Si la reciente remontada de Clippers ante Denver (24 puntos de desventaja) fue espectacular, para la de hoy se encuentran pocos calificativos que le hagan justicia. Proeza infinita de unos Clippers desnutridos por las bajas al ganar en Washington remontando 35 puntos con Luke Kennard decidiendo a lo grande: ¡con 7 puntos en los últimos 9 segundos de juego!
Ganaba 115-109 Wizards tras meter un libre y fallar otro Kyle Kuzma, y solo quedaban 10,9 segundos para el final. Todo parecía más que decidido, pero no fue así.
La primera carga de profundidad fue un triple a lo Stephen Curry de Luke Kennard, muy lejos de la línea de 3, limpio, perfecto... para el 115-112 a 8,2 segundos de la conclusión. Tiempo muerto de Washington y Kyle Kuzma se queda con el balón sin salida en la banda y le pitan 5 segundos sin sacar. Y llega el milagro final, el rizar el rizo de un modo desbordante, ¡el 3+1 que le da la victoria a los Clippers!
Restaban esos 8,2 segundos. No tenía tiempo Clippers y sacaba desde su campo. La jugada termina en el caliente Kennard y este mete un complicado triple que lleva unido un tiro adicional por la falta de Bradley Beal. Enloquece el banquillo de Clippers, queda 1 segundo y 9 décimas, y Kennard mete el adicional de la victoria, el 115-116, el delirante 115-116. Aquí está el 3+1 de Kennard.
Al tremendo 66-36 de la primera parte le sucedió el no menos tremendo 49-80 de la segunda. Eso sí que es relajarse en defensa por parte de Wizards, que encajó 40 puntos en cada cuarto.
La remontada de 35 puntos es la segunda más grande desde que en la temporada 1996-1997 se instauró el play-to-play, solo superada por los 36 puntos que remontó Utah Jazz a Denver en 1996.
Pero lo más impresionante es que Clippers ha labrado esta proeza sin Kawhi Leonard, Paul George y Marcus Morris, y con un papel inexistente en la pista de jugadores como Reggie Jackson, Nicolas Batum, Ivica Zubac o Eric Bledsoe. Fueron otros los protagonistas.
Para empezar: Amir Coffey, que no deja de sorprender un día tras otro, y el ya citado Kennard. Coffey hizo su mejor anotación NBA con 29 puntos y Kennard terminó con 25 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias.
Además, 16 puntos de Terance Mann y otros 16 más 5 rebotes y 6 asistencias de Isaiah Hartenstein, jugador que está enorme últimamente.
Pero también colaboraron otros como Winslow y Scrubb. Todo muy patas arriba. Un mundo de secundarios al servicio del asombro.
Lo de Wizards, imperdonable. Beal hizo 23 puntos y 9 rebotes, pero esa falta final la va a recordar bien; Kuzma sumó 19 más 12 rebotes, pero ese libre errado y esa violación de 5 segundos también se le quedarán en la memoria. Mala noche de Dinwiddie. Horrible el equipo en defensa tras el descanso. Y lo que empezó para Wizards como una fiesta acabó en funeral.