JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2010-2011

Houston y Portland ganan con muy buenas actuaciones de Scola y Rudy Fernández

Los Rockets superan los 44 puntos de Ellis; Aldridge lidera a los Blazers sin Roy

Charlotte hace el ridículo en Washington y termina perdiendo por 33

hispanosnba.com |

Los Rockets de Houston y los Trail Blazers de Portland siguen en su lucha por ocupar las últimas posiciones que dan derecho a los playoffs en el Oeste. Anoche, ambos ganaron. Y lo hicieron con notables actuaciones del argentino Luis Scola y el español Rudy Fernández.

Llamativa es la trayectoria ascendente de Houston desde que se conoció que Yao Ming tampoco iba a ser de gran ayuda este año. Luis Scola y Kevin Martin se han cargado el equipo a las espaldas. Y aún más llamativa es la racha de 3 triunfos consecutivos de Portland coincidiendo con la ausencia en esos 3 encuentros de su estrella, Brandon Roy. El hueco de Roy lo ha ocupado un fantástico Aldridge y el español Rudy Fernández está viviendo sus mejores momentos en la NBA.

Un momento bien distinto al vivido anoche por los Charlotte Bobcats, que rozaron el esperpento en Washington, donde perdieron por 33 puntos de diferencia con los Wizards.

Golden State 112 Houston 121

De nada sirvió la portentosa actuación del local Monta Ellis, autor de 44 puntos con una serie en el tiro excepcional (15 de 20). Porque la victoria correspondió a unos Houston Rockets que siguen creciendo al ritmo de Kevin Martin y Luis Scola y bajo la batuta de un cada vez más sólido Kyle Lowry.

Sin embargo, lejos de todos esos nombres, hubo dos jugadores que se pueden considerar como héroe y villano del encuentro, pues representan dos caras bien opuestas, una amable y exitosa y la otra ingrata o, si quieren, poco edificante.

La primera cara, la del éxito social y deportivo, la representó el siempre educado e intachable Shane Battier, un chico con un cerebro privilegiado, por lo que dicen, y de trayectoria inmaculada. El alero de los Rockets, que ejerce de medio base en cancha marcando muchas de las jugadas, siendo portavoz de sistemas de juego, enganchó 2 triples decisivos en los últimos 3 minutos del partido, 6 puntos cruciales que desequilibraron el triunfo del lado texano en un cuarto final de locos (37 a 40 fue el parcial).

El segundo rostro de la noche, el menos feliz, el que reflejó la derrota en su estela más cruel, fue el de Radmanovic, mente dispersa, trayectoria irregular en su larga marcha por la NBA y conducta, al menos anoche, reprochable y vital para la derrota, aunque todo su mal se sucediera a la velocidad del relámpago en apenas un par de segundos.

Con el partido todavía por decidir, en su recta final, Radmanovic capturó un rebote en su tablero, justo debajo del aro, pero se lo dejó arrebatar por Kyle Lowry, que le robó la cartera de forma muy pilla. Entonces, el base visitante buscó la cesta y el ex jugador de los Lakers le endosó un golpe impresentable en la cara que le tumbó redondo en el suelo. Falta flagrante de tipo 1, un par de tiros libres para Lowry, que anotó, y posesión para los Rockets. En resumen, 101-108 y balón para Hoston a 1:54 del final. Todas las esperanzas se esfumaron y el entrenador local sustituyó de inmediato a Radmanovic por Amundson, una decisión que llevó al serbio al banquillo con gesto áspero, con la mirada hundida.

Houston ganó el partido. El equipo de Adelman ya se ha hecho a la idea de que Ming no es uno de ellos y actúa en consecuencia. Balones a Martin y Scola, que son la referencia ofensiva. El escolta anotó anoche 30 puntos con 13 de 13 en el tiro libre; el argentino volvió a cobrar un enorme protagonismo en todas las facetas del juego. Lanzó 21 veces a canasta y terminó con 20 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias en 33 minutos. Con él de guardián de la zona, su equipo sumó un +20 en el luminoso. 'Luifa' sigue a un nivel tremendo.

Además, Battier puso la puntilla con esos 2 triples antes mencionados (anotó 4 de 6 desde más allá del arco), Hayes cumplió en la pintura y Lowry lo hizo en la dirección.

En los Warriors, Monta Ellis se marcó un partido extraordinario: 44 puntos, 7 asistencias, 3 robos y 15 de 20 en el tiro de campo. Sólo le secundó en la ofensiva David Lee con 19 tantos. Acie Law, cortado hace unos días por Memphis, jugó 32 minutos.

Portland 106 Milwaukee 80

Sin Roy, sin Oden, sin Camby, sin Przybilla... y con Dante Cunningham lesionándose a los 4 minutos de juego tras partir como titular. En ese estado, con la plantilla diezmada a más no poder, Portland volvió a firmar una victoria y ¡ya lleva 3 coincidiendo con los 3 partidos en los que Brandon Roy ha estado ausente!. Cierto es que los rivales no fueron de gran enjundia, pero tiene su mérito.

También es cierto que los Bucks no cuentan desde hace tiempo con Redd y Delfino y que anoche no pudieron disponer por primera vez desde que está en la NBA de Brandon Jennings. Esta última baja resultó capital, ya que Dooling y Boykins naufragaron en la dirección de su equipo.

En el Rose Garden hubo mucha fiesta -especialmente navideña- y poco partido, porque todo se decidió desde el primer momento. Los locales se escaparon pronto, firmaron un 34-17 en el segundo cuarto y se fueron a vestuarios con un contundente 59 a 35 que lo decía todo. El rostro de Skiles, también.

Fue un paseo triunfal en toda regla, un paseo en el que pudieron participar -en minutos competitivos cuando aún se decidía el partido- jugadores como Marks o Babbitt. Un paseo que confirmó el crecimiento del juego del español Rudy Fernández y, en menor medida, del australiano Mills. Y un paseo que constató la explosión de LaMarcus Aldridge, que estuvo inmenso.

Jamás se había visto a un Aldridge tan agresivo en el rebote (batió su registro de capturas en la NBA), tan contundente en la pintura y tan atrevido y activo en la zona. Dominó los tableros y mató el partido con su superioridad manifiesta. El gran damnificado fue un Andrew Bogut (anoche hubo 2 australianos en pista) que fue aniquilado y que se fue con 5 puntos, 5 rebotes y el rabo entre las piernas. Los números de Aldridge: 29 tantos, 19 rebotes y 12 de 18 en el tiro doble.

Tras Aldridge, el dúo Matthews-Fernández, que demuestra día a día que puede jugar junto en la cancha sin problema alguno. Matthews sumó 22 tantos en 28 minutos y Rudy Fernández fue de menos a más, distribuyendo juego en la primera parte y anotando en la segunda.

El español completó su tercer partido seguido de más de 35 minutos y más de 15 puntos. Se le ve feliz. Acabó con 17 puntos, 7 asistencias y 7 de 14 en el tiro de campo. Jugó 39 minutos, el que más lo hizo tras Aldridge, y no perdió un solo balón. Su mayor lunar fue que erró sus primeros 5 intentos triples, aunque luego anotó 2 para un 2 de 7. Penetró con confianza a canasta y dio pases magistrales. Su conexión con Aldridge es de alta escuela, desprende energía.

Milwaukee, muy mal. Un 38% en el tiro, 13 asistencias en todo el partido y sólo Salmons poniendo el máximo empeño por dignificar la situación. Acabó el alero con 23 puntos, mientras sus compañeros veían cómo derrochaba el pundonor que los demás ni siquiera mostraron.

Washington 108 Charlotte 75

Imagen deplorable la ofrecida por los Bobcats de Larry Brown en la capital federal. Una imagen que adquirió su perfil más grotesco al reanudarse el partido tras el descanso. Parcial inicial del tercer cuarto de 21-2, un tercer acto que acabó 31-11 y espantoso ridículo visitante.

El quinteto inicial de los Wizards se abonó a los dobles dígitos ofensivos. Nick Young volvió a brillar con 21 puntos, Blatche hizo 19 y Hinrich 18 puntos y 11 pases de canasta. Y triunfo avasallador sin Wall -lesionado-, Arenas -traspasado- y Rashard Lewis -recién adquirido-.

En Charlotte, desastre colectivo sin paliativos sin que nadie merezca ni siquiera ser mencionado por su tesón. Y en el lado aún más negativo, Mohammed. El pívot fue expulsado por doble técnica cuando apenas había jugado 10 minutos. Visto lo visto, eso que ganó, porque evitó hacer el ridículo en la pista en el tercer cuarto.