Con las negociaciones del nuevo convenio salarial bloqueadas, 2 de las máximas estrellas de la liga, Derrick Rose y Kevin Durant, han hablado para cargar contra la postura mantenida por los propietarios de la NBA, a quienes culpan de la falta de acuerdo.
El base de los Bulls ha sido claro sobre la ausencia de una solución: “Es muy triste, pero todo el mundo sabe que no es culpa nuestra”. El actual MVP de la liga no duda en asegurar que “si fuera por nosotros, estaríamos jugando. Creo que está mal y sé que podrían resolverlo fácilmente”.
Rose no duda en extender su dedo acusador en dirección a los propietarios de las franquicias, a los que acusa de falta de voluntad en el diálogo. “Ellos no están teniendo en cuenta nada de lo que decimos. No están tomando en consideración lo que intentamos ofrecerles”, ha sentenciado.
En la misma línea se ha mostrado Kevin Durant, máximo anotador de las 2 últimas campañas. “Siento que no nos están ayudando, no están intentando que encontremos un término medio”, ha dicho el alero de los Thunder en referencia a los propietarios.
Durant cree que los jugadores han "sacrificado mucho" para tratar de alcanzar un acuerdo sin encontrar una respuesta positiva en el lado contrario. “Nosotros, como jugadores, generamos mucho dinero. Con suerte, llegaremos a un acuerdo, pero debemos mantenernos firmes”, asegura un Durant que, al igual que Rose, confía en que el conflicto tenga una pronta solución.
Las declaraciones de 2 de los jugadores más significativos de la liga han llegado horas después de que los dirigentes del sindicato que les representa se hayan reunido con los jugadores para explicar la situación actual de unas conversaciones que se reanudarán este martes con la presencia, por primera vez , de un mediador laboral.