No fue el gran día de Pau Gasol ni de Luis Scola, aunque no estuvieron mal. El hispano más destacado del partido fue Trevor Ariza, que ayudó a Kobe Bryant a que los Lakers recuperaran el factor cancha que habían perdido en el primer encuentro. El partido siempre estuvo controlado por los californianos.
Pero lo mejor para los angelinos son las lúgubres perspectivas de los texanos para el cuarto choque, que se disputa mañana. Y es que Yao Ming se resintió de sus problemas físicos y terminó cojo y Ron Artest fue expulsado tras cometer una falta flagrante al final. En las dos jugadas estuvo presente Pau Gasol. Ante Ming nada hizo en la marca sobre el chino, la lesión fue fortuita, y ante Artest recibió una innecesaria falta cuando iba a colgarse del aro.
No fue brillante la actuación de Gasol, que acabó con 13 puntos y 6 rebotes. Sí podía haberlo sido la de Luis Scola (10 tantos y 12 capturas), que hizo una notable primera parte que no pudo completar en la segunda porque Adelman, incomprensiblemente, se olvidó del argentino en el último cuarto. Una omisión que su equipo pagó muy cara.
Houston 94 L.A.Lakers 108 (1-2)
Se presentaba la ocasión pintiparada para que los Rockets colocaran contra las cuerdas a los Lakers y reivindicaran su auténtica condición de equipo aspirante a todo. Pero llegada esa ocasión quien sacó a relucir su auténtico ardor competitivo fueron los Lakers, que sin hacer un partido brillante fueron completando todas las acciones necesarias para llevarse el compromiso sin apuros, con un temple ejemplar y sin esas pájaras que suelen acompañar al equipo cuando toma una ventaja sólida en el marcador.
A los visitantes se les vio enchufados ya desde el primer momento. Abrieron el partido con un 0-7 antes de que Scola inaugurara la anotación local y en pocos minutos se pusieron 5-13 con 7 puntos de Bryant, que concluyó el encuentro con 33. Sin embargo, con paciencia y tranquilidad, los locales equilibraron a 18 el marcador amparados en el poderío de su pareja interior formada por Yao Ming y el argentino.
Esta vez no le fue tan fácil al jugador catalán parar al chino, que hizo una primera parte notabilísima, como la hizo Scola. Ésa fue una de las claves del encuentro. En la primera parte, Ming y Scola hicieron 22 puntos y 14 rebotes, plagando de daños a la defensa visitante, pero en la segunda aunque ese caudal de rebotes se mantuvo, no ocurrió lo mismo en la anotación.
Ming sólo hizo 5 puntos en los dos últimos cuartos, algo que fue posible en cuanto las ayudas defensivas a Pau Gasol empezaron a funcionar. Y Scola no logró más que 2 puntos en la continuación, en parte debido al ostracismo al que le sometió durante muchos minutos su entrenador. Y es que Adelman se olvidó del bonaerense en el último cuarto en beneficio de Landry. Scola sólo jugó el último minuto, cuando ya todo estaba decidido y porque Ming tuvo que irse al banquillo lesionado.
Los cuartos centrales, especialmente el tercero, fueron en los que se ventiló el partido. Se trató de los períodos más defensivos, y curiosamente, en ese escenario tan proclive a Houston el que se llevó el gato al agua fue el equipo de Phil Jackson.
Se había llegado al descanso con un apretado 48-50. Odom había sufrido problemas de personales y el primer cuarto de alegría ofensiva había desembocado en un segundo acto más propio de playoff, con un mayor rigor defensivo. Bryant y Ming lideraban la lista de anotadores con 14 puntos cada uno, Farmar ya había demostrado que podía sustituir con garantías la baja del sancionado Fisher y los Rockets ya habían sacado a relucir una de las vías de agua que terminarían por hundir su barco: la relación de balones robados y perdidos, que en la primera mitad fue de ¡0 a 11!. Mientras, los Lakers llevaban 7 recuperaciones y sólo 3 pérdidas.
