JORNADA NBA / TEMPORADA REGULAR 2008-2009

Kobe Bryant socava la resistencia de Houston y Pau Gasol remata la faena

Trevor Ariza supera a Gasol y Scola como mejor hispano y Bryant anota 33 puntos tras hacer 32 tiros

Polémica victoria de Denver sobre Dallas con un Barea discreto y 44 puntos de Nowitzki

hispanosnba.com |

Kobe Bryant tuvo que lanzar 32 veces a canasta para anotar 33 puntos. Fue el arma letal que preparó el camino para que 3 tiros libres de Gasol dieran la victoria a los Lakers sobre Houston. Ni Gasol, ni Scola fueron los mejores hispanos. Ese mérito recayó en un gran Trevor Ariza.

Mientras, Denver ganó en el Pepsi Center en los últimos segundos a Dallas en un encuentro no exento de polémica. Unos y otros todavía discuten si la personal que se le pitó a Terry sobre Billups lo fue o no. El caso es que esa jugada supuso la victoria local e hizo estériles los 44 puntos y 14 rebotes de un tremendo Dirk Nowitzki en un encuentro en el que Barea no brilló.

En otros partidos, Phoenix derrotó a Atlanta, que no pudo contar con el dominicano Al Horford, y Miami ganó a Minnesota.

Houston 100 Lakers 105

Era el partido más atractivo de la jornada y no defraudó lo más mínimo. Igualdad y alternancia entre el juego alegre y ofensivo y el baloncesto agresivo, duro y sin contemplaciones. Y es que hubo de todo en el Toyota Center, donde coincidieron 3 jugadores hispanos: Luis Scola en el bando local y Pau Gasol y Trevor Ariza en el visitante.

Ariza hizo un partidazo. En 29 minutos aportó mucho: 14 puntos, 5 rebotes y 3 asistencias, agresividad defensiva y excelencia en el tiro, pues sólo falló 1 en todo el partido.

En un rango intermedio se situó Pau Gasol, que jugó 42 minutos (la segunda parte entera) plenos de sacrificio en los que no brilló en ataque pero supo ayudar en muchas facetas a su equipo, sobre todo en aspectos defensivos. En el final del encuentro, el español anotó 3 tiros libres decisivos -los 3 últimos puntos del partido- y capturó 1 rebote en la penúltima jugada del mismo, la realmente crucial.

Y de los 3 hispanos, el argentino Luis Scola fue el que estuvo más desafortunado, y eso que empezó como un tiro, con una tremenda exhibición de juego en los primeros minutos del encuentro, donde anotó los 6 puntos con los que cerró el partido. Tras esa exhibición inicial, Scola desapareció por completo y gran parte de culpa en esa desaparición fue su propensión a cargarse de faltas personales, lo que hizo, unido al gran partido de Landry, que sólo jugara 5 minutos en la segunda parte.

En cuanto al partido en sí, tuvo de todo. Pero lo cierto es que estos Lakers, pase lo que pase, terminan ganando los partidos y cada vez lo hacen de un modo distinto, lo que pone sobre la mesa su casi ilimitada gama de estilos de juego. Sin ir más lejos, ayer ganaron en Houston, una cancha complicadísima, gracias a la defensa excepcional que practicaron en el último cuarto.

En ese cuarto final, los visitantes dejaron a los Rockets en 18 puntos porque pararon en seco las dos sangrías que les estaban hiriendo de muerte. Sus nombres: Yao Ming y Von Wafer.

Ming desarboló durante el partido la oposición de Bynum hasta ridiculizarla. El joven pívot angelino se vio sobrepasado por el chino, se cargó de personales y se vino abajo en los tableros (1 rebote en todo el partido). Y ello hizo que Ming terminara el tercer cuarto con 19 puntos y 14 rebotes.

En cuanto a Von Wafer, simplemente se salió. Lo suyo fue una desbordante lección de talento. El ex Laker es un jugador muy atlético que tiene velocidad y salto, pero es que además tiene fundamentos, sabe pasar el balón y goza de un buen tiro. Con su peinado mohicano, una cresta de pelo sobre una cabeza rapada, el joven jugador le hizo un roto a los Lakers hasta alcanzar al final del tercer cuarto los 23 puntos.

