JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2010-2011

Calderón reparte 19 asistencias y lidera la primera victoria de Toronto en un mes

Portland cae en Indianápolis pese al gran partido de Rudy Fernández, que anota 19

Utah gana en Denver en el regreso de D-Will y los Thunder se imponen a los Suns

hispanosnba.com |

Toronto Raptors derrotó a Minnesota Timberwolves y cortó así una horrible racha de 13 partidos perdidos de forma consecutiva. La magistral dirección de Calderón (19 asistencias) y el poder anotador de Bargnani (30 puntos) fueron decisivos.

El 19 pareció marcar la noche en el caso de los jugadores españoles. Porque 19 fueron los puntos de Rudy Fernández que le sirvieron para convertirse en el mejor anotador de los Blazers, pero pada nada más, ya que Portland perdió en Indiana y sigue complicándose la vida. Por de pronto, ya ha perdido la octava plaza en el Oeste a manos de Memphis. Rudy fue el jugador más utilizado por McMillan, algo más de 37 minutos. Eso sí que es noticia.

Además, regresó Deron Williams a Utah Jazz y su equipo mejoró tanto que acabó ganando en Denver, donde no jugó Gary Forbtes. Y Oklahoma City derrotó a los Suns en Phoenix con un gran Serge Ibaka.

Toronto 111 Minnesota 100

En el vestuario de Minnesota, había un ambiente alegre antes de empezar el partido. Los jugadores de los Wolves ofrecieron un cálido aplauso a su compañeros Kevin Love, que para entonces ya era jugador All-Star en sustitución de Yao Ming. Pero Love, a pesar de su muy buena actuación, no pudo celebrar en Toronto la buena noticia con una victoria.

De victorias estaban muy necesitados los Raptors. Acumulaban 13 derrotas consecutivas. No ganaban desde el 2 de enero, hace ya más de 1 mes y todas las alarmas estaban sonando desde hace días en la franquicia. Pero anoche, salieron al rescate un español, José Manuel Calderón, un italiano, Andrea Bargnani, y un estadounidense, Amir Johnson, y apagaron todos los fuegos. Al menos, los principales.

Faltaban unos segundos para concluir el partido. Calderón se escapó de la presión que ejercían varios rivales en el lateral del propio campo de Toronto y dio un pase largo que acabó con volcada de espaldas de Wright. Esa jugada constataba 2 hechos alegres: los Raptors ganaban por fin un partido y Calderón terminaba el encuentro con 19 asistencias, empatando el récord de la franquicia y su propio récord, que compartía y comparte aún con Stoudamire. La suya, ante Minnesota, fue una lección magistral de cómo guiar a un equipo por el buen camino.

Calderón lleva una media impresionante de asistencias desde que recuperó la titularidad del equipo, pero esta vez se salió. Al descanso, el base extremeño había perdido 4 balones, algo extraño en él, pero ¡ya había repartido 10 asistencias!. Y la exhibición en el pase no se detuvo en la segunda parte. Terminó con 6 puntos (2 de 7 en el tiro), 3 robos y 19 asistencias.

A su lado, un gran Bargnani, que también quiso dar un paso adelante y aplacar la críticas. El jugador transalpino anotó 30 puntos. DeMar DeRozan hizo 20 con 10 de 13 en el tiro de campo y Amir Johnson ofreció un partido completísimo, porque todo lo hizo bien: 19 puntos, 12 rebotes, 6 asistencias, 3 robos y 8 de 10 en el tiro de campo. Sonny Weems se fue a 16 y hasta el recién incorporado Trey Johnson se animó con 10 tantos en 18 minutos.

Toronto anduvo firme todo el partido. Anotó el 54.8% de sus tiros y sumó 35 asistencias bajo el mando único de Calderón, que sabía que tenía que dar el do de pecho porque no tenía suplentes de garantías -Bayless y Barbosa están lesionados-.

Minnesota tuvo la desgracia de perder a Beasley en el segundo cuarto por un esguince de tobillo. Kevin Love corroboró su recién estrenada condición de All-Star calcando prácticamente sus medias, pues acabó con 20 puntos y 15 rebotes (anotó 3 triples). Telfair sumó 16 tantos en 22 minutos, Milicic, que hizo una gran primera parte, concluyó con 15 puntos, 7 rebotes y 4 tapones y Brewer añadió otros 15 puntos.

