JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2010-2011

Los Rockets dejan a los Lakers en caída libre tras sufrir su cuarta derrota seguida

Luis Scola superó en la pintura a un Pau Gasol con problemas físicos

Toronto gana con un gran Calderón; Portland pierde con un aceptable Rudy

hispanosnba.com |

Los Lakers estaban jugando de cine y llevaban un balance de 13-2, pero de repente han encadenado una insólita racha de 4 derrotas seguidas que les ha llevado a puestos intermedios de playoffs. Su verdugo en esta última derrota fueron los Rockets de Luis Scola.

Scola estuvo bien y junto a sus compañeros de pintura pudo parar a un Pau Gasol desconocido, que jugó con problemas físicos y nunca pudo meterse en un partido que decidió de forma espectacular en los últimos 3 minutos su ex compañero en Memphis Shane Battier.

Mientras, Toronto destrozó en una primera parte perfecta a Washington, que vio cómo regresaba al juego John Wall y cómo Gilbert Arenas vivía una noche aciaga. El español Calderón fue el líder perfecto desde la base del juego. Y Portland se resistió lo suyo, pero acabó perdiendo en Boston. Rudy Fernández jugó los minutos más calientes del partido y se le vio con ganas de ayudar. Lo hizo en un final de partido asombroso de su equipo, que estuvo a punto de dar la campanada en el Garden.

Houston 109 L.A.Lakers 99

Jamás habían perdido los Lakers 4 partidos seguidos desde que Pau Gasol llegara a L.A. Es, por lo tanto, un dato que revela la crisis de resultados que ha empezado a sufrir de repente y sin previo aviso el equipo de Phil Jackson, un equipo que hasta hace unos días era un rodillo perfecto.

Ese bajón ha coincidido con el descenso de Pau Gasol en su rendimiento en la cancha. No es casualidad. El buen juego de los Lakers tiene mucho que ver con la clarividencia del español en el poste, ya sea para anotar o pasar. Anoche, no la tuvo. Cegado por Scola, pero también por un carrusel de defensores distintos -Hayes, Miller y Hill-, Pau anduvo siempre tapado y sin opciones. Si a esa gran labor defensiva de los hombres altos locales, le unimos que el español jugó con problemas físicos... pues los resultados son claros. 8 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias, y sólo 8 intentos de canasta.

Cegado Gasol, los Lakers tuvieron que vivir del empeño de Kobe Bryant (27 puntos y 4 robos en 31 minutos) y Lamar Odom, que jugó 45 minutos para dar algo de reposo a Gasol y terminó con 25 tantos y 11 rebotes. Con ellos y con el gran trabajo desde la banca de Barnes -14 puntos y 8 rebotes- y, en menor medida, Brown -11 y 4 asistencias-, los Lakers llegaron con opciones de victoria a los últimos 3 minutos. Pero entonces surgió un colosal Shane Battier.

Battier anotó 11 de sus 17 puntos en los últimos 3 minutos, momento en el que con 3 triples ahondó la crisis de resultados angelina. El ex de Memphis Grizzlies tuvo una noche feliz: 17 puntos, 4 de 6 en el triple, buen trabajo en la retaguardia. Junto a él brillaron Kevin Martin (22 puntos en 27 minutos amargando la noche a Artest) y un sólido Luis Scola. El argentino fue de menos a más, estuvo en su sitio en los momentos calientes, se fajó bien en defensa y terminó con 14 puntos, 9 rebotes y 3 asistencias en 32 minutos. Su temporada está siendo realmente fantástica.

Houston ganó en el último cuarto, lo que revela que los Lakers aún están en un estado embrionario en su desarrollo físico esta temporada. El parcial de ese cuarto fue 33-21. Es decir, el equipo de Phil Jackson no estuvo en defensa y lo pagó ante un equipo unido en el que el triunfo fue un triunfo de todos, pues casi todos aportaron en defensa o en ataque. Sin ir más lejos, notable papel de la segunda unidad local, con un Budinger espectacular en la primera parte y muy buen juego de Brad Miller, Jordan Hill o Courtney Lee.

Mientras, en los Lakers se notó la 'ausencia' en el partido de los apagados Gasol-Fisher-Artest y se comprobó de nuevo que Caracter, hoy por hoy, puede aportar poco en la pintura.

Toronto 127 Washington 108

Todo el partido se resume en una primera parte perfecta de los Raptors, que aniquilaron a los Wizards tras anotar 72 puntos ante un equipo transformado en una caricatura defensiva.

