Memphis Grizzlies ganó en Atlanta 76-79 pese a solo lanzar 1 tiro libre en los 48 minutos del partido. Lo ocurrido en el Philips Arena entra dentro de los registros históricos de la NBA. Es un récord. Porque nadie había lanzado tan poco desde la línea de castigo desde que se instauró en la temporada 1954-1955 el reloj de posesión en la liga.
El autor del tiro libre, que entró, fue Courtney Lee. Ese tiro libre llegó a 8:33 de que finalizara el tercer cuarto. Y no hubo más.
Los árbitros -Gary Zielinski, Olandis Poole y Rodney Mott- fueron muy permisivos. Solo pitaron 22 faltas en todo el partido. Esa permisividad hizo que el partido se jugase abiertamente, con muchos contactos, lo que llevó a un marcador bastante bajo.
Los locales hicieron un 8 de 15 desde el tiro libre por el 1 de 1 de los visitantes, que estaban atónitos al final del choque al ver las estadísticas. "¡Wow!, ¡wow!, ¡wow!", gritaba Zach Randolph, mientras advertía de que los árbitros habían dejado jugar mucho, "aunque algunas veces si hay una falta, pítala", concluía Z-Bo.