Pues bien, Ming y Wafer no fueron capaces de anotar entre los 2 ni un solo punto en el último cuarto, un cuarto en el que Phil Jackson no dudó en que el único defensor posible para Ming era Gasol y que la única forma de parar al chino era ejecutar precisas ayudas a la labor defensiva del español. Y se ejecutaron perfectamente.

De ahí que Houston tuviera que entregar su ataque en la recta final a un inspirado y talentoso Carl Landry. Pero es que en el otro lado estaba Kobe Bryant, bien apoyado por Lamar Odom, que reaparecía.

Bryant anotó 13 de sus 33 puntos en el último cuarto, incluido el triple que a 27 segundos del final dio media victoria real a los suyos y la victoria psicológica definitiva, ya que venía precedido de un triple de Battier.

Luego llegaría el desastre local. Alston falló 2 tiros libres cruciales a 9 segundos del final cuando Houston no había errado hasta entonces ninguno (6 de 6) y en la jugada posterior en la que los Rockets necesitaban un triple para empatar, Ming terminó errando un incomprensible tiro de 2.

Los números:
  • Houston: Ming 19 pt, 17 reb, 5 as y 3 tp; Wafer 23 pt; Landry 21 pt y 8 reb.
  • Lakers: Bryant 33 pt, 7 reb y 4 as (13 de 32 tc); Ariza 14 pt y 5 reb; Gasol 11 pt, 7 reb, 4 as y 2 rob.
  • Dikembe Mutombo debutó en la temporada con 42 años, anotando 4 puntos en 4 minutos.
  • Los Lakers sólo perdieron 7 balones.
  • Ambos equipos alcanzaron el 50% en el tiro de campo (53% los locales y 50,6 los visitantes).
  • Los chinos Yao Ming y SunYue jugaron, pero no coincidieron en la pista.

Denver 99 Dallas 97

Victoria polémica de los Nuggets, sin Carmelo Anthony, sobre los Mavericks, una polémica que se centra en la jugada decisiva del partido.

Con empate a 97, Billups intenta superar por velocidad a Kidd y cuando se eleva para tirar a canasta a falta de 2 segundos para el final, Terry salta y le puntea el tiro. Los árbitros pitan falta. Billups tras el partido dice que fue falta; Terry a la conclusión lo niega categóricamente. El hecho es que se pita y el base local sentencia el partido al anotar los 2 tiros libres.

Hasta aquí todo normal. Lo que se alejó de la normalidad fue la actitud del propietario de los Mavs, Mark Cuban. Claro que Cuban es cualquier cosa menos normal.

Cuban se erigió en protagonista de un partido en el que el protagonista debería haber sido su jugador Dirk Nowitzki, que se tuvo que ir con la derrota a cuestas a pesar de anotar 44 puntos y capturar 14 rebotes. Ahí es nada.

El propietario de Dallas saltó al campo al final del partido para gritar a los árbitros y protestar de forma airada ante lo que creía que era una injusticia. Pero es que durante todo el choque ya había hecho de las suyas al molestar verbalmente y de forma insistente al jugador local J.R.Smith, que acabó absolutamente desquiciado con 1 canasta de 14 intentos en el tiro de campo. El entrenador local, George Karl, denunció la situación al acabar el choque y criticó la irresponsabilidad y falta de profesionalidad de Cuban.

Dejando de lado al personaje, que no otra cosa es la fachada de Cuban, Denver mereció ganar a Dallas porque jugó como un equipo, una imagen bien distinta a la de su rival, que se amparó de forma casi enfermiza en la gran noche de Nowitzki.

El puertorriqueño Barea aportó poco a su equipo. No tuvo su día (5 puntos en 22 minutos con 1 de 7 en el tiro) y aguardó, al igual que sus compañeros, a que la estrella teutona le solucionara la papeleta en ataque.

