Noche inolvidable en la NBA para la nueva generación argentina. Por una parte, Patricio Garino debutó en la liga formando parte de las filas de Orlando Magic. Por otra, Nicolás Brussino vivió su primera titularidad en la NBA e hizo uno de sus mejores partidos.
El Pato Garino pudo debutar por fin en la mejor liga del mundo. No fue drafteado en 2016 tras jugar en la NCAA y no completó la pretemporada con los Spurs. Ahora le llegaba una segunda oportunidad con Orlando Magic y aquí estuvo el momento.
Garino jugó minutos de la basura en el cuarto final que le supieron a gloria. El de Mar del Plata debutaba con 23 años y lo hacía en un marco incomparable: la cancha del vigente campeón, Cleveland Cavaliers. Teniendo en el otro banquillo a LeBron James, Kyrie Irving y compañía. Difícil un escenario más motivador.
El argentino estuvo 4 minutos en pista. No anotó tras fallar un lanzamiento y capturó 1 rebote. Su equipo, Orlando, perdió 122-102 ante Cavaliers.
Brussino, ¡máximo anotador de Dallas!
Dallas perdió 98-87 en Sacramento jugando sin Dirk Nowitzki, Wesley Matthews, Seth Curry... una situación que hizo que Rick Carlisle diera opción de entrada a Brussino. Era su primera titularidad en la NBA en 49 partidos y bien que la aprovechó.
El jugador santafesino se permitió un lujo con 24 años que no está al alcance de los comunes: ¡ser el máximo anotador de un equipo NBA en un partido!
Brussino jugó nada menos que 33 minutos en los que logró 13 puntos, 7 rebotes, 5 asistencias y 2 robos. Presentó un 4 de 12 en el tiro de campo encestando 2 triples. No se cortó a la hora de jugar al baloncesto. Una gozada.