Esos 2 primeros cuartos fueron lo mejor que ha hecho Toronto en lo que va de campaña. El equipo jugó a un nivel enorme, acumulando jugadas bellísimas de 'highlights', con DeRozan y Weems comiéndose el aro, Calderón dirigiendo de forma primorosa el juego y el novato Ed Davis emergiendo como una pieza aprovechable en la rotación de Triano.

Toronto anotó en la primera parte el 66.7% de sus tiros, se fue a los vestuarios 21 puntos arriba (su máxima ventaja en el partido fue de 27) y lo hizo sabiendo que este encuentro no se le podía escapar.

Acabaron los Raptors, tras muchos minutos de basura en la segunda parte, con un 58% de acierto en el tiro, 6 de 11 en el triple, 52 a 30 en la captura de rebotes, 28 asistencias por 13 pérdidas... y 7 jugadores aportando 10 o más puntos: DeRozan (20), Weems y Bargnani 18 (el italiano con 8 rebotes), Barbosa 16 en 20 minutos desde la banca, Bayless 16 con 6 rebotes y 5 asistencias como suplente de Calderón... todo un despliegue.

Calderón estuvo a su mejor nivel, recuperando las sensaciones de antaño y los galones en la pista. Controlándolo todo, animando al colectivo y jugando muy bien: 21 de valoración en 25 minutos (no precisó jugar más dado el resultado). Acabó con 11 puntos, 8 asistencias, 3 rebotes y 2 robos. Además, ha recuperado ya su punto de mira en el lanzamiento.

Los Wizards, un desastre. Volvió Wall para hacer 19 puntos y 8 asistencias intrascendentes, muchas de ellas sin nada en juego, y con su vuelta fracasó Arenas (0 puntos en la primera parte y 1 de 10 en el tiro de campo al final del partido). Los mejores visitantes fueron McGee (21 tantos, casi todos para abajo) y Blatche -17-. Hilton Armstrong no jugó al estar sancionado.

Boston 99 Portland 95

Boston tenía ganado el partido, pero un exceso de confianza estuvo a punto de costarle caro. Una canasta de Garnett puso un más que cómodo 96-80 en el marcador a falta de 5:10 para el final. Entonces, emergieron los Blazers y se empequeñecieron los Celtics.

Ese giro brusco a la situación lo logró McMillan con 4 hombres bajos en pista, con Aldridge como única referencia en la pintura y con Brandon Roy, Rudy Fernández y Wesley Matthews compartiendo pista. Porque Rudy jugó los minutos finales, los más importantes.

Con ese cinco atípico, los Blazers endosaron un parcial de 0-15 que culminó Roy con una canasta que colocaba el marcador en 96-95 con 41 segundos por jugar. El Garden no se lo podía creer. Pero entonces surgió Ray Allen, que había hecho hasta ese momento un partido horrible. Llevaba 2 de 11 en el tiro, 6 puntos anotados y una jornada aciaga. Había errado Allen los 5 triples que había intentado hasta ese momento, pero tiró de calidad y a 10 segundos del final anotó el triple de la victoria. Así son las estrellas.

El partido en su primera parte había sido de los Blazers, que llegaron a acumular 11 puntos de ventaja y se fueron 1 arriba al descanso (48-49). Pero Boston se puso serio en la reanudación y fue poco a poco adueñándose del partido hasta que esa confianza final casi entierra su buen juego anterior.

Los Celtics terminaron con un 57,1% de aciertos en el tiro. Pierce hizo 28 puntos con un acierto extraordinario en el lanzamiento, Garnett sumó 17 y 8 rebotes y el suplente Glen Davis, 16 y 7.

En Portland, 23 puntos de Matthews, que volvió a ser titular y se concentró en la anotación (0 rebotes y 0 asistencias), 20 tantos de Miller y 18 de Roy y Aldridge. Rudy Fernández fue el mejor suplente al acumular 8 puntos, 2 rebotes y 2 robos en 17 minutos. Anotó 2 de 4 en el triple y jugó los minutos finales, logrando un triple en ese parcial final de 0-15.

Utah 110 Indiana 88

Partido transparente desde el principio en el EnergySolutions Arena. Un 35-17 en el primer cuarto dejó todo mucho más claro.

Utah avanza a un balance de 15-5 tras una importante racha de victorias consecutivas. Lo hace de la mano de un gran Deron Williams (24 puntos y 16 asistencias anoche), que estuvo escoltado a las mil maravillas por Andrei Kirilenko (18 tantos) y Al Jefferson (17 y 10 rebotes).

Los tableros fueron de los locales y el partido tuvo su diferencia más extrema en el buen trato de las posesiones: ¡Utah robó 11 balones y perdió 7 e Indiana recuperó sólo 1 y extravió 18!. Pocas veces se da un contraste semejante en un partido. El base Darren Collison fue el mejor de los Pacers con 16 puntos.