Philadelphia derrotó por estrecho margen a Boston. Nocioni no jugó, pero Arroyo sí lo hizo. El puertorriqueño estuvo en pista 13 minutos pero sigue sin ganar con su nuevo equipo, los Celtics. Mientras, Chicago ganó a Atlanta y se sitúa a un paso de adelantar a Boston en la tabla.
El triunfo de los Bulls fue claro y el equipo de Thibbodeau presenta ya un balance de 46 victorias y 18 derrotas por el 46-17 que tiene Boston. Acarician los de Illinois el liderato del Este. El dominicano Horford no tuvo su día en la ofensiva, pero al menos ayudó en facetas como el rebote, los tapones o los pases de canasta.
En Mineápolis, mientras, triunfo fácil de los Wolves sobre los Jazz de Utah con otro doble doble de Kevin Love y muy buena actuación en los mormones del novato Hayward.
Philadelphia 89 Boston 86
Philadelphia fue uno de los mejores equipos de la NBA en el mes de febrero y no quiere perder fuelle en marzo.
Anoche, sin ir más lejos, doblegó a los Celtics en un partido extremadamente equilibrado en el que los locales trataron de tú a tú a los visitantes en el marco defensivo, lo que al fin y a la postre marca el camino de los ganadores.
Los Sixers tuvieron el partido bajo contro. De hecho, jamás llegaron a perder por más de 2 puntos con su rival. Un control que fue de ida y vuelta, porque tampoco pudieron despegarse de verdad de los actuales subcampeones de la NBA. Y el partido se decidió a última hora con una canasta de Iguodala a 12,8 segundos del final que suponía un tranquilizador 89-84 que bien festejaron los más de 20.000 espectadores que se dieron cita en el Wells Fargo Center.
Los locales sólo perdieron 8 balones y vivieron de la responsabilidad compartida. Los 9 jugadores que utilizó Doug Collins anotaron y todos se situaron entre los 4 y los 14 puntos. Reparto equitativo en los roles ofensivos. Todos fueron partícipes de la victoria.
Hawes (14 puntos y 10 rebotes) y Brand (otros 14 tantos) fueron los más productivos en anotación, pero el más productivo en la realidad fue Iguodala, que acarició el triple-doble -13 tantos, 9 rebotes y 8 asistencias- y decidió al final. El argentino Andrés Nocioni no jugó, como viene siendo desgraciada costumbre.
En Boston, subversión de roles. Y es que dos jugadores nuevos, Jeff Green y Nenad Krstic, ex compañeros en los Thunder, fueron los mejores. El primero hizo 18 puntos en 24 minutos y el segundo se fue a 16 y 15 rebotes. Garnett estuvo bien, pero el resto de los clásicos no funcionó: Rondo y Pierce se mantuvieron muy discretos y Allen estuvo directamente mal.
Mientras, Carlos Arroyo volvió a tener su espacio. Jugó 13 minutos e hizo 6 puntos, 2 asistencias y 1 robo. Estuvo bien, pero ha perdido los 2 encuentros que ha jugado con su nueva elástica.
Chicago 94 Atlanta 76
Los Bulls están que se salen. Si hace unos días pasaron en la clasificación a Miami situándose en la segunda plaza en el Este, ahora amenazan incluso el liderato de los Celtics. Y es que la victoria de Chicago unidad a la derrota de Boston sitúa a ambos equipos prácticamente en plano de igualdad.
El rival de anoche no era precisamente fácil, pero acabó cediendo y de muy mala manera. Porque Atlanta completó una gran parte para terminar haciendo el ridículo en la segunda. Primera mitad: 48-50. Segunda mitad: 46-26. Los números hablan por sí solos.
Es verdad que estos Bulls de Thibbodeau defienden mucho, pero no es menos cierto que el equipo de Larry Drew tiene cierta tendencia a dormirse en pájaras impresentables en ataque, minutos en los que pierde el pulso y su ataque se convierte en una verbena triste. Sucedió en el United Center.
El tercer cuarto se saldó con un 24-10. Y si ya es penoso meter 10 puntos en 12 minutos, aún lo es más anotar sólo 26 en toda una segunda parte.
Chicago dominó el rebote a su antojo (50 a 28 con un 34 a 4 en su aro). Un rebote que fue de hombres como Kurt Thomas (13 capturas) o Joakim Noah (11), jugadores ambos que se desentendieron del ataque (4 y 0 puntos respectivamente).
Para atacar ya estaba Rose, autor de 34 puntos con una serie irregular, siendo finos, de 9 de 24 en el tiro. Capturó 6 rebotes y repartió 5 pases decisivos. Muy completo el partido de Deng -18 tantos, 9 rebotes y 7 asistencias-. Pero lo más importante fue el citado sacrificio de los hombres altos en el rebote (el equipo, no hay que olvidar, tenía la baja de Boozer) y el tremendo rendimiento de la suplencia, pues los 7 suplentes anotaron y de forma pareja.
Además, los hombres altos pararon a Horford, que sólo hizo 6 puntos en 40 minutos. Eso sí, el dominicano, al menos, capturó 7 rebotes, puso 4 tapones y dio 5 asistencias. Joe Johnson, Josh Smith y Jamal Crawford fueron los mejores anotadores visitantes con 16, 15 y 14 puntos.
Minnesota 122 Utah 101
Varapalo serio de los Jazz en Mineápolis. Y es que el 39-28 del primer cuarto no hacía presagiar nada bueno para el equipo de Corbin.
Kevin Love siguió a lo suyo y lideró a los locales con un nuevo doble doble (24 puntos, 12 rebotes y muy buenos porcentajes en 30 minutos). Michael Beasley le secundó con 23 tantos y Darko Milicic lo hizo bien.
En Utah, volvió Kirilenko, sin brillo alguno, y el mejor fue el novato Hayward, que logró 18 puntos con un fantástico 5 de 5 en el triple.