JORNADA NBA / playoffs 2013 (finales este)

LeBron James firma el triunfo con una canasta sobre la bocina de la prórroga

James acaba con un triple-doble para superar a un George que forzó la prórroga con un triple

hispanosnba.com |

LeBron James en el momento de anotar la canasta que decidió el encuentro
LeBron James en el momento de anotar la canasta que decidió el encuentro (Zuma Press/Icon SMI)

No han podido empezar mejor las Finales de la Conferencia Este. Partido inaugural igualadísimo entre Miami e Indiana que se decidió en la prórroga con una canasta sobre la bocina de un LeBron James que firmó un triple-doble y acaparó todos los focos.

Espectacular el duelo entre LeBron James y un Paul George que había llevado el encuentro a la prórroga con un triplazo anotado en el último segundo del cuarto final. También George había mostrado su tremenda templanza metiendo 3 tiros libres consecutivos en la penúltima jugada del partido para poner un amenazante 101-102 en el marcador. Segundos después, llegó LeBron para superar la defensa de George y arruinar su alegría.

Fue este primer asalto un partido espectacular por lo equilibradísimo del marcador. Hubo 18 empates y 17 cambios de liderazgo en el luminoso. La máxima ventaja local fue de 5 puntos y la visitante de 7. Un partido de playoff en estado puro. Una delicia.

Miami 103 Indianaa 102 (tras prórroga) (1-0)

Restaban 2,2 segundos para el final de la prórroga. Ganaba Indiana en Miami 101-102 tras una muestra de templaza máxima de Paul George, que había embocado los 3 tiros libres de los que había dispuesto en la jugada anterior. Miami había pedido tiempo muerto para preparar la jugada final, en la que se lo jugaba todo.

Sacó Shane Battier de banda, hubo algún bloqueo sobre la cabeza de la bombilla, LeBron James salió a recibir corriendo en dirección a la línea de 3 con su par, Paul George, a su lado, el balón llegó a James con los pies pisando el triple en posición de ataque frontal a canasta y tras recibir llegó el desenlace.

James mostró la explosividad de su primer paso, dejó atrás con gran facilidad a su defensor y tuvo expedito el camino a canasta, porque nadie salió a hacer una ayuda a George y porque nadie había cerrando la canasta, puesto que Roy Hibbert estaba en el banquillo en esta última jugada por decisión de Frank Vogel.

El resultado fue una canasta fácil de LeBron sobre la bocina. Y un triunfo por los pelos. Estalló la grada, una grada blanca que había sufrido, y mucho, a lo largo del partido. Estalló la pista, del lado local. LeBron James terminaba anotando la canasta del triunfo sobre la bocina de la prórroga. ¡Y acababa con un triple-doble un partido inolvidable!.

Parafraseando la canción que tan brillantemente interpretara en su día Vicente Fernández, LeBron James sigue siendo el rey. Por si alguien dudara de su indiscutible reinado, esta noche el monarca del baloncesto mundial se ha levantado un momento del trono para hacer una escabechina y volver a sentarse en él. Tras hacer un trabajo duro, eso sí. Exigido, y mucho, por los contrincantes.

Reinó James en un partido memorable. Por intenso, por igualado, por duro en el terreno físico y mental, por pasional, por cardíaco. Porque el arranque de estas Finales del Este Miami-Indiana no pudo ser más espectacular. Un encuentro en el que LeBron James y Paul George fueron protagonistas esenciales.

Porque George mantuvo a los suyos con la esperanza de la victoria. Una pena para él y los suyos esa deficiente defensa final sobre LeBron en el último suspiro. Porque méritos había hecho el alero de Pacers para convertirse en jugador del partido.

Fue George el que llevó el partido a la prórroga con 0,7 segundos por jugar del cuarto cuarto. Lo hizo con un triplazo desde su casa, con James merodeando su defensa sin éxito. Y fue George el que puso en la prórroga el 101-102 en los últimos segundos tras una jugada agónica y polémica. Atacaba Indiana para igualar o empatar con el tiempo extra expirando. Los Pacers estuvieron a punto de perder el balón en medio campo, jugadores en el suelo a por el balón dividido, un instante de dramatismo, balón para los visitantes, intentó de 3 de George y los árbitros pitan falta de Dwyane Wade sobre el tiro. Protestas variadas. Decisión inapelable.

