
Los Lakers continúan moviéndose en el mercado NBA, uno de los puntos en los que más se han enfocado en trabajar la gerencia de Ron Pelinka ha sido la zona pintada, área en la que Los Ángeles sufrieron bastante en la temporada pasada.
Tras el anuncio de DeAndre Ayton para la campaña 2025-2026, los Lakers han sorprendido con el regreso de Jaxson Hayes a la franquicia angelina. El pívot ha firmado un nuevo contrato por un año, en un movimiento que busca consolidar la profundidad en la zona interna del equipo.
Esta reincorporación, además de su valor deportivo, se caracteriza por una cláusula particular que ofrece a Hayes una estabilidad poco común para un acuerdo de este tipo.
¿El acuerdo? Una cláusula especial
Jaxson Hayes ha sellado su regreso a los Lakers con un contrato por una temporada. Lo más notable de este acuerdo es una cláusula que, aunque no es explícitamente una cláusula de no traspaso, funciona de manera similar.
Debido a las reglas del Convenio Colectivo de la NBA (CBA), los jugadores que firman un contrato por un año al mínimo salarial y que son traspasados a mitad de temporada, pierden su “Bird Rights” si son cortados y no son reclamados. Esta situación desalienta a los equipos a traspasar a dichos jugadores, lo que en la práctica le otorga a Hayes una “cláusula de no traspaso de facto”, dándole control sobre su destino en caso de un posible movimiento.
Jaxson Hayes es un habitual en Lakers
Durante la temporada 2024-2025 de la NBA, Jaxson Hayes continuó con su desarrollo, aunque con minutos limitados en su anterior equipo. Con el elenco oro y púrpura promedió 6.8 puntos, 4.8 rebotes y 1.0 asistencia, con un acierto en la media de 66.0% en disparos de campo.
El aporte en la zona pintada junto a DeAndre Ayton
El regreso de Jaxson Hayes cobra especial relevancia con la reciente adición de DeAndre Ayton a los Lakers. Ambos pívