JORNADA NBA / temporada regular 2022-2023

Celtics gana a Lakers en la prórroga con los árbitros como protagonistas

Victoria de Boston 125-121 con 37 puntos de Jaylen Brown y 41 de LeBron James

Los árbitros no pitan una clara falta de Tatum a James en la jugada final del último cuarto

Nigel Correas |

Algunas situaciones parecen incomprensibles. Como por ejemplo que 3 árbitros sean incapaces de ver una acción a todas luces evidente. Ocurrió en la última jugada del Celtics-Lakers. LeBron James penetró a canasta para ganar el partido. Y la falta de Jayson Tatum fue de libro. Pero los colegiados no se dieron por enterados.

La imagen de la desolación y la frustración visitante se multiplicó. LeBron fuera de sí. Enloquecido. Arrodillado en la cancha sin encontrar las razones que pudieran esgrimir los árbitros para no pitar algo así. Pero siempre hay alguien que puede llevar el espectáculo a un estrato superior. Siempre hay alguien dispuesto a rizar el rizo de la creatividad. Siempre hay alguien capaz de elevar la apuesta. Pat Beverley es el mejor ejemplo de ese alguien. Siempre caminando por esa fina frontera que separa el espectáculo del simple desequilibrio. No puede dejar a nadie indiferente.

Pues bien, Beverley actuó. Agarró una cámara a pie de pista para mostrar al colegiado Eric Lewis la equivocación arbitral. No es un método muy común, desde luego. Pero si se trataba de encontrar pruebas del 'delito'... En fin, es Beverley. Tampoco le demos más vueltas. La acción implicó una técnica. Y ello motivó que la prórroga empezara desde el tiro libre. Una piedra más en el camino de Lakers.

Boston ganó por el error arbitral. Pero también porque tuvo en sus filas a Jaylen Brown. Jaylen Brown es un hacedor silencioso. Aunque esta vez metió todo el ruido del mundo. Salvó a su equipo con una jugada de 3 puntos que empató el partido a 105 restando unos pocos segundos. Y con esa acción y la jugada final LeBron-Tatum el juego desembocó en el tiempo extra.

Llegada la prolongación de 5 minutos... Jaylen Brown por aquí, Jaylen Brown por allí. Nada menos que 11 puntos del jugador de Celtics en la prórroga. Para la victoria de Boston (125-121). Para terminar Brown con 37 puntos y 9 rebotes.

El Celtics-Lakers tuvo emoción. Quince empates. Quince cambios de liderato en el marcador. Polémica. Amargas quejas. Un desenlace grande. Pero no nos equivoquemos: no fue un buen partido. Gran parte de la noche ambos equipos jugaron a nada. Escasa circulación de balón. Juego pastoso. Nula proyección baloncestística hacia el público. No fue agradable de ver como partido hasta que no llegó su definición. Y la definición, eso sí, mantuvo el tono épico-dramático de los grandes partidos.

Celtics (36-15) es primero en el Este. Lakers (23-27) es antepenúltimo en el Oeste. Pero en el partido ese abismo no existió. Compitió en igualdad de condiciones Lakers. Estuvo lejos de su mejor juego Celtics. Se notaron las ausencias de Marcus Smart y Robert Williams III.

El encuentro fue denso por momentos. En el peor sentido de la palabra. Al descanso entre ambos equipos acumulaban un 8 de 40 desde el triple. Y Boston sumaba solo 7 asistencias. No es que las defensas fueran espectaculares. Más bien los ataques resultaba deficientes.

Jaylen Brown cometió su quinta falta a 11 minutos de concluir el último cuarto. Y con esas 5 faltas a cuestas resolvió el partido. Aguantó todo el cuarto final y la prórroga hasta convertirse en el MVP del encuentro.

Jayson Tatum hizo 30 puntos y 11 rebotes. Aunque se mostró irregular. El tercer cuarto fue su mejor momento. Excelente Malcolm Brogdon con 26 puntos. Y bien Derrick White. No fue la mejor noche de Al Horford.

Mientras, LeBron James volvió a ejercer un liderazgo espectacular. Y por momentos se le vio bastante solo. Sumó 41 puntos, 9 rebotes y 8 asistencias. Anda en un estado colosal. Asumió 30 tiros. Encestó 6 triples. Hizo de todo.

A Anthony Davis todavía le falta. Jugó ya 34 minutos. Para 16 puntos y 10 rebotes. No es mucho. Patrick Beverley fue de lo mejor de Lakers. Y también funcionó Lonnie Walker IV.

Irregulares hasta más no poder Russell Westbrook y Dennis Schröder. E irrelevantes Rui Hachimura y Thomas Bryant.