Ese abismo en el control de las posesiones fue una tónica que se mantuvo durante los 48 minutos. Los locales terminaron con 2 robos y 17 pérdidas que generaron 20 puntos del rival y los vistantes recuperaron 11 posesiones y sólo perdieron 6 en un ejercicio extraordinario que seguro que enorgulleció a Jackson. Producto de todo ello fue que los Rockets no pudieron imprimir velocidad alguna al choque cuando quisieron hacerlo. Tal fue así, que no anotaron ni un solo punto al contraataque.
Pero la clave indiscutible de la importantísima victoria visitante estuvo en el tercer cuarto, el único en el que Pau Gasol rindió medianamente bien en ataque (el español acabó con 13 puntos, 6 rebotes y 3 asistencias). Esa clave estuvo en la gran labor ejecutada en defensa por los Lakers, que dejaron a los Rockets en 14 puntos y en un horrible 6 de 25 en el tiro de campo.
Ese ardor defensivo se materializó en 2 fantásticos tapones de Kobe Bryant a Yao Ming en el inicio del cuarto, fue el eco del notable encuentro defensivo de Trevor Ariza, que robó 4 balones, y se encarnó en los tremendos problemas de Ming para anotar.
Un impresionante triple de Bryant (los Lakers anotaron 7 de 10 en la segunda parte) sobre la bocina dio por finalizado el tercer cuarto con un 62-74 que los angelinos supieron conservar en un sólido último cuarto en el que dominaron a pesar de sus problemas en el rebote y en el que no jugó un Scola que a mediados del tercer período ya había logrado un doble-doble que no pudo enriquecer porque Landry fue la opción de Adelman en los minutos finales, como lo fue en la dirección Lowry en vez de un apagado Brooks. Y no es que desde aquí vayamos a criticar el trabajo de Adelman, que hasta la fecha, en los playoffs, ha sido excelente. Y Scola acabó con 10 puntos y 12 rebotes.
Lo más que se acercó Houston fue a 6 puntos (84-90). Fue a través de una fantástica volcada de Ming, que segundos después empezó a cojear a partir de un uno contra uno ante Gasol. En un movimiento de pies, él solito se lastimó, según parece, el pie izquierdo, porque en vivo no quedó muy claro si era un problema de pie o de rodilla. El caso es que siguió jugando con una evidente cojera hasta que se retiró a la banca a 52 segundos del final.
Fueron instantes fatídicos para Houston, porque 9 segundos después Ron Artest era expulsado por cometer una dura falta a Pau Gasol cuando éste iba a machacar el aro. En realidad, fue una falta alalimón en la que al que más se vio fue a Artest, pero la personal fue triple, ya que por un lado y por detrás también empujaron a Gasol dos ex compañeros de Memphis, curiosamente, Shane Battier y Kyle Lowry. Afortunadamente, el español no sufrió daños. Y Artest 'logró' su segunda expulsión en los dos últimos partidos.
Si preocupante fue la derrota, aún lo es más ver las perspectivas que le quedan a los Rockets mañana de no poder contar con Ming y Artest. Sería casi como firmar su sentencia de muerte.
Los números:
- Houston: Artest 25 pt y 6 reb; Ming 19 pt y 14 reb; Scola 10 pt y 12 reb.
- L.A.Lakers: Bryant 33 pt, 6 reb y 3 tp (7 de 22 t2 y 4 de 6 t3); Odom 16 pt y 13 reb; Ariza y Gasol 13 pt; Farmar 12 pt, 7 as y 5 reb.
- Los Lakers robaron 11 balones y sólo perdieron 6; los Rockets recuperaron 2, perdieron 17 y no anotaron un solo punto a la contra.
- Los locales anotaron en la segunda parte 2 de 12 triples, mientras que los visitantes encestaron 7 de 10.
- Los angelinos concedieron 19 rebotes en su propio tablero.
- Houston anotó 6 de 25 tiros de campo en el tercer cuarto.
- Ming y Scola sumaron 22 puntos y 14 rebotes en la primera mitad y 7 y 12 en la segunda.