MERCADO NBA

Erick Dampier será el sustituto de Udonis Haslem en Miami Heat

Jerry Stackhouse será el sacrificado para dar entrada al pívot

hispanosnba.com |

Todo está atado. El pívot Erick Dampier jugará finalmente en Miami Heat. Las puertas del equipo de Florida se le han abierto de par en par a raíz de la lesión de Udonis Haslem. El presidente de Miami, Pat Riley, ya dijo que el equipo precisaría de inmediato de un refuerzo en la pintura.

La noticia la adelanta CBS Sports, que asegura que el agente del jugador está a la espera de que el contrato entre ambas partes, por una temporada, se firme hoy mismo, una vez que el ex de Dallas pase las pruebas médicas.

Miami había hecho a Dampier una oferta firme por una temporada a raíz de la desgracia de Haslem, que estará de baja hasta, al menos, el mes de febrero.

Muchos rumores

Dampier estuvo en boca de muchos durante el tiempo en el que no tuvo equipo. Los rumores se multiplicaron y algunos se convirtieron en noticia. Por ejemplo, se dio por hecho su fichaje por Houston Rockets, pero finalmente el club texano confió en Taylor y descartó a Dampier.

El pívot de New Hebron aportará experiencia al 'roster' de Miami. A sus 35 años ya las ha visto de todos los colores en sus 14 temporadas en la NBA tras ser elegido en el puesto 10 en el Draft de 1996.

Su poderío de antaño, mide 2,11, ha decrecido, pero aún así el jugador conserva todavía un gran físico. Su última parada en la NBA fue Dallas Mavericks la temporada pasada, donde jugó 55 partidos de fase regular en los que promedió 6 puntos y 7,3 rebotes en 23,3 minutos de juego.

Stackhouse, a la calle

La llegada de Dampier a una plantilla que ya cuenta con 15 jugadores ha obligado a despedir a uno para hacer hueco al pívot y el elegido, según adelanta el Sun-Sentinel, no ha sido un hombre alto sino el veterano Jerry Stackhouse, lo que deja a los Heat con nada menos que 5 pívots y una corta rotación en las posiciones exteriores, 6 hombres para 3 puestos, toda vez que Mike Miller se encuentra lesionado.

Stackhouse era el único jugador de la plantilla cuyo contrato no estaba garantizado hasta el final de la temporada y eso, junto a su limitada participación en lo que llevamos de temporada (ha jugado una media de 7 minutos en 7 encuentros) ha inclinado la balanza en su contra a la hora de tomar la decisión.