Manu Ginóbili quiere un verano tranquilo, sin ajetreos, descansando en familia. Al menos, eso se deduce de su decisión, esperada por otra parte, de no acudir con la selección de Argentina al FIBA Americas 2013, que se disputará en Caracas (Venezuela).
La renuncia del jugador de San Antonio Spurs ha sido confirmada por el propio seleccionador argentino, Julio Lamas, según publica la página oficial de la Federación Internacional de Baloncesto (FIBA), al que Manu ya le había comunicado hace tiempo su intención de no acudir al torneo que ha de celebrarse en Venezuela.
Lamas viajó a Estados Unidos recientemente para contactar con los otros 3 internacionales argentinos que militan en la NBA: Pablo Prigioni (Knicks), Luis Scola (Suns) y Carlos Delfino (Rockets). Sin embargo, no se vio con Ginóbili ya que prefirió centrarse en los jugadores que sí tienen intención de acudir al torneo continental americano.
Lo cierto es que Ginóbili no quiere forzar ya la máquina en demasía. Tiene 35 años, mil batallas a sus espaldas y comenzó la presente campaña en la NBA con problemas en la espalda, lo que ha limitado su presencia en la cancha, a lo que se suma que Gregg Popovich quiere dosificar sus minutos para que llegue íntegro a playoffs.
Por ahora, Manu promedia 11,7 puntos, 3,7 rebotes y 4,7 asistencias en 26 partidos. Números que no están mal teniendo en cuenta que sólo disputa 24,3 minutos de media.
Ginóbili, que concluye contrato con los Spurs el próximo verano, puede presumir de tener la triple corona, ya que ha ganado la NBA -3 veces-, los Juegos Olímpicos y la Euroliga.