Aciaga temporada de Ricky Rubio que toca definitivamente a su fin. El tobillo izquierdo amargó el curso al base de El Masnou desde que sufriera una seria lesión en él a principio de noviembre y ya nada fue igual.
Su equipo ha anunciado hoy que no jugará más en la presente temporada, a la que le faltan 6 partidos de fase regular. Ha sido su entrenador y general manager, Flip Saunders, el que lo ha avanzado en Fox Sports North.
De este modo, Rubio termina la temporada habiendo jugado solo 22 de los 82 partidos programados. La lesión de noviembre le dejó 3 meses sin jugar y la recaída sufrida a mediados de marzo le tiene por el momento más de 2 semanas en el dique seco y se anuncia que precisará un mes más de descanso para recuperar el tobillo.
En esos 22 encuentros, Rubio nunca pudo adquirir un gran ritmo competitivo. Sus estadísticas se sitúan en 10,3 puntos, 5,7 rebotes, 8,8 asistencias y 1,7 robos. Lo peor, sus malos porcentajes: un 36% en el tiro de campo y un 25% en triples. Eso sí, con él el equipo funcionó relativamente bien y sin él fue un auténtico desastre.
Y es que además de su mala temporada a nivel personal, el curso de los Wolves ha sido un desastre motivado en gran parte por la catarata de lesiones que ha sufrido y sufre el equipo.