Los Raptors volvieron a la senda del triunfo tras encadenar 6 derrotas consecutivas que habían terminado de minar la escasa moral que le quedaba al equipo. Sin Bosh, Toronto ganó en Minnesota a unos Wolves sin Jefferson. Calderón acabó con 11 puntos y 9 asistencias.
La contribución del español fue importante en la parte final del partido, aunque el jugador clave de los visitantes fue el suplente Jason Kapono, que lideró al inicio del último cuarto la remontada canadiense.
Lejos de Minneapolis, en Dallas, los Mavs se deshacían con facilidad de unos Kings que están cada vez más de capa caída. Antoine Wright fue el jugador local sorpresa, mientras que José Juan Barea en Dallas (10 puntos y 4 asistencias) y Francisco García en Sacramento -11 puntos en 18 minutos- rindieron a buen nivel.
Minnesota 102 Toronto 110
Toronto definió por una vez un partido en el último cuarto, algo inusual para los Raptors, que desgraciadamente están habituados esta temporada a tirar por la borda en los últimos minutos el trabajo realizado en los minutos precedentes.
Las alineaciones iniciales nos dejaron dos equipos mermados en su espectáculo, pues los jugadores franquicia de ambos conjuntos no fueron de la partida. Los visitantes no pudieron contar con Chris Bosh, cuya lesión le impedirá ir al All-Star de Phoenix, y los locales acudían a la cita sin su referencia imprescindible, sin el joven que es santo y seña de este equipo, Al Jefferson, cuya rodilla maltrecha le va a dejar fuera de juego por lo que resta de temporada.
Fue la baja de Jefferson más crucial que la de Bosh, no sólo porque lo diga el resultado, sino sobre todo por la distribución del juego y los puntos. Y es que los jugadores interiores de Toronto no tuvieron mucha oposición en la pintura. El 5 de los Raptors, Jermaine O'Neal, acabó con 22 puntos y 8 rebotes y sus dos jugadores que ejercen de 3-4, Graham y Bargnani, aportaron 24 y 18 puntos. Por si fuera poco, otro alero con propensión al rebote, el suplente Jamario Moon, también destacó con 11 tantos y 9 rebotes.Y es que Kevin Love, a pesar de hacer un buen partido -15 puntos y 11 rebotes- resultó insuficiente en la zona. Imagínense cuando estos Wolves se enfrenten a un equipo con verdadero poderío en la pintura...
A ese poderío interior -si bien jugadores como Bargnani, Graham o Moon no son estrictamente interiores- hubo que añadir para conseguir la victoria otros dos condimentos: el tino organizativo de José Manuel Calderón y la certera mano desde el exterior de un enchufadísimo Jason Kapono.
Fue Kapono la clave del encuentro. Desde su mira telescópica, la de un gran tirador, se echó el equipo a la espalda cuando peor pintaban las cosas, y al inicio del último cuarto, con 80-73 a favor de Minnesota su buena mano cambió el rumbo del encuentro.
Anotó Kapono un triple nada más iniciarse ese cuarto final, un triple que fue acompañado de tiro adicional. Luego, de inmediato, hizo otros 2 puntos para sumar 6 consecutivamente e iniciar un parcial de 11-2 que reactivó al equipo canadiense y metió a los de Triano en la refriega.
Los visitantes se adelantaron tenuemente y fueron aguantando el luminoso, llegándose a los últimos 3 minutos con 93-98 a su favor. En esos 180 segundos, surgieron dos de los grandes pesos pesados de los Raptors: Calderón y O'Neal, que anotaron 6 puntos cada uno.
El español encestó una importante canasta a 2:30 del final que colocó el luminoso 93-100 y cerró el partido en los últimos segundos con 4 tiros libres consecutivos sin fallo. O'Neal anotó 6 puntos entre medias.
Mientras, Minnesota se hundía y sólo Randy Foye se agarraba a los restos del naufragio para intentar sacar a sus compañeros a flote, pero no pudo, a pesar de anotar 10 de los últimos 11 puntos locales y marcharse a la ducha con 33 puntos y 8 rebotes.
Los números:
- Minnesota: Foye 33 pt y 8 reb; Gomes 17 pt; Love 15 pt y 11 reb.
- Toronto: Graham 24 pt, 6 reb y 3 tp; O'Neal 22 pt y 8 reb; Kapono 18 pt en 22 min (7 de 10 tc); Bargnani 18 pt.
- Los visitantes ganaron el último cuarto por 22 a 37.
- Los Raptors rompieron una racha de 6 derrotas consecutivas.
Dallas 118 Sacramento 100
Mientras el partido se desarrolló sin defensas, Sacramento estuvo a gusto. Eso ocurrió en el primer cuarto (38-31) y en menor medida en el segundo. Se llegó así al descanso con un igualado 62-57. Pero a Carlisle se le debió de agotar la paciencia en el descanso, porque los Mavericks salieron del vestuario con una dinámica bien distinta a la de los cuartos anteriores.
