Sorpresa mayúscula en este inicio de playoffs: el número 8 del Oeste le da un revolcón al número 1. O lo que es lo mismo, ¡Memphis Grizzlies ha ganado en Salt Lake City arrebatando el factor cancha a Utah Jazz! Ni siquiera los casi 14.000 espectadores que se han dado cita en el Vivint Arena han amilanado al equipo visitante.
El equipo con mejor registro de la temporada no pudo imponerse a unos Grizzlies que, presumiblemente, iban a llegar cansados a este primer partido tras disputar dos juegos en el play-in.
Dillon Brooks y Ja Morant lideraron la pequeña hazaña, una pequeña proeza amparada en un muy buen ritmo de juego, la capacidad para hacer daño en la pintura tanto desde la anotación como desde el rebote ofensivo, una magnífica relación entre robos y pérdidas y un muy buen modo de saber acabar el partido pese a la escasísima experiencia de la plantilla visitante en estas lides competitivas de postemporada.
El partido de Memphis estaba siendo de una solidez apabullante, tanto estaba siendo así que los Grizzlies dominaban 77-94, nada menos que por 17 puntos, jugándose el cuarto final del partido.
Fue en ese momento extremo cuando salió a relucir la mayor experiencia del equipo local, y también su calidad. Apretaron fuerte los Jazz hasta llevar el partido a un final emocionante.
En esa remontada hubo un jugador crucial, el croata Bojan Bogdanovic. Bogdanovic se había ido de la primera parte cargado de frustración tras no anotar un solo punto, pero llegada la segunda mitad se salió del mapa: ¡29 puntos en la segunda parte y 20 de ellos en el último cuarto!
Fue la de Bogdanovic una carrera desesperada y precisa para salvar a su equipo, pero esa carrera plena de calidad y mentalidad ganadora quedó en nada cuando con 109-112 en el marcador el triple forzadísimo del croata no llegó a su destino. Esa fue la imagen, Bogdanovic tirado en la pista, extenuado y derrotado tras su brutal empeño por cambiar las cosas.
Antes, Utah había estado a punto de tejer un milagro, con un triple de Bogdanovic, una jugada de 2+1 de Derrick Favors y 5 libres sin fallo del propio Bogdanovic, pero en el otro lado de la cancha trabajaron bien para responder a la apuesta local. Morant firmó dos canastas importantísimas, Kyle Anderson hizo una falta muy inteligente a Bogdanovic a 6,4 segundos del final y Dillon Brooks anotó el 109-112 a 4,3 segundos de la conclusión saliendo los equipos de un tiempo muerto. Y aquí hay que detenerse, porque otra vez la pizarra del poco valorado Taylor Jenkins obró de muy buena forma.
Memphis ya confeccionó una canasta ganadora importante en el play-in en los segundos finales ante Warriors saliendo de un tiempo muerto. Kyle Anderson templó su ritmo cardíaco para hacer un gran saque de banda que terminó con 2+1 del novato Desmond Bane.
Pues bien, hoy ha vuelto a suceder. Tiempo muerto con 6,4 segundos de juego. Vuelve a sacar con una templanza a prueba de bomba Kyle Anderson y el balón llega a Dillon Brooks para anotar la canasta decisiva penetrando hacia el aro.
Esa canasta supuso los dos únicos puntos de Brooks en el cuarto final. Sus números definitivos: 31 puntos, 7 rebotes y 2 tapones, con 13 de 26 en el tiro. Y no olvidemos que estamos ante un jugador que también defiende.
Mientras, Ja Morant, importante también al final, sumó 26 puntos (10 en el último cuarto) y estuvo por encima del 50% en el tiro.
Se sumaron a la fiesta Jonas Valanciunas con 15 puntos y 13 rebotes y Kyle Anderson, jugador-pegamento de este equipo, con 14 puntos y nada menos que 6 robos de balón.
Y los Grizzlies demostraron que las cuentas elementales de las oficinas no siempre dan la victoria, porque ganaron lanzando 80 tiros de 2 y solo 20 de 3, camino opuesto al tomado por unos Jazz que murieron con sus triples (12 de 47) y que echaron mucho en falta a Rudy Gobert en la recta final del partido tras ser eliminado por faltas.
Además de los 29 puntos de Bogdanovic, Utah, que jugó finalmente sin Donovan Mitchell, tuvo a Mike Conley, errático en el tiro, en 22 puntos y 11 asistencias.
Más errático estuvo aún Jordan Clarkson (0 de 8 desde el triple), que sumó 14 puntos. Derrick Favors hizo un muy buen partido -12 puntos, 11 rebotes y 4 tapones en 23 minutos- y Rudy Gobert se quedó en 11 puntos, 15 rebotes y 3 tapones, cometiendo 6 faltas en 25 minutos.
Ahora, a los Jazz les va a tocar remar a la contra. Tienen equipo para salir de esta, sin duda, pero cuidado con estos Grizzlies.