JORNADA NBA / PLAYOFFS 2009

Houston lleva a los Lakers al séptimo partido con Luis Scola en plan estelar

El argentino termina con 24 puntos y 12 rebotes y lidera el triunfo junto a Brooks y Landry

Pau Gasol logra 14 tantos y 11 rebotes y Ariza suma 7 puntos

hispanosnba.com |

Los Rockets son una caja de sorpresas. Cuando todos daban al equipo por muerto tras perder por 40 puntos el quinto partido de la serie y no poder contar con Yao Ming, los pupilos de Adelman se sacaron de la chistera un partidazo e igualaron la eliminatoria, que requerirá un séptimo encuentro.

Impresionante fue el partido del argentino Scola. Luisito fue la pieza clave para que el partido se decantara desde el principio a favor de los locales. Lo fue a partir de un memorable primer cuarto en el que anotó 14 puntos y capturó 7 rebotes. Terminó el ala-pívot de Houston el partido con 24 puntos y 12 rebotes, siendo fundamental para la victoria, como lo fueron Aaron Brooks y Carl Landry.

Mientras, Bryant lideró la ofensiva Laker con 32 puntos, aunque no tuvo un partido excesivamente brillante. Los hispanos del conjunto visitante: Pau Gasol hizo 14 puntos y 11 rebotes en 43 minutos y Trevor Ariza concluyó con 7 puntos y 4 rebotes en 31.

Houston 95 L.A. Lakers 80 (3-3)

Si los Lakers tuvieran la mitad de coraje y agresividad que los Rockets, el equipo angelino ganaría la NBA sin bajarse del autobús, a la pata coja, sin despeinarse. Pero hoy por hoy a estos Lakers les sobra calidad y les falta contundencia, una contundencia que han demostrado tener (ganando en Boston y en Cleveland, por ejemplo), pero que rara vez sacan a relucir.

Anoche era una de esas ocasiones en la que el equipo de Jackson tenía que haber sacado a pasear su contundencia, pero el que la exhibió a manos llenas fue el conjunto local.

Sólo así se explica el inicio del partido, momento decisivo a partir del cual nada volvió a ser igual. Ese inicio sólo lo puede hacer una plantilla cargada de convicción. Porque no es normal que sin Yao Ming y tras recibir una paliza de 40 puntos en el choque anterior, Houston endosara de inicio a los Lakers un parcial de 17-1 que llegó a convertirse poco después en ¡un 21-3!.

El primer punto visitante lo logró Ariza tras casi 3 minutos de partido, pero la primera canasta en juego de los californianos no llegó hasta casi mediado el primer cuarto. Para entonces, Luis Scola, él solito, ya había logrado 12 puntos.

El arranque del argentino fue memorable. ¡Qué grande!. Luisito la rompió, estuvo bárbaro, excesivo, lo suyo fue un festín pantagruélico. Salió el bonaerense hasta tal punto enchufado que se encargó de anotar los 6 primeros puntos de su equipo. Y en los primeros minutos ni Pau Gasol le vio, ni ningún compañero del español se molestó en alargar una ayuda en la defensa. Y Scola comió y comió hasta casi estallar.

Con el 17-1 inicial, 'Luifa' sumaba ya 10 puntos, pero es que no solo anotaba. El argentino defendía con solvencia a Bynum y se hartaba a capturar rebotes. El resultado, inadmisible para las filas angelinas. Fin del primer cuarto con un 27-15 a favor de los locales y Scola firmando el más bello poema baloncestístico con 14 puntos, 7 rebotes y 2 asistencias en los primeros 12 minutos, pudiendo con Gasol, con Odom -al que le hizo un uno contra uno digno de Fred Astaire- y con todo lo que se pusiera por delante. Gracias a Dios, Farmar hizo 2 triples finales para los Lakers, que si no...

Arrancó el segundo cuarto. Todo parecía normalizarse. Empezó con una canasta de Bryant, que había tirado horriblemente en el primer acto, que inició con un 1 de 7 en el lanzamiento, y a esa cesta de Kobe le siguió un tapón de Odom a Scola. Pero fue una ilusión. El ataque visitante seguía siendo anárquico, sin criterio alguno, deslavazado, incapaz de aprovechar sus ventajas... la defensa local lo corrompía y no había soluciones al sistema planteado por Adelman.

Fue así como, a pesar de su mejora defensiva, Los Angeles siguió flaqueando hasta tener que pedir un tiempo muerto Phil Jackson al volverse a situar 17 puntos abajo (42-25). Poco después salió de la pista Scola entre una estruendosa ovación del Toyota Center, rendido a sus pies.

Sólo Bryant, de forma intermitente, y Odom -en el rebote- mantenían la cara en los Lakers, cuya circulación de balón nada tenía que ver con la primorosa circulación de los Rockets, llena de sentido y paciencia, anhelante del pase extra en busca del tiro más cómodo.

