una variante: Gerald Wallace fue titular y Marcus Camby, suplente. Una fisonomía que se amoldaba mejor a la estructura de Dallas. Y Dallas fue incapaz de ganar un partido en el que encestó prácticamente el 60% de sus tiros. Y eso tiene delito.
Los locales ejercieron una ofensiva con gran control, como le gusta a su técnico, y sólo perdieron 7 balones. Además, no renquearon en los momentos cruciales.
Dallas vio cómo resultaban inservibles los 28 puntos y 11 rebotes de Nowitzki, que volvió a errar un tiro decisivo, los 18 de Marion y los 16 de un grácil Beaubois, que los metió en 22 minutos tras anotar 4 triples de 6 intentos. Igualmente improductivas a título final fueron las 14 asistencias de Jason Kidd. El puertorriqueño Barea no tuvo su día más feliz: 5 puntos y 2 rebotes en 13 minutos.
Atlanta 110 Milwaukee 85
En el otro partido con hispanos de la jornada, los Hawks de Horford apabullaron a los Bucks de Delfino. Unos Bucks que se quedaron en unos lamentables 56 puntos en el partido anterior, contra Boston, y que anoche ante Atlanta cayeron por 25 puntos de diferencia. Dos feas derrotas.
No hubo partido, porque Atlanta no tuvo oposición desde el principio: 28-17 al final del primer cuarto, 55-39 al descanso y 84-55 tras el tercer acto. Los números lo dicen todo.
Los locales anotaron el 63% de sus lanzamientos dinámicos y colaron 11 de sus 19 intentos triples, de modo que se pudieron permitir el lujo de perder 21 balones y ganar por 25 de diferencia.
Larry Drew salió con Teague y Hinrich como titulares y Joe Johnson tuvo una jornada feliz convirtiéndose en la pesadilla de Milawaukee al endosar al equipo de Skiles 36 puntos con un 6 de 9 en el triple. Josh Smith anduvo completísimo con 17 tantos, 14 rebotes, 4 tapones y 4 asistencias y Horford no desentonó en el buen tono general, acabando el de Puerto Plata con 15 tantos, 5 rebotes y 3 asistencias en 32 minutos. Además, Marvin Williams, que partió como suplente, sumó 16 puntos.
La clave del despegue local fue un demoledor parcial de 20-0 acumulado en el final del primer cuarto y el inicio del segundo.
Milwaukee no respondió. Sólo Bogut estuvo a la altura con 21 puntos y 13 rebotes, todo lo contrario que Jennings, que anduvo horripilante. Mientras, Carlitos Delfino no estuvo mal. Acabó el santafesino con 13 tantos, 2 rebotes, 2 asistencias y 3 robos en 28 minutos. Pero no se le veía con buena cara al final. Y es que las palizas en Boston y Atlanta han hecho mella en el equipo.
Chicago 98 Washington 79
Ocasión pintiparada para los Bulls. Jugaban en casa ante el peor equipo visitante de la NBA y si ganaban superaban a los Celtics para liderar la Conferencia Este. Y no desaprovecharon tal ocasión, claro.
El 31-19 del primer cuarto ya indicó que el objetivo no era demasiado difícil, pero Chicago no se relajó para nada. Tanto fue así, que la defensa local dejó a los Wizards en 33 puntos en la segunda parte, unos Wizards que siguen avanzando en su desastroso balance como equipo visitante: 1 victoria y 30 derrotas. Lamentable.
Sin Boozer, Chicago organizó sus fuerzas. Rose (23 puntos y 7 asistencias), Deng (20 y 7 rebotes) y Bogans (17 con 5 triples) se concentraron en anotar y Thomas (15 rebotes) y Gibson (13 capturas) se concentraron en dominar los tableros. El trabajo en equipo fue perfecto.
En Washington, 27 puntos de Jordan Crawford y 17 tantos, 11 rebotes, 7 asistencias y 4 robos de Wall, aunque perdió 7 balones. Sin embargo, la estrella del equipo fue JaVale McGee, autor de un bizarro triple-doble: 11 puntos, 12 rebotes y 12 tapones. Nadie taponaba tanto en un partido de la NBA desde que Keon Clark pusiera 12 tapones en marzo de 2011, es decir, hace justo una década.
Indiana 119 New York 117
Carmelo Anthony empató el partido a 117 con una brillante entrada a canasta por el lado izquierdo de la ofensiva de su equipo. Restaban 7,8 segundos. Pero esta vez no fue el héroe, porque en la jugada siguiente ese rol se lo quedó Danny Granger, que en un fantástico uno contra uno acabó metiendo un canastón de 4 metros para dar la victoria a los suyos en el último segundo.
Fiesta monumental en el Conseco Fieldhouse y otra derrota de los Knicks con Billups en cancha, que desde que regresó al juego hace unos días no conoce el triunfo.
Tyler Hansbrough volvió a deslumbrar en los Pacers. El ex de North Carolina anotó 30 puntos con 12 de 17 en el tiro de campo. Granger, mientras, logró 26 y la canasta de la victoria y Darren Collison marcó 24 y repartió 9 pases de cesta. Además, Hibbert terminó con 15 puntos, 12 rebotes, 3 tapones y 5 asistencias y Foster contribuyó mucho en el rebote.
Los Knicks metieron 13 triples. Carmelo Anthony sumó 29 puntos y 9 rebotes, Amare Stoudemire hizo 21 y 10 y Fields y Douglas aportaron cada uno 17 tantos.