La mala suerte en forma de lesiones se ha cebado en el joven escolta de Utah Jazz Alec Burks en las últimas temporadas. Ahora, el jugador ha vuelto a pasar por el quirófano para someterse a una artroscopia en la rodilla y tobillo izquierdos, pero la franquicia espera que esté listo para la fase de preparación del equipo.
La intervención a la que ha sido sometido Burks tenía como objetivo limpiar ambas articulaciones de restos orgánicos que lesiones previas han ido dejando y cuya presencia podía traer consigo futuras molestias. La pierna izquierda fue la que prácticamente acabó con la temporada de Burks este año.
El escolta se rompió el tobillo izquierdo a finales de diciembre y aunque en principio se habló de 6 semanas de baja, lo cierto es que apenas pudo jugar 3 partidos más en toda la campaña y ya a finales de abril.
No tiene suerte Burks desde que firmó su millonaria renovación con los Jazz, porque ya en la pasada temporada, y también a finales del mes de diciembre, sufrió una lesión en el hombro izquierdo que le dejó fuera de juego por el resto de campaña. En total, Burks solo ha podido jugar 58 de 164 partidos posibles en las 2 últimas campañas, es decir, se ha perdido más de 100 encuentros por culpa de las lesiones.