Volvió Scola, que tras poner en problemas de personales a Gasol, hizo lo propio con Odom. Su reino se seguía extendiendo en una noche inigualable. Bryant recibía una técnica en un rifirrafe con Artest y Brooks anotaba un triple final para llevar el 52-36 al descanso. Y Bryant y Vujacic se fueron discutiendo camino del vestuario, todo un síntoma.

La mejor imagen de los Lakers llegó en el tercer cuarto, que alcanzaron con un 31% de acierto en el tiro. Un robo con mate al contraataque de Ariza, un triple del propio Ariza y una canasta de Gasol -7 puntos hispanos- pusieron el parcial inicial de 0-7 con el que los Lakers se colocaron 52-43 y obligaron a pedir un tiempo a Adelman.

Tras ese tiempo siguió desplegándose el mejor juego californiano, cuando se tuvo más en cuenta a Pau Gasol, al que le llegaron muchos más balones dentro, cuando Bryant adquirió su brillantez habitual, cuando el equipo apretó en defensa y cuando todo se hizo en el equipo angelino de forma más coherente. Y el resultado no se hizo esperar: parcial de 2-16 para ponerse a 2 puntos (54-52). En 6 minutos sólo Scola había sido capaz de anotar. Faltaban 21 minutos para terminar el encuentro y el jugador argentino ya llevaba 20 puntos y 10 rebotes. Sencillamente brutal.

Pero a partir de ahí, los Lakers volvieron a fundirse un poco. Un parcial de 8-0 devolvió el aire al equipo texano, que marcó su territorio ante las estrellas visitantes, primero con un golpe en plena refriega baloncestística de Landry a Gasol y más tarde con una fea falta de Brooks a Bryant. Era su modo de decir que el equipo no se rendía, y no lo hizo. Mantuvo el tipo y una canasta de Scola en los últimos segundos hizo que el tercer período acabara 74-65.

A pesar de ese aguante, muchos analistas predecían que Houston se desinflaría en el último cuarto como consecuencia de su tremendo esfuerzo en los tres primeros actos, pero no fue así.

Lejos de venirse abajo, los de Adelman empezaron a crecerse y el entrenador local se pudo permitir un lujo al alcance de muy pocos: mantener los últimos 9 minutos del partido a su gran figura, Luis Scola, en el banquillo para desesperación de los muchos seguidores que tiene en Argentina, España y otros muchos lugares del mundo. Tenía una excusa: la eclosión de Carl Landry.

Landry no había encontrado su espacio desde que Ming se lesionara en el tercer partido. Pero anoche, para desgracia de su rival, lo halló. Él y Brooks dibujaron un fantástico último cuarto que terminó por ahogar la débil resistencia de los Lakers, que fueron los que se fundieron en los minutos finales hasta desaparecer arrastrados por su horrible presencia en el tiro (35,7% en el de campo y 5 de 23 en el triple) y su escaso poder asociativo (11 asistencias en todo el partido).

Scola (24 puntos y 12 rebotes), Brooks (26 puntos y excelentes porcentajes) y Landry (15 puntos y 9 rebotes sin error alguno en el tiro) arruinaron la opción angelina de matar la serie. Lo hicieron junto a todos sus compañeros. Porque el triunfo fue sobre todo un triunfo de la defensa local, de los Artest, Battier -que jugó enfermo- Hayes...

Los Lakers, decepcionantes. A los pocos jugadores que hicieron algo se les pueden poner peros: Bryant hizo 32 puntos, pero tiró 27 veces con dudoso acierto y sólo dio 3 pases de canasta, Gasol -14 puntos y 11 rebotes- no tiró un solo tiro libre en 43 minutos y tuvo que ser más agresivo en defensa con Scola, Odom -14 rebotes- estuvo remiso en ataque y Farmar -13 puntos en 21 minutos- no dio una sola asistencia.

Pero qué decir de la lamentabilísima actuación de Fisher y Bynum (2 y 0 puntos en 21 y 19 minutos y brutal superioridad de Brooks sobre el primero) o la de los suplentes Walton, Vujacic o Brown. Así no se puede ir por la vida. O estos Lakers espabilan o ya se pueden olvidar del anillo.

Los números:
  • Houston: Brooks 26 pt, 4 as y 3 tr (8 de 13 tc y 7 de 7 tl); Scola 24 pt y 12 reb; Landry 15 pt y 9 reb (6 de 6 tc); Artest 14 pt (6 de 17 tc).
  • L.A.Lakers: Bryant 32 pt y 3 tp (11 de 27 tc); Gasol 14 pt y 11 reb; Farmar 13 pt y 3 tr; Odom 8 pt y 14 reb.
  • Los locales anotaron el 50,7% de sus tiros y los visitantes el 35,7%, a pesar de lo cual los Lakers dominaron el rebote.
  • Los Lakers nunca se adelantaron en el marcador.
  • Los Rockets dominan 2-1 sin Yao Ming.
  • Fisher y Bynum sumaron 2 puntos con 1 de 10 en el tiro de campo.