Tras algunos dimes y diretes, ciertas dudas y muchas especulaciones, todo se ha quedado en su sitio y Dwyane Wade permanecerá un año más en el que ha sido siempre su hogar de la NBA, Miami Heat, tras cumplir con su objetivo salarial: 20 millones de dólares anuales.
Eso sí, el acuerdo ha quedado lejos de las pretensiones iniciales. Parecía que se buscaría un contrato con una duración más allá del logrado, que es por solo una temporada, pero no ha sido así.
Wade se había salido de su contrato anterior renunciando a los 16,1 millones de dólares que iba a cobrar en su último año. Lo hizo porque consideraba que al menos debería percibir 20 millones dado el sacrificio económico que había hecho con LeBron James y Chris Bosh para llevar al equipo al éxito. Y ese acuerdo por 20 millones ha llegado.
"La familia Heat y yo hemos compartido momentos increíbles durante estos años y tenemos muchas ganas de proseguir nuestro viaje", ha asegurado la estrella de Heat nada más trascender su continuidad con el equipo.
Manteniendo la columna vertebral
Miami está consiguiendo mantener en sus filas a su columna vertebral al asegurar ya la continuidad de Dwyane Wade, Goran Dragic y Luol Deng, que no es poco.
Lo de Wade iba más allá de lo deportivo, ya que con él había un componente emocional indudable. D-Wade ha consumido todo su tiempo NBA, 12 años, en el equipo de Florida, con el que ha promediado 24,1 puntos, 4,9 rebotes y 5,9 asistencias en 781 partidos y con el que ha ganado 3 anillos de campeón desde que llegó de Marquette.