Eddy Curry sigue siendo un negocio ruinoso para los Knicks de Nueva York. El pívot, que apenas ha jugado 7 partidos esta temporada, se ha vuelto a lesionar y ha dicho adiós a la temporada. Lo peor para los Knicks es que aún le queda un año de contrato.
Una lesión muscular en la pantorrilla le obligará a descansar entre 6 y 8 semanas, lo que le deja fuera ya de la campaña actual. La franquicia de Nueva York lleva tiempo intentando deshacerse del elevado salario de un jugador que tan sólo ha disputado 10 encuentros en las últimas 2 temporadas, 73 minutos de juego que al equipo le han costado más de 20 millones de dólares, un precio astronómico.
Lo peor para la franquicia es que a Curry aún le queda 1 año más de contrato a razón de más de 11 millones de dólares y Curry no está dispuesto a renunciar a él. “Trabajaré duro este verano y me probaré a mí mismo el próximo año”, ha dicho al jugador, pese a que son muchos los que dudan de que sus intenciones vayan más allá de cobrar su elevado salario.
Curry no ha logrado recuperarse desde que tuvo que ser operado de la rodilla hace 2 años y desde entonces, sus problemas de peso y un rosario de lesiones y de problemas extradeportivos le han impedido jugar.
McGuire, también fuera
Otro jugador al que no veremos ya más esta temporada será al alero de los Sacramento Kings, Dominic McGuire. McGuire sufrió una lesión en la planta de su pie derecho en el partido ante Cleveland y será baja por lo que resta de campaña.
El alero llegó a los Kings en febrero procedente de los Washington Wizards y sólo ha disputado 10 partidos con los de Sacramento, los 2 últimos como titular debido a la plaga de lesiones que sufre la franquicia californiana. Sus promedios han sido muy discretos: 0,8 puntos y 1,8 rebotes en apenas 6,7 minutos de juego.