Si hace unas semanas las noticias sobre Anderson Varejao no eran buenas para los Cavs, las que nos llegan hoy son peores. El brasileño ha sufrido complicaciones tras su operación de rodilla y se encuentra ingresado tras detectársele un trombo en el pulmón derecho.
El jugador fue intervenido hace poco más de una semana -cuando ya llevaba más de 15 días sin jugar tras lesionarse el pasado 18 de diciembre- al descubrirse que la fuerte contusión que sufría en la rodilla derecha se debía a una rotura en el músculo vasto interno y se esperaba que se perdiera entre 6 y 8 semanas de juego.
Sin embargo, días después de la operación han surgido complicaciones derivadas de la misma y, el pasado jueves, día 17, el jugador tuvo que ser ingresado de urgencia en la Cleveland Clinic al no encontrarse bien.
Allí permanece ingresado, después de que los médicos detectaran la presencia de un pequeño trombo o coágulo en la sangre localizado en el interior del tercio inferior de su pulmón derecho. Una dolencia seria que le mantiene en el hospital desde entonces y que aún le obligará a estar hospitalizado algunos días más, sometido a tratamiento médico y bajo observación.
Para tratar la dolencia, los médicos han tenido que administrarle altas dosis de anticoagulantes, una medicación que habrá de seguir tomando al menos 3 meses y que le impedirá volver a jugar en lo que resta de temporada. Afortunadamente, el pronóstico del pívot de los Cavs es bueno y los médicos esperan que se recupere completamente.
Hasta el momento de su lesión, Varejao había promediado 14,1 puntos y 14,4 rebotes en 25 partidos y encabezaba la lista de mejores reboteadores de la actual temporada.