Mientras, en Denver hubo un reparto más equitativo y lógico del juego ofensivo, en el que participaron Billups, Nené, Jones, Carter y Andersen, que anotó un triple impresionante sobre la bocina del tercer cuarto desde más allá del medio del campo tras interceptar un pase desde el fondo de la canasta contraria de Jason Kidd.

A pesar de todo ello, Dallas sobrevivió al partido porque supo ajustar su defensa tras el descanso (60 puntos recibidos en los 2 primeros cuartos y 39 en los 2 siguientes). Creían que con ese ajuste defensivo y teniendo a Nowitzki en estado de gracia sería suficiente, pero no lo fue.

Los números:
  • Denver: Billups 23 pt (9 de 9 tl); Nené 20 pt; Jones 16 pt y 5 rob; Andersen 15 pt, 10 reb y 3 rob.
  • Dallas: Nowitzki 44 pt y 14 reb (0 as) (12 de 12 tl); Terry 16 pt.
  • J.R.Smith fue titular y anotó 2 puntos en 33 minutos con 1 de 14 en el tiro de campo.

Phoenix 107 Atlanta 102

Los partidos de Atlanta sin Al Horford se cuentan por derrotas. Y es que en los 2 últimos encuentros en los que el dominicano ha estado ausente por lesión, los Hawks han tenido muchos problemas para parar a los pívots rivales.

Eso a pesar de que Pachulia hizo un buen partido, pero ni él ni nadie pudieron detener el despliegue físico de un rejuvenecido Shaquille O’Neal, que terminó con 26 puntos y 10 rebotes. El juego de O’Neal, unido a la brillantez de Steve Nash y Leandro Barbosa, fue suficiente para doblegar a unos Hawks que empezaron perdiendo 31-16 y llegando a ir cayendo por 19 al inicio del segundo cuarto, pero que rápidamente cerraron esa herida en ese mismo cuarto.

La buena labor de Josh Smith, Mike Bibby y Marvin Williams, apoyados por el citado Pachulia y el suplente Murray, hizo que Atlanta llegara con opciones al final, entrando en los últimos 2 minutos del choque con empate a 98. Pero ahí surgió la calidad de O’Neal, Nash y Stoudemire para firmar en el siguiente minuto y medio un parcial de 5-0 que mató el encuentro.

El gran acierto en el tiro de 3 de los locales (11 de 21) y su inmensamente superior circulación de balón (26 asistencias por solo 10 de Atlanta) jugaron a favor de los locales para equilibrar las 15 pérdidas que cometieron por las solo 8 de los Hawks, que sufrieron el horrible partido de su máxima estrella, Joe Johnson. El escolta, que ha perdido últimamente su regularidad, terminó con 11 puntos tras fallar 17 de los 21 tiros que hizo. Todo un contratiempo para los Hawks.

Los números:
  • Phoenix: O’Neal 26 pt, 10 reb y 3 tp; Nash 23 pt y 4 tr; Barbosa 22 pt y 4 tr en 24 min.
  • Atlanta: Smith 24 pt y 10 reb; Bibby 17 pt; Williams 16 pt y 12 reb.
  • Los Hawks sólo sumaron 10 asistencias.
  • O’Neal ha anotado al menos 15 puntos en los últimos 12 partidos.

Miami gana en Minneapolis

Triunfo de los Heat de Miami en la cancha de Minnesota Timberwolves (96-99) en otro gran partido de Dwyane Wade (31 puntos, 8 asistencias, 3 tapones y 3 robos).

Haslem (17 puntos y 10 rebotes) y Marion (16 y 11) también brillaron en Miami, mientras que en los locales el mejor jugador de largo fue Randy Foye, autor de 29 puntos –14 en el último cuarto-. Sus números se completaron con 8 asistencias, 5 rebotes y 5 triples.

Los visitantes controlaron muy bien a Al Jefferson (9 puntos) y lanzaron 38 tiros libres por 13 de los locales. Udonis Haslem alcanzó los 4.000 puntos en su carrera en su partido número 400. Una auténtica curiosidad estadística.