Indiana 100 Portland 87

Preocupación en Portland, y con toda la razón, por la mala racha de resultados del equipo y porque el peligrosísimo acercamiento de Memphis en la clasificación culminó anoche con la pérdida de la octava posición, la última que da derecho a jugar playoffs. Tras los resultados de anoche, unos ascendentes Grizzlies ocupan ya la octava plaza y unos decadentes Blazers, la novena.

En el lado contrario, sensación opuesta. Los Pacers no pierden desde que Frank Vogel suplió a Jim O'Brien al frente del equipo. El nuevo técnico ha dirigido 3 partidos y ha firmado 3 victorias. Todo marcha viento en popa.

Portland decepcionó. El conjunto de Oregón estuvo negado en ataque, sólo acertó el 36,4% de sus tiros, hizo un 5 de 20 en el triple y fue un desastre en el rebote (39 por 58 capturas del rival). Claro ejemplo en este campo fue el dominio incontestable de Jeff Foster en el tiempo que estuvo en cancha. El bueno de Foster se lo pasó en grande: 13 rebotes en 22 minutos de juego. El problema interior de los Blazers es serio ante su falta de hombres altos.

En un triste partido, lo mejor de Portland fue la fantástica primera parte protagonizada por Rudy Fernández, un Rudy desatado que se fue al descanso con 16 puntos tras haber jugador 18 minutos, puntos que acompañó con 2 rebotes y 3 asistencias. En la segunda parte, bajó el pistón, pero el español terminó siendo el jugador visitante que más jugó (algo más de 37 minutos) y el que más anotó (19 puntos).

En Indiana, la voz cantante la llevó Danny Granger -25 puntos, 9 rebotes y muy buen tino en el lanzamiento-). Hibbert, que se va entonando, Hansbrough y Collison también superaron la decena y, como dijimos, Jeff Foster sacó el látigo en los tableros.

Rudy fue el mejor visitante con 19 puntos, 3 rebotes, 5 asistencias y 2 robos en 37 minutos. Estuvo incisivo y no se cortó a la hora de encarar el aro (7 de 16). Lo mejor es ver cómo ha abandonado su cómoda posición de especialista en el triple. Ahora ya hace lo que hacía en España, anotar desde cualquier posición y penetrar más.

Batum, Miller y Aldridge anotaron 14, éste último con 10 rebotes en un partido más bien gris (4 de 12 en el tiro), como gris fue la actuación de Matthews.

Denver 106 Utah 113

Fue regresar Deron Williams a los Jazz y cambiar todo. El equipo mejoró en todos los aspectos del juego y esa mejora le sirvió para ganar en una siempre difícil cancha como es la del Pepsi Center, con un rival de cuidado como son los Nuggets de Denver.

Partido con muchas alternativas, con unos Nuggets negados desde el perímetro y con D-Will imponiendo su criterio organizador.

Utah tuvo sus oportunidades gracias al trío Jefferson-Williams-Bell. El primero acabó con 28 puntos, 10 rebotes y 3 tapones; el segundo hizo 26 y 12 asistencias, aunque no anduvo fino en el tiro; y el tercero aportó 20 tantos, 7 rebotes y 4 asistencias.

Ausente Kirilenko, el joven Hayward volvió a ser titular, pero no estuvo bien y cometió 4 faltas en 9 minutos. No jugó más.

El que no jugó ni un solo minuto fue el panameño Gary Forbes. Sus compañeros más activos fueron Carmelo Anthony (31 puntos, contrastando su 7 de 21 en el tiro de campo con su 17 de 18 en libres) y Nene Hilario (28 tantos con un 10 de 12 en el tiro doble y 8 sin fallo en el unitario).

Phoenix 107 Oklahoma City 111

El partido se decidió en un notable último cuarto de los Thunder de Brooks. El equipo visitante apretó en defensa y terminó ganando gracias al acierto final de Westbrook y Durant. Pero fue Jeff Green su mejor anotador con 28 puntos.

Durant acabó con 24 tantos y 11 rebotes, Westbrook hizo 19 puntos, 7 rebotes y 11 asistencias y en la segunda unidad estuvo bien Harden y excelente Serge Ibaka, autor de 18 puntos con una serie de 9 de 10 en el tiro de 2.

En los Suns, tremendo Vince Carter, que consiguió 33 puntos, 18 de ellos a través de 6 triples. Los demás, muy lejos. El segundo anotado fue Frye -13 puntos y 9 rebotes-, si bien estuvo desafortunado en el tiro. Nash estuvo discreto y su frustración se notó en el hecho de que anotó el 105 a 111 faltando 0,6 segundos, con todo decidido. Un tipo de acción poco común en la NBA, donde las reglas que se siguen en los finales decididos son bien distintas.