Golden State Warriors tendrá el factor cancha a su favor en los playoffs por tercer año consecutivo tras la victoria por 111-120 ante los Suns y la inesperada derrota de los Spurs en casa ante los Lakers. El equipo de la Bahía de San Francisco suma 65 victorias y es inalcanzable para los texanos.
Los de Steve Kerr jugaron ante Phoenix sin Draymond Green y Andre Iguodala. Poco importó. Suman ya 13 victorias consecutivas sin el concurso del lesionado Kevin Durant y llegan a la postemporada en plena forma.
El partido en Arizona no duró ni un suspiro. El primer cuarto acabó 18-41 y ya no hubo partido a pesar de que los visitantes se relajaron en demasía en el segundo acto encajando un sorprendente 34-17. Es cierto que el encuentro tuvo apariencia de igualdad por momentos, pero no fue más que una igualdad falsa, ya que daba la impresión de que en cuanto los californianos apretaran el acelerador todo terminaría.
Tremendo Curry
El que apretó el acelerador de verdad fue Stephen Curry, imperial todo el partido. Logró Curry 42 puntos y 11 asistencias con 8 triples anotados en una noche fina el en tiro. James McAdoo fue titular en el lugar de Draymond Green y Klay Thompson aportó 22 puntos.
En Phoenix, 21 puntos de Devin Booker en una mala noche en el tiro, 20 del base Tyler Ulis y notable contribución de los suplentes Jared Dudley y Alan Williams. El primero sumó 19 puntos en una actuación muy completa y el segundo se fue a 16 tantos y 17 rebotes en 25 espléndidos minutos.