JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2009-2010

Delfino roza el milagro, pero pierde tras hacer otro partidazo

Dallas, con un buen Barea, derrota a Milwaukee con 22 puntos del argentino

Sacramento y Nocioni mejoran y ganan y New York recupera el buen tono

hispanosnba.com |

Carlos Delfino está imparable. Ante Dallas, estuvo a punto de provocar él solito una remontada final que no llegó porque el propio Delfino erró el tiro sobre la bocina que hubiera dado la victoria a los Bucks en Texas. Volvió el argentino a brillar con luz propia al anotar 22 puntos.

No lo hizo mal José Juan Barea en este partido, pero estuvo a años luz de los hombres que cortaron la pana, es decir, de Nowitzki, Terry, Bogut y Delfino.

Quien sí mejoró, y mucho, fue Andrés Nocioni, aunque sólo tuviera 19 minutos para dar que pensar a su entrenador, Paul Westphal. Su equipo lo notó y se llevó la victoria ante los Warriors gracias a Beno Udrih. Sergio Rodríguez no jugó.

Y en partido sin hispanos, New York se resarció de la humillante derrota ante Dallas (78-128) apaleando a los Timberwolves (132-105).

Dallas 108 Milwaukee 107

Dallas venía de ganar de 50 en el Madison y con la resaca de tan extraordinario éxito a punto estuvo de fallar en su casa ante unos Bucks que dejaron una grata impresión en Texas.

Una grata impresión procedente, sobre todo, de dos hombres inconmensurables: Andrew Bogut -que logró 32 puntos y 9 rebotes con ¡13 de 14 en el tiro de campo!- y Carlos Delfino, que está en estado de gracia.

El argentino volvió a sobresalir con 22 puntos, 6 rebotes, 5 asistencias y excelentes porcentajes de tiro -4 de 7 en el doble y 4 de 5 en el triple- para sumar 28 de valoración en 38 minutos de juego. Pero lo más importante es el valor que dan ya al santafesino su entrenador, Scott Skiles, y sus propios compañeros. Porque ayer dejaron en sus manos el destino del partido y casi obra un milagro.

Jason Kidd, que reapareció en los Mavs, anotó un triple que se antojaba casi decisivo a 2 minutos del final (108-101), pero Delfino se empeñó en hacer sufrir al equipo de Carlisle. Primero con un triple a 1:47 de la conclusión (108-104) y después con un fabuloso triplazo frontal desde casi 9 metros a 27 segundos del final (108-107).

Sintieron los Mavericks entonces el aliento del rival en su cogote y flaquearon, abriéndose una vía de agua por el lugar más inesperado, Dirk Nowitzki. El alemán fue el hombre local más atinado -28 puntos-, pero perdió un balón crucial a pocos segundos del final y dio opción de victoria a los de Wisconsin.

Restaban 3 segundos y Scott Skiles pidió un tiempo muerto para diseñar la jugada del triunfo y ese diseño no tenía su final en Bogut o en Jennings, tenía su arma letal en Delfino. La jugada salió tal y como estaba prevista pero el tiro de Delfino, muy forzado, no entró. Una lástima, porque hubiera sido la culminación a otra demostración de clase. Pero lo importante es que el santafesino es ya una figura central de su equipo. Un gran logro.

Además de Bogut y Delfino, Milwaukee agradeció las convincentes actuaciones de hombres del banquillo como Ridnour, Ilyasova y Stackhouse, que jugaba contra su último ex equipo.

En Dallas, Nowizki volvió a ser el mejor con 28 puntos, 8 rebotes y 5 asistencias, Terry sumó 21 y Kidd y Dampier en sus reapariciones aportaron 12 asistencias y 11 rebotes, mientras que Barea regresó a la suplencia y cumplió, especialmente en una gran primera parte, acabando con 7 tantos y 4 asistencias en 16 minutos de juego. Y Eduardo Nájera sigue sin debutar con el equipo texano.

Fue un bello partido, jugado con acierto. Ambos equipos superaron el 50% de efectividad en el tiro y brillaron desde el triple (10 de 18 los locales por 9 de 18 los visitantes). Y Dallas, con un pelín más de suerte, se llevó el triunfo.

Sacramento 99 Golden State 96

Partido jugado a la carrera, a una velocidad máxima y, como suele pasar en este caso, cargado de imprecisiones.

Hasta 48 puntos anotaron entre ambos equipos al contraataque, lanzando cada conjunto cerca de 100 tiros de campo, lo que generó tal cantidad de rebotes debido a los bajos porcentajes que Sacramento capturó ¡68!. Lo único que detuvo la velocidad extra del partido fueron las muchas personales, yéndose el encuentro a los 75 tiros libres. Cifras superlativas todas que muestran un partido de acelerones y frenazos, pero que estuvo marcado por el equilibrio y cargado de emoción.

Esa emoción se quebró porque Beno Udrih, el mejor local, supo reprimir las suyas. Como un témpano de hielo se comportó el esloveno en los últimos segundos al anotar 5 tiros libres consecutivos que decidieron el choque (99-94 a 11 segundos del final).

Udrih estuvo genial anotando 24 puntos desde la segunda unidad y Tyreke Evans también funcionó desde la titularidad -23-, como lo hizo Spencer Hawes -18 y 13 rebotes-. Los 10 jugadores de los Kings que jugaron atraparon algún rebote. El caso más espectacular el de May (11 en 15 minutos), que jugó minutos debido a la baja por lesión de Brockman.

Las notas negativas fueron que Sergio Rodríguez no jugó y que Kevin Martin volvió a mostrar que está a años-luz de su mejor forma (5 puntos con 1 de 9 en el tiro). La más positiva, desde nuestro punto de vista hispano, la recuperación en el juego de Nocioni, que hizo unos muy buenos 19 minutos en los que se fue a 10 tantos, 9 rebotes y 3 lástimas. Una pena que sus ganas de demostrar su valía a su entrenador le hicieran precipitarse algunas veces (4 de 12 en el tiro). Pero estuvo bien el argentino.

Pero para precipitaciones las de Maggette, el hombre más importante de estos Warriors sin Ellis. El alero hizo 19 puntos y 12 rebotes, pero protagonizó una serie penosa en el tiro (¡3 de 22!), que lastró a su equipo de mala manera.

Los mejores Warriors fueron Stephen Curry -27 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias- y Cartier Martin -20-.

New York se recupera

Jornada de alivio para los Knicks, que tras perder por 50 en el Madison con Dallas salieron enrabietados de tal modo ante Minnesota que decidieron el partido en el primer cuarto en un abrir y cerrar de ojos con un terrible parcial de 40-16.

No hubo más historia y el partido acabó con 132 a 105. Los de D'Antoni hicieron 17 triples y dieron 32 asistencias por 13 pérdidas de balón. El equipo funcionó amparado en Lee (28 puntos y 10 rebotes), Harrington (26 y 10) y Chandler (20 tantos). Duhon dio 13 asistencias sin anotar y Jonathan Bender consiguió 14 tantos en 12 minutos.

En los Wolves, Brewer hizo 22 puntos y dos hombres resucitaron cuando menos los necesitaba su equipo. Fueron Ramon Sessions -20 puntos- y Sasha Pavlovic -16 en 20 minutos-. Al Jefferson y Kevin Love aportaron 10 puntos entre los 2, un desastre para los suyos.