La situación no era fácil y George es joven. Pues bien, el alero de Indiana metió lo 3 tiros libres seguidos y obligó a que instantes después James reivindicara su reinado planetario.

Tuvo George la placidez de espíritu de la que no gozó antes el casi infalible Ray Allen. Corrían los últimos segundos del cuarto cuarto y el marcador reflejaba un 91-89 para Miami. En la jugada anterior, George había perdido un balón que se antojaba decisivo tras dar un pase al vacío. Sacaron de banda los locales y la falta cayó sobre Allen. Mal pasajero. Quedaban 17 segundos y si metía los 2 libres cerraba prácticamente el partido. Ray es uno de los mejores tiradores de libres de la historia de la NBA. Pues bien, erró el primero ante la incredulidad general y anotó el segundo, dejando abierto el desenlace del tiempo reglamentario.

En ese pequeño hueco abierto por Ray Allen, desafortunado toda la noche, se metió como un torrente Paul George para fabricar ese triple imposible en el último segundo que empató a 92 y forzó la prórroga.

Al final, Miami acabó ganando como podía haber acabado perdiendo. Ganó con una canasta anotada en la pintura, 2 de los 60 puntos que Heat hizo de ese modo en un partido caracterizado por su extrema igualdad, la lucha bajo los aros, que deparó muchos rebotes ofensivos, y las pérdidas, también muchas, provocadas en gran parte por la gran intensidad defensiva de ambos contendientes.

Un partido en el que LeBron encabezó a los suyos con 30 puntos, 10 rebotes, 10 asistencias y 3 tapones, firmando un gran triple-doble. A su lado, los 19 puntos de Dwyane Wade, los 17 de un Chris Bosh nulo en el rebote y la actuación estelar del intensísimo Chris Andersen, ¡autor de 16 puntos, 5 rebotes y 3 tapones en 18 minutos tras no fallar un solo tiro: 7 de 7 de campo y 2 de 2 en libres!.

En Indiana, poderío del trío formado por Paul George (27 puntos y 5 asistencias), David West (26 tantos) y Roy Hibbert (19 con 9 rebotes). George Hill estuvo en tono menor, Lance Stephenson trabajó bien atrás y muy bien en el rebote, pero apenas fue amenaza ofensiva y Tyler Hansbrough puso el contrapunto intenso a Andersen aportando desde la segunda unidad 10 puntos y 6 rebotes en 12 minutos.

Todo ello en un encuentro vibrante. Desde luego, aquellos que pensaran que estas Finales iban a ser  camino plácido para Miami Heat se han topado muy pronto con la realidad. Y es que Indiana es un equipo hecho que va a poner, en principio, las cosas difíciles a los indiscutibles favoritos.

El primer cuarto ya mostró la igualdad latente en el partido: 22-21 con LeBron James y David West liderando a sus respectivos equipos. Y el segundo nos dejó la máxima renta que se registró en el marcador a favor de uno de los contendientes. Fue un 32-39 -7 insignificantes puntos-. Llegó tras un tiro lejano de Roy Hibbert. Restaban 2:53 para el descanso.

Al descanso se llegó con un 37-42 favorable a Indiana. Gran trabajo defensivo visitante en la primera parte y felices minutos ofensivos de David West, autor de 16 puntos.

En el tercer cuarto, Mario Chalmers se lesionó un hombro al toparse con el corpachón de Roy Hibbert cuando éste efectuaba un bloqueo. La tónica no cambió. Equilibrio extremo. Un equilibrio con el que se llegó al último cuarto y que desembocó en una prolongación de 5 minutos.

Ya en el tiempo extra, los equipos estuvieron casi 2 minutos sin meter una canasta en juego. Paul George hizo un 2+1 para poner el 96-99 en el marcador y Chris Bosh replicó con otro 2+1 para empatar a 99 con 49 segundos por jugar. Y luego llegó ese duelo LeBron-George del que salió triunfante LeBron tras meter 2 canastas en los últimos 10 segundos. En los 4:50 anteriores de la prórroga, James se había quedado sin anotar.

Esas 2 cestas finales fueron ‘made in LeBron’, en 2 unos contra unos, tirando de su explosividad majestuosa, de su primer paso imparable. Primero contra George Hill, a falta de 10 segundos, después ante Paul George, sobre la bocina. Ese primer paso de LeBron ha sido el primer paso de Miami en estas Finales del Este.