Minnesota llevaba 13 derrotas consecutivas, jugaba sin el traspasado Andrew Wiggins, no incorporaba aún al recién llegado D'Angelo Russell y se enfrentaba a los poderosos Clippers con un cambio masivo en la plantilla que la había dejado irreconocible.
Ese era el panorama minutos antes de empezar el Timberwolves-Clippers, un panorama aparentemente desalentador para un equipo local que estaba en plena crisis.
Pues bien, al finalizar el partido todo había cambiado radicalmente. Minnesota había arrasado a Clippers y lo había hecho a base de batir unos cuantos récords de la franquicia y de la temporada.
Victoria por 142-115 tras meter 26 triples con un 59,1% de acierto. Esos 26 triples son el récord de la franquicia y se quedan a un paso de ser un récord de la NBA. Hasta 10 jugadores anotaron algún tiro de 3 con Malik Beasley a la cabeza.
Esos 142 puntos son la mejor marca anotadora de la temporada para Timberwolves, como los son las 39 asistencias que sumaron.
Pero es que ya llovían los récords en la primera parte: 81-59 con 15 de 25 en triples. Tanto esos 81 puntos como esos 15 triples eran récords históricos de la franquicia en una primera mitad.
Así fue la fiesta local, pantagruélica, excesiva, aterradora para el rival, que se sintió impotente a pesar de jugar con Kawhi Leonard (29 puntos) y Paul George (21).
En el bando local debutó, entre otros, el español Juancho Hernangómez, que fue titular y estuvo 27 minutos en pista a pesar de tener problemas de personales durante gran parte del encuentro. Terminó con 14 puntos, 3 asistencias y 3 de 3 en triples.
Su compañero en Denver y ahora en Minnesota Malik Beasley debutó a lo grande. Formidable su primera mitad. Al final, 23 puntos, 10 rebotes y 7 triples para el primer doble-doble de su carrera NBA.
¡Y qué decir del joven base Jordan McLaughlin! Hizo el partido de su vida: 24 puntos y 11 asistencias.
Minnesota metió 142 puntos con Karl-Anthony Towns tirando solo 13 veces. Eso sí, el dominicano brilló y fue más que efectivo. Se quedó al borde del triple-doble con 22 tantos, 13 rebotes y 9 asistencias.
James Johnson, también recién fichado, metió 15 puntos en 20 minutos y Naz Reid se permitió el lujo de hacer 14 puntos y 9 rebotes en 14 minutos con 4 triples.
En definitiva, los Timberwolves vivieron un día muy especial ante unos Clippers decepcionantes.