Lo que podía haber sido y no fue. Eso pensarán muchos tras ver el arraque de las Finales del Oeste y su conclusión. Sin Tony Parker, Kawhi Leonard y David Lee, San Antonio volvió a perder en casa. Ante el demoledor ataque de Warriors. Victoria cómoda de los californianos.
Warriors anotó 129 puntos. Con espectaculares actuaciones ofensivas de Stephen Curry y Kevin Durant. El primero hizo 36 puntos y el segundo 29. Tremendo 4-0 en las Finales del Oeste. Campeones de conferencia sin despeinarse. Golden State se presenta en sus terceras Finales de la NBA consecutivas. ¡Con un 12-0 como bagaje de playoffs! Lo nunca visto.
Spurs 115 Warriors 129 (0-4)
El partido tuvo poca historia. Gregg Popovich volvió a salir con un equipo bajo. LaMarcus Aldridge como única referencia interior. Y la novedad de ver a Manu Ginóbili incrustado en el quinteto titular. ¿En su último partido? Ya se verá. Pero los cánticos de la afición hacia el argentino parecían implorar que no se retirase aún.
Warriors rizó el rizo y partió sin referencias interiores claras. Sus hombres más altos: Kevin Durant y Draymond Green. Prescindió el dúo Steve Kerr (ausente) y Mike Brown (presente) de un pívot en el cinco inicial. Y el primer cuarto ya marcó las señas de identidad del partido. Con una clara victoria visitante.
Golden State no perdió ya el dominio del electrónico. Al descanso, 14 puntos de ventaja (51-65). Al final del tercer cuarto, 18 tantos (78-96). Máxima ventaja del partido: 22 puntos. Demoledora ofensiva de los de Oakland. Terminaron con 129 puntos y un 56% en el tiro de campo. Se permitieron el lujo de perder 17 balones. Porque todos los demás elementos de su juego estuvieron en su sitio.
Campeones de conferencia a lo grande. Le hicieron un 4-0 a Portland, Utah y San Antonio. Como quien no quiere la cosa.
Stephen Curry lideró el ataque en este último partido. Con 36 puntos y un fenomenal 14 de 24 en el tiro de campo. Kevin Durant hizo 10 de 13. Casi infalible. Para sumar 29 tantos y 12 rebotes. Poco importó que entre los dos perdieran 11 balones.
El tercer elemento esencial fue Draymond Green. Con 16 puntos, 8 rebotes y 8 asistencias. Cercano al triple-doble. Ejemplar. Nuevamente, Klay Thompson fue el más flojo del cuarteto estelar de Warriors. Volvió a ausentarse Zaza Pachulia. No tuvo un cara a cara con la afición texana en la serie. Y eso equivalió a tensión eliminada.
Kyle Anderson fue el máximo anotador local. Con 20 puntos. Robó, además, 4 bolas. Buenos números, además, de Manu Ginóbili y Pau Gasol.
Ginóbili fue el local que más jugó. Titular y 32 minutos. Sonó un poco a despedida. Ojalá no sea así. Hizo 15 puntos, 7 asistencias y 3 robos. Con un 50% en el tiro. Gasol fue suplente. Logró 14 puntos y 9 rebotes. En 23 minutos. Con 6 de 8 en el lanzamiento.
También llegaron a la decena Patty Mills y Jonathon Simmons. En unos Spurs que asistieron 33 de sus 41 canastas. Pero que se mostraron incapaces de parar el vendaval ofensivo suplente.
Especialmente decepcionante, otra vez, LaMarcus Aldridge. Se fue del partido con 8 puntos en 22 minutos. Y de las Finales del Oeste se marchó con un poso agrio. El mismo poso que están dejando estos Playoffs 2017 tan escasos de emociones.