JORNADA NBA / Playoffs 2020

Houston domina desde la defensa a Lakers en su primer duelo

Harden, Westbrook y Gordon lideran un triunfo incontestable del equipo de D'Antoni

Los Lakers solo son capaces de anotar 18 puntos en el último cuarto para perder 97-112

Nigel Correas |

Houston Rockets está empeñado en derribar tópicos en estos playoffs ¿Alguien puede decir que Houston no defiende? ¿Alguien puede asegurar que Houston es solo una lluvia de triples? ¿Alguien insiste en que James Harden está muy solo?

El equipo texano ha derrotado a los Lakers desde la defensa. Desde un fantástico despliegue físico. Para dejar de lado el hándicap de venir de un séptimo partido. Para imponer su ritmo competitivo. Ante un equipo que llevaba descansando prácticamente una semana.

Nadie dijo que jugar con bajitos fuera fácil. Pero D'Antoni se ha empeñado en demostrar que jugar contra bajitos tampoco lo es. Al fin y al cabo, algunas ventajas gozan en defensa. Tienen más piernas para llegar a las ayudas. Son más efectivos en cambiar de asignaciones. Meten manos con más facilidad. Cortan las líneas de pase con mayor agilidad. Y las limitaciones se suplen con una sobredosis de energía. Con un trabajo físico de primer nivel. Y esta plantilla está confeccionada para soportar ese calvario.

Lakers se encontró con esa energía extra del rival. Y con defensas zonales que se le atragantaron continuamente. Se enfrentó a un rival que tapó las líneas ofensivas que llevaban a la pintura.

Además, Houston tuvo a su trío estelar en su sitio. Todos funcionaron a un gran nivel. El primero de ellos, Harden. 'La Barba' ofreció una primera parte imponente. Llegó al descanso con 25 puntos. Ya suma 29 partidos de playoffs anotando 20 o más puntos en la primera parte. Terminó el partido con 36. Tras anotar el 60% de sus tiros de campo. Figura entre figuras.

Russell Westbrook se acercó a su mejor versión. Ofreció lo que se puede esperar de él. Su físico va recomponiéndose. Cada día que pasa es un motivo de alegría para el jugador y su equipo. Funcionó muy bien. Dio intensidad a la apuesta de su escuadra. Aportó 24 puntos, 9 rebotes y 6 asistencias. Esta vez, Russ fue Russ.

Y Eric Gordon nos dejó un buen partido. Especialmente en el inicio del último cuarto. El momento en el que Houston se escapó en el marcador. Por lo tanto, resultó decisivo. Además de ofrecer un buen trabajo defensivo.

El tercer cuarto había acabado 79-85. Con un buen final de cuarto de Westbrook. Y el último empezó con los Rockets poniéndose 10 puntos arriba. Fue el principio del fin para Lakers. El equipo angelino empezó a ver cómo su rival se iba más y más. Hasta llegar a los 19 puntos de ventaja (82-101). Tras estar los angelinos 4 minutos sin meter un solo punto.

A partir de ahí, impotencia mayúscula de los Lakers. En la pista y en el banquillo. Hasta desemborcar el encuentro en su final. Sin que Lakers reaccionara en ningún momento. De hecho, los de Vogel ya tenían un lenguaje corporal negativo bastantes minutos antes del bocinazo final. Fueron la misma imagen de la frustración.

Además del trío estelar de Houston, gran trabajo de P.J. Tucker y Robert Covington. Se parten la cara por el colectivo. Todos los días. Buenos minutos de Austin Rivers. Y lo peor para Danuel House Jr. Golpe. Y abandono prematuro del partido.

Rockets aguantó el rebote a Lakers. Lanzó más tiros de 2 que de 3. Intentó 39 triples por 38 Lakers. Y defendió a un nivel excelente. Tapando constantemente el acceso al balón de Anthony Davis. Con Tucker y Covington afilando el colmillo en la retaguardia.

El arranque del partido nos dejó un parcial de 7-0. Y ya muchos quisieron ver la sombra del Clippers-Nuggets. El cansancio de Rockets. El descanso de Lakers. La superioridad teórica de Davis en la pintura. Pero nada de todo eso se cumplió.

Houston dejó a Lakers en 18 puntos en el cuarto final. Y ese dato lo dice todo. De unos y de otros. De lo que mucho que Lakers tiene que aprender de este partido. Y de lo mucho que tiene que mejorar.

Anthony Davis terminó con 25 puntos y 14 rebotes. Puso 3 tapones. Pero nunca dio la impresión de que fuera a jugar a su antojo. Ni mucho menos. LeBron James estuvo en 20 tantos, 8 rebotes y 7 asistencias. Se quedó corto. Y estos dos sí que estuvieron solos. El siguiente anotador´entre los titulares fue Danny Green. Con 10 puntos y malos porcentajes.

En realidad, el único apoyo a las estrellas fue el de Alex Caruso. Sumó 14 puntos y 4 asistencias. En 16 minutos. Es pura intensidad. Da gusto. Como da gusto ver a LeBron tirarse a por un balón con P.J. Tucker cuando peor estaba su equipo.

Lo demás, nada. Kyle Kuzma ni está ni se le espera. Y no fue el único que desapareció de escena.

En lo positivo, ver jugar a Rajon Rondo. Estuvo 25 minutos en pista. Y no fue de los que más desentonó.

El primer partido ha sido una sorpresa. Ahora se espera la reacción de Lakers.