DECLARACIONES

Carlos Delfino confía en poder ayudar a los Bucks en su regreso a la NBA

En Milwaukee quieren que el jugador argentino desempeñe el papel de alero

hispanosnba.com |

El argentino Carlos Delfino ha regresado a la NBA tras un tormentoso paréntesis de un año jugando en Europa y lo hace cargado de ganas de ayudar a su equipo a llegar lo más lejos posible. Nuevo equipo, Bucks, y nueva posición, ya que Skiles quiere reciclar al hasta ahora escolta en alero.

El jugador santafesino se mostraba satisfecho tras su debut, 8 puntos ante Minnesota, con el conjunto de Wisconsin en unas declaraciones realizadas al diario Milwaukee Journal Sentinel. “No he jugado al baloncesto desde hace 2 meses y medio. Estoy empezando a ponerme de nuevo en forma. Me siento bien. Día a día iré encontrando mi camino, encontrando mi lugar”, afirmaba.

Un lugar que parece que no va ser el habitual, ya que tras desempeñarse como escolta en toda su carrera profesional, su actual equipo pretende que esta temporada lo haga de alero, una posición en la que ha jugado ocasionalmente, pero que no es su lugar natural.

“Sabe como jugar”, ha dicho su ténico, Scott Skiles, “ha sido un buen reboteador en su posición y el puesto de 3 es algo que estamos estudiando ahora mismo”. Skiles quiere que Delfino y el jugador de segundo año Luc Mbah-a-Moute sean quienes se repartan mayoritariamente el tiempo que corresponde a esa posición ante la escasez de aleros naturales en la plantilla de los Bucks.

A Carlitos no le desagrada la propuesta de su técnico y su único objetivo es contribuir al conjunto allá donde sea necesario. “Si puedo ayudar al equipo, en cualquier posición, intentaré estar ahí”, dice.

Fin a un año tormentoso en tierras rusas

Delfino se niega a considerar tiempo perdido su estancia en tierras rusas de la pasada campaña pese a los numerosos problemas deportivos y extradeportivos que tuvo que afrontar en las filas del Khimki de Moscú.

“Tal vez hubo demasiadas lesiones y demasiados problemas fuera de la pista”, afirma en referencia a los problemas económicos del club moscovita para pagar su nómina y la de otros jugadores, unos problemas que le llevaron a abandonar Moscú para regresar a la NBA, una liga en la que, pese a los altibajos individuales, cree haber tenido la suerte de aprender mucho allá donde ha estado.

Eso sí, reconoce que dejar atrás todos esos problemas es un alivio. “A veces estabas pensando más en otras cosas que en jugar al baloncesto. Aquí, estoy listo para centrarme en el básquet y usar mi intensidad y mi experiencia para ayudar al equipo”, comenta.

El santafesino tiene muy claro, como casi todos los jugadores nacidos fuera de Estados Unidos, que el baloncesto es un juego colectivo y de ahí que para él, el conjunto sea lo primordial. “Jugamos en un deporte de equipo. Puedes pasarlo mal en lo individual, pero si el equipo está haciendo un buen trabajo, uno gana” asegura, y eso, tratar de ganar con los Bucks, es lo que busca esta temporada.