La mejora de Dallas en la retaguardia fue notabilísima y, a base de apretar las tuercas en defensa a un endeble rival, teminó dejándole en unos pobrísimos 14 puntos en el tercer cuarto. Ese cambio de mentalidad, ese mayor sacrificio defensivo fue la clave de un partido que no supuso demasiados quebraderos de cabeza para los locales, que cuando forzaron la máquina se fueron sin remisión en el luminoso.
Y eso que no contaban son su segundo de a bordo, con Jason Terry, aspirante principal a Mejor Sexto Hombre de la liga. Su baja por lesión beneficiará sin duda al puertorriqueño José Juan Barea, como ya se pudo comprobar ante los Kings. Barea fue el mejor suplente y su estancia en la pista se prolongó 26 minutos. Terminó el armador boricua con 10 puntos y 4 asistencias tras una acertada noche en el tiro (5 de 6 en el doble y 0 de 1 en el triple), especialmente en la primera parte, cuando anotó 8 de sus 10 tantos.
Pero en realidad el gran beneficiado fue otro escolta, Antoine Wright, que desde la titularidad asumió plenamente y para sorpresa de muchos el rol de Terry. Wright estuvo colosal y fue, sin duda, el jugador del partido. Hizo el escolta local 23 puntos en 24 minutos, tiempo en el que ejecutó 14 tiros, lo que habla a las claras del gran protagonismo que tuvo en la ofensiva. Además defendió, incluyendo en su haber 3 robos de balón.
Sin embargo, lo mejor de Wright fue su asunción de responsabilidades en el partido, pues anotó 19 de sus 23 puntos en la segunda parte y 11 de ellos en ese tercer cuarto que decidió la suerte del encuentro.
Formó Wright un triángulo perfecto con Josh Howard -23 puntos- y Dirk Nowitzki -21-, piezas básicas en ataque a las que se sumaron el completísimo partido de Jason Kidd, que recordó su mejor versión y aportó en todos los campos (15 puntos, 12 asistencias, 7 rebotes y 4 recuperaciones), y la gran labor en los tableros de un Dampier que no encontró demasiada oposición en la pintura y acabó con 16 rebotes y 3 tapones.
Frente a todo ese catálogo ofensivo y defensivo, Sacramento opuso bien poco. Kevin Martin fue su máximo encestador, pero tuvo una aciaga noche en el tiro, Salmons respondió a medias y la única buena noticia residió en el fantástico rendimiento de Sheldon Williams -15 puntos y 5 rebotes-. En esa vorágine negativa, el dominicano Francisco García salvó con un papel muy digno sus 18 minutos de estancia en la pista. Anotó 11 puntos con muy buenos porcentajes y su imagen no fue precisamente una de las más dañadas.
Dañado, eso sí, quedó la imagen del equipo, que suma 11 victorias en 53 partidos. Los Kings permitieron que su rival anotara con facilidad (55,3%) y sufrieron un desastre colectivo en la lucha por el rebote, un desastre que se hizo evidente en el tablero local, donde Dallas capturó ¡36 rechaces por 3 Sacramento!. Esta es la clase de dato que revela la falta de agresividad de un equipo que llegó a ir perdiendo por 27 puntos.
Mientras, Dallas Mavericks sigue a lo suyo. Una labor callada que poco a poco va dando sus frutos. Y el equipo de Barea se va afianzando sin estridencias en los puestos de playoff.
Los números:
- Dallas: Wright 23 pt y 3 rob en 24 min; Howard 23 pt, 6 reb y 5 as; Nowitzki 21 pt y 8 reb; Kidd 15 pt, 12 as, 7 reb y 4 rob; Dampier 16 reb.
- Sacramento: Martin 18 pt y 3 rob (4 de 15 tc); Salmons 16 pt; Williams 15 pt y 5 reb.
- Los visitantes lanzaron mejor de 3 que de 2.
- Dallas capturó 36 rebotes de los 39 que se disputaron en su tablero.
Denver no desfallece
Denver Nuggets no levanta el pie del acelerador y en encuentro sin presencia hispana se desembarazó con plena solvencia de los Heat en Miami (82-99).
Tremenda está siendo la temporada del equipo de George Karl, al que le ha sentado muy bien el efecto Billups.
Precisamente Chancey Billups fue el máximo anotador de Denver con 23 puntos, seguido de Carmelo Anthony -19 y 9 rebotes- y Kenyon Martin -18 y 10-.
Los locales dejaron escapar medio partido en la primera mitad (40-56) y el otro medio se les fue en sus 19 pérdidas de balón. Wade estuvo completamente aislado (33 puntos y 7 rebotes). Sólo cabe destacar entre el resto de sus compañeros los 5 tapones que puso Joel Anthony.