"Después de tantas batallas, he decidido dejar de reventar la botella de agua contra el piso cada vez que me sustituyen, mojando a compañeros, asistentes y plateístas de primera fila... ME RETIRO, me voy antes de que me echen". Andrés Nocioni se marcha del baloncesto.
Esas lindas palabras corresponden a un amplio texto de despedida que el Chapu ha escrito en Twitter para anunciar que se va del baloncesto cuando acabe la presente temporada con el Real Madrid.
"Viví como jugué. Fui siempre honesto y entregué mi corazón en cada club en el que estuve: todos los días, todas las prácticas, todos los partidos", prosigue la carta de Nocioni, que asegura haber cumplido muchos de los sueños que tenía cuando era niño en su municipio natal, Gálvez.
El santafesino agradece a los equipos en los que ha militado en Argentina, en España y en Estados Unidos, y se emociona cuando repasa su trayectoria de más de 15 años con la selección de su país, con la que consiguió muchas medallas y alcanzó el cénit al proclamarse campeón olímpico en Atenas 2004.
Notable paso por la NBA
El paso de Nocioni por la NBA no fue fugaz. Muy al contrario, el de Gálvez adquirió un rol sólido en la liga hasta permanecer en ella 8 años. Pasó por Chicago Bulls, el equipo en el que más tiempo estuvo y mejor rindió, Sacramento Kings y Philadelphia 76ers.
En esas 8 temporadas, el alero disputó 513 partidos de fase regular y 23 de playoffs. En regular promedió 10,5 puntos y 4,5 rebotes en 23,4 minutos. Su mejor tiempo estuvo entre 2005 y 2008 con Chicago, temporadas en las que promedió 13, 14,1 y 13,2 puntos.
Con Chicago disputó 22 de los 23 partidos que hizo en postemporada, con promedios de 13 puntos y 6 rebotes y con un espectacular momento, el vivido en los playoffs de la campaña 2005-2006, en los que hizo medias de 22,3 puntos y 8,8 rebotes en 6 partidos con porcentajes de tiro espectaculares.
Antes de incrustrase en la NBA, jugó en su país natal y varios años en España. Y después de la NBA regresó a España. Estuvo en total 6 años en Baskonia y lleva en el Real Madrid desde 2014.
Ahora, solo espera despedirse con algún título importante de la mano del equipo blanco. Si mira atrás, no puede sentir más que orgullo por su trayectoria, el orgullo que le hizo ser uno de los tipos más competitivos que jamás haya pisado una cancha.