Muy distinto signo el que tuvo la noche para los españoles José Manuel Calderón y Rudy Fernández. El primero volvió a cuajar un gran partido y Toronto ganó a pesar de la ausencia de Bosh. El segundo estuvo muy gris y Portland fue sobrepasado por los Celtics.
No hubo color en el Rose Garden. Ni los 34 minutos jugados ya por el recién recuperado Roy, ni el debut de Marcus Camby pudieron con una apisonadora defensiva llamada Boston Celtics, que se impuso de principio a fin.
También los Raptors dominaron desde el primer cuarto. Lo hicieron con una pareja de bases -Jack y Calderón- en estado de gracia y con un Nesterovic que suplió a lo grande a Bosh tejiendo una deslumbrante actuación.
En partido sin hispanos, los Jazz agrandaron su racha al ganar sin problemas a los Warriors liderados por Boozer y Kirilenko.
New Jersey 89 Toronto 106
Tan brillante fue el trabajo de Jarrett Jack y José Manuel Calderón por separado, que Jay Triano no tuvo más remedio que unir sus fuerzas en los 6 últimos minutos de partido para que ambos disfrutaran de su grato estado de forma.
Porque a Calderón ya se le ve pleno físicamente, y eso se nota. Anoche volvió a brillar en los 26 minutos que le concedió Triano, yéndose a 16 puntos, 3 rebotes, 3 asistencias y excelentes porcentajes (6 de 8 en el tiro de campo con 2 de 3 triples y 3 lanzamientos libres sin error).
Mientras, Jarrett Jack fue el más productivo de los locales con 18 tantos y 10 asistencias, sumando ambos bases cifras estadísticas de vértigo: 34 puntos, 13 asistencias, 8 rebotes y 12 de 17 en el tiro de campo.
Pero a esa frescura en la dirección del juego se añadió el efecto sorpresa ofrecido por un jugador de indudable calidad que es, hoy por hoy, jugador residual en la rotación canadiense. Nos referimos a Nesterovic.
El esloveno aprovechó la primera ausencia en la temporada de Bosh para ser titular, hacer un primer cuarto memorable y completar un gran partido con 16 tantos, 7 rebotes y 4 asistencias en 26 minutos. Pura seda de un hombre inteligente en pista, que no salta, no corre, pero tiene una gran mano y un gran sentido del juego en toda su extensión.
Y es que ausente Bosh, en los Raptors emergió la rotundidad de un gran colectivo, con muy buenos componentes, profundidad de banquillo y calidad en esa segunda unidad. Además, les vino muy bien que, sin Bosh, el rival fueran estos desnortados Nets, que deambulan como alma en pena por la competición.
Esa rotundidad del colectivo se apreció en la participación de todos en el triunfo. Hasta 7 jugadores anotaron 10 o más puntos, sumándose al trío Jack-Calderón-Nesterovic la mejora ostensible de Turkoglu, con más espacio para desarrollarse y las buenas aportaciones ofensivas de DeRozan y Johnson y defensivas de Wright. Es más, lo menos brillante del equipo fueron sus italianos, Bargnani porque hizo un partido normalito y Belinelli porque sólo jugó 9 minutos.
Dominaron desde el principio los visitantes (41-56 al descanso), si bien en el tercer cuarto los locales sacaron a relucir algo de amor propio y llegaron a acercarse a 6 puntos. Pero la sangre no llegó al río.
Con un 59,7% de acierto en el tiro, Toronto se impuso a unos Nets que ni defendieron ni atacaron y que tuvieron como mejores hombres a Lopez (22 puntos), Harris (19, 11 asistencias y 4 robos) y Lee (17 tantos). En el lado opuesto, Hayes y Jianlian anotaron 4 de sus 23 tiros.
Portland 76 Boston 96
Mucho peor que a Calderón le fue a Rudy Fernández, que estuvo mal en el plano individual, acorde con lo mal que estuvo su equipo en el plano colectivo.
El internacional español sigue trazando una senda más que irregular que empieza a ser preocupante, más aún cuando tanto el club como Nate McMillan siguen expresando su máxima confianza en el jugador.
Se toparon los Blazers con unos Celtics que venían con la adrenalina en todo lo alto tras ganar a los Lakers en el Staples Center, unos Celtics a los que no les pesó el esfuerzo de la noche anterior, sino todo lo contrario.
Desde el primer momento, la defensa visitante marcó la hoja de ruta del partido, que ya se preveía, viendo a los entrenadores, como un auténtico duelo defensivo a pesar de la calidad ofensiva de ambos equipos.
Pero no hubo duelo en la retaguardia porque la contundencia de Boston no tuvo respuesta del rival, que fracasó ofensivamente hasta límites insospechados al acertar un 33,8% de sus tiros y ser capaz de conectar sólo ¡7 asistencias en todo el encuentro!.
Ese espectacular trabajo defensivo alcanzó su máxima expresión en el segundo cuarto cuando los bostonianos dejaron en 13 puntos al conjunto de Oregón para alcanzar el ecuador del choque 18 arriba (38-56).
Fue un mal día para debutar, que es lo que le pasó al bueno de Marcus Camby, al que se le vio fuera de la dinámica del equipo en un partido en el que el juego interior de los locales quedó completamente aniquilado por los hombres altos de Boston.
Y resultó un poco triste ver cómo Roy ya se aventuraba a jugar 34 minutos con un físico que no estaba para jugar todo ese tiempo, al menos a su nivel habitual.
La discreción de Roy y los malos partidos de Webster, Rudy Fernández y Batum marcaron la derrota, en la que sólo Aldridge, Miller y Bayless salvaron los muebles personales.
Rudy acabó con 5 puntos, 2 robos y 1 tapón en 24 minutos en los que estuvo desacertado -1 de 7 en el tiro errando todos los triples que intentó-.
Boston aturdió al rival con físico y agresividad, pero también con calidad. La de Ray Allen, en forma por el Oeste, que anotó 21 puntos, la de Kevin Garnett (tremendo con 17 puntos, 7 rebotes y 3 tapones en 22 minutos), la de Rajon Rondo (11 asistencias)...
Los Jazz, imparables
Mientras, Utah sigue a lo suyo, que es ganar sin parar. Anoche derrotó a los Warriors (89-100) para acercarse ya a la segunda plaza del Oeste que regenta Denver.
La enorme racha de resultados del equipo mormón coincide con la recuperación del mejor Kirilenko, perdido durante mucho tiempo en esta liga. Boozer (30 puntos y 16 rebotes) y Kirilenko fueron los artífices del nuevo éxito. El ruso regresó a su baloncesto completo: 22 puntos, 5 rebotes, 5 robos, 4 asistencias y 3 tapones.
Sin Okur, Millsap fue titular. Y C.J.Miles sobresalió en la segunda unidad.
Con un demoledor 10-31 en el segundo cuarto, sentenciaron los visitantes, que asistieron ¡32 de sus 38 canastas!. Prueba de conjunción colectiva.
Los Warriors, pobres. C.J.Watson hizo 22 puntos. En el lado opuesto, los 6 puntos de reaparecido Monta Ellis con 2 de 14 en el tiro y las 10 pérdidas de balón de Stephen Curry.