Tremenda noticia. Trágica. La G-League está de luto. Y el baloncesto mundial, también. Hoy ha fallecido en Grand Rapids (Michigan) el jugador Zeke Upshaw. Solo tenía 26 años. Upshaw sufrió el pasado viernes un colapso en pista en pleno partido. Fue trasladado rápidamente a un hospital. Nada se ha podido hacer por él.
Se jugaba el último minuto del partido. Su equipo, Grand Rapids Drive, iba ganando. Entonces llegó el desastre. Upshaw se desplomó en la pista. Uno de los árbitros paró el juego. Saltaron de inmediato las asistencias médicas. El jugador salió inconsciente de la cancha en camilla. Y fue trasladado a un hospital.
Allí, en el Spectrum Health Hospital, ha estado ingresado en estado crítico. Hasta que ha fallecido esta mañana.
Su club ha tuiteado un mensaje de la madre del fallecido. En él, Jewel Upshaw agradece todos los apoyos recibidos. Y el esfuerzo realizado por los médicos para salvar la vida de su hijo.
Upshaw jugó 3 años como universitario en Illinois State. Y su cuarto año colegial lo pasó en Hofstra. No fue drafteado. No había podido debutar en la NBA. Jamás pudo cumplir ese sueño. Pero jugó en el siguiente escalón. En la G-League.
Cursaba su segundo año en Grand Rapids Drive. Promediaba esta temporada 8,5 puntos y 2,3 rebotes en 19,8 minutos. Ya poco importan esos números. Se ha ido para siempre. Una gran tragedia humana. Una gran tragedia para el baloncesto.