Los Spurs siguen sin encontrar las claves para hacer frente a las múltiples variantes de que pueden valerse los Suns. El conjunto de Arizona volvió a mostrarse más completo, sólido y resolutivo en los instantes finales que los texanos.
A un bien defendido Ginóbili le costó buscar la canasta contraria y más aún encontrarla, por lo que el argentino optó por buscar en el pase a sus compañeros, labor en la que sí destacó. Aun así, su trabajo y el de sus compañeros no fue suficiente ante un conjunto local en el que muchos aportaron, destacando la actuación determinante de algunos de sus hombres de banquillo.
Phoenix 110 San Antonio 102 (2-0)
Se inició el partido en Phoenix con los locales luciendo ‘Los Suns’ en su camiseta como protesta contra las nuevas leyes de inmigración del estado de Arizona, pero pronto todo el mundo se olvidó de la polémica levantada por el acto reivindicativo para centrarse en el baloncesto y en el gran encuentro que pudo verse anoche en el US Airways Center.
Un partido del que volvieron a salir vencedores unos Suns que en los 2 primeros encuentros de la serie se han mostrado como un equipo muy sólido y capaz de buscar la victoria por muy variados caminos.
Anoche lo hicieron desde el trabajo en equipo y con una gran labor de sus hombres de banquillo y en especial de Channing Frye y Jared Dudley. El primero anotó 15 puntos, con 5 triples de 6 intentos, y el segundo, 11 con 6 rebotes. Otros anotaron más en el equipo local, pero la intervención de estos dos resultó decisiva para otorgar el empuje extra que Phoenix necesitaba para llevarse el encuentro.
San Antonio comenzó dominando, hasta por 11 puntos en el inicio del segundo cuarto, con Tim Duncan haciendo daño en la pintura, 11 puntos en el primer cuarto, y Manu Ginóbili distribuyendo juego con maestría.
Pero la entrada en juego de las segundas unidades no favoreció a los Spurs, que se vieron superados por la buena defensa de los hombres de banco de los Suns liderados por Dudley, que anotó 7 puntos en los primeros minutos del segundo parcial, lo que permitió a los locales volatilizar la ventaja rival y llegar al descanso con empate a 51.
En la reanudación, se mantuvo la igualdad. Los Spurs vieron cómo mejoraba el juego de Parker y la productividad de Jefferson, aunque Ginóbili sufría para anotar ante el gran marcaje defensivo a que le sometió toda la noche el veterano Grant Hill. No fue suficiente ante unos Suns en los que había muchos más jugadores dispuestos a anotar a la menor oportunidad que se les diera.
A 10 minutos del final, el marcador estaba una vez más empatado, a 80, pero a partir de ahí los Suns empezaron un trabajo lento pero seguro que les permitió ir ensanchando un hueco mínimo pero importante. Un triple de Dudley y otro de Frye y 3 canastas de Grant Hill, letal en el último cuarto, crearon un espacio de 6 puntos a favor de los locales en el que supieron maniobrar con facilidad.
Un triple de Manu a menos de 5 para el final acercó a los Spurs a tan solo 4 puntos, pero fue todo lo cerca que llegaron a estar los de Popovich. Stoudemire y Hill ampliaron poco después a 11 puntos la distancia y a 1:31 para el final, una canasta desde 3 metros de Nash dejó prácticamente sentenciado el encuentro.
Nash sumó 19 puntos, los mismos que Richardson, mientras que Hill terminaba con 18 y Stoudemire, con 23 y 11 rebotes. Los Suns compensaron su menor acierto en el tiro, un 42% por un 50 del rival, dominando el rebote y aprovechando las segundas oportunidades que le otorgaron sus 18 capturas en el tablero contrario.
En los Spurs, Duncan fue el máximo anotador con 29 puntos y 10 rebotes, Parker aportó 20 puntos y 7 asistencias, Jefferson, 18 y 10 capturas, y George Hill, 14 tantos, pero los texanos echaron en falta a un Manu muy bien defendido. El argentino estuvo fino en el pase, 11 asistencias, pero sólo pudo lanzar 8 veces a canasta y únicamente acertó en 2 de ellas para terminar con 11 puntos.
Ahora a San Antonio le toca la difícil papeleta de tratar de levantar una eliminatoria que empieza con un 2 a 0. Sólo 14 equipos lo han logrado a lo largo de la historia en una serie a 7 encuentros, lo que da una idea de la dificultad que entraña la tarea, más cuando delante se tiene a un equipo con la sensación de fortaleza que han ofrecido hasta ahora estos Suns de Alvin Gentry.