Segundo duelo consecutivo entre Mavericks y Suns y segundo triunfo por estrecho margen del equipo de Arizona capitaneado por un espléndido Chris Paul y el reaparecido Devin Booker. En un partido igualadísimo estos dos jugadores marcaron la diferencia.
Chris Paul fue bastante más que Luka Doncic y Devin Booker se desperezó en la segunda parte para terminar decidiendo el partido.
Con 108-106 en el marcador, Paul hizo un jugadón para zafarse de la defensa local penetrando por el centro de la zona, pero erró incomprensiblemente bajo el aro, momento en el que entró en escena la decisiva participación de Deandre Ayton peleando el rebote ofensivo y terminando como protagonista de un salto entre dos con Kristaps Porzingis. Ese salto dio el balón de nuevo a los Suns, porque la bola fue tocada en última instancia por Maxi Kleber, que regresaba al juego. Ahí radicaba la última oportunidad de Phoenix para ganar el partido. El balón era suyo y restaban 10 segundos.
El balón fue para Chris Paul. Él templó la acción, organizó el tempo de la jugada y supo esperar la llegada perimetral de su socio Devin Booker, y cuando el balón llegó al letal tirador, este se enchufó un triple para poner el 108-109 con 1,5 segundos por jugar.
La jugada posterior de Dallas, tras tiempo muerto, buscó la heroica a través de un triple milagroso de Doncic que no llegó.
Ganaron los Suns para dejar a los Mavericks con su sexta derrota consecutiva y con un inquietante 8-13 en la temporada.
Chris Paul se elevaba sin discusión como la gran estrella de partido con 34 puntos, 9 rebotes, 9 asistencias, un 70% en el tiro de campo y 4 de 7 desde el triple. Arracó a jugar su mejor baloncesto en el segundo cuarto y ya no paró hasta el final. Su sabiduría en la pista y su forma de ejecutar el juego fueron ejemplares. Incombustible el All-Star de Suns, infatigable, y crudamente decisivo.
Mientras, Booker regresaba al juego -no se vestía de corto desde el 22 de enero- para hacer 24 puntos (20 en la segunda parte) y ejercer de bisturí preciso en el tiro capital, en el tiro que dio el partido a los suyos.
Importante también en los últimos segundos Deandre Ayton, que acabó con 10 puntos y 17 rebotes, mientras que Frank Kaminsky volvió a brillar desde la segunda unidad.
Dallas ya ha recuperado a todos sus jugadores, y por eso empieza a ser más competitivo. Sobre todo se mostró mejorado en defensa y en rebote, dos de sus aspectos más frágiles, y contó además con la anotación conjunta de sus 4 piezas principales en la ofensiva.
Doncic no tuvo su mejor día, pero acabó con 25 puntos y 8 asistencias; Josh Richardson hizo 24; Kristaps Porzingis se fue a 19 tantos y 10 rebotes tras despertar de forma importante en el último cuarto; y Tim Hardaway Jr. sumó 18 puntos. Además, buenos minutos de Jalen Brunson, que nos dejó algunas jugadas de una excelsa calidad.