Es una cuestión de calidad, pero también de fondo. Estos Suns terminan los partidos como si los estuvieran empezando. Y el ejemplo extremo de esta revelación física es Chris Paul con 37 años. El base volvió a dar una exhibición en un último cuarto. Y ya van varias de este tipo en estos playoffs.
Phoenix es el rey de los finales de partido. Nunca ha perdido esta temporada cuando ha terminado el tercer cuarto por delante. Eso ha sucedido más de medio centenar de veces. Es un equipo que nunca desfallece.
Dallas se impuso 58-60 en la primera parte. Aguantó como pudo en el tercer cuarto. Y se hundió irremisiblemente en la recta final del partido. Encajó 71 puntos (71-49) tras el descanso. Y cedió en el último cuarto 40-26.
Lo de los Suns es de otro mundo. En el último cuarto... ¡16 de 19 en el tiro de campo, un 84% de acierto! Allí donde sus rivales decaen corporalmente, los Suns quedan intactos. Ni se inmutan.
El equipo de Monty Williams ha acabado hoy con porcentajes estratosféricos. Su 64,5% en el tiro de campo constituye un récord de la franquicia en playoffs. Y suma ya 11 victorias consecutivas ante Dallas. La serie: 2-0. Con poca pinta de que vaya a suceder un imprevisto.
Paul resolvió en el cuarto cuarto a lo grande una vez más. Del 99-93 al 110-93. Un parcial decisivo de 11-0 en el que Paul hizo 7 puntos y 1 asistencia.
El equipo local se gustó en ataque. Tiró bien de 3. Y su mejora defensiva tras el descanso hizo el resto.
Devin Booker ya está a punto tras su lesión. Hoy, 30 puntos (21 en la segunda mitad). Muy acertado desde el triple. Y Chris Paul se fue a 28 puntos y 8 asistencias. Con 11 de 16 en el tiro. Metió 14 puntos en el cuarto final.
A ellos se unieron dos defensores de nivel que participaron en el ataque. Jae Crowder produjo 15 puntos y 7 rebotes. Bien desde el triple. Y Mikal Bridges ayudó con 11 puntos y 6 asistencias.
Los de Monty Williams sobrevivieron a los problemas de faltas de Deandre Ayton. Solo jugó 18 minutos. Pero JaVale McGee y Bismack Biyombo cubrieron bien la situación.
En Dallas, la soledad ofensiva de Luka Doncic no tiene fin. Ha metido 80 puntos en 2 partidos para nada. Hoy perdió 7 balones. Pero volvió a acumular la única producción ofensiva masiva de su equipo. Con 35 puntos, 7 asistencias y buenos porcentajes de tiro.
Detrás de él... Reggie Bullock (16 puntos) y nadie más.
Jalen Brunson y Spencer Dinwiddie volvieron a defraudar. Dorian Finney-Smith solo pudo jugar 20 minutos. Maxi Kleber no metió un solo triple esta vez. Aunque Dallas lanzó bien de 3. Pero ni por esas. El esloveno está solo en ataque. Y Jason Kidd lo grita a los cuatro vientos.
A todo eso hay que añadirle lo esencial: Dallas no está defendiendo. Los Mavs tuvieron pasajes de la temporada con una defensa de primer nivel. Pero ante la ofensiva milimétrica de los Suns están haciendo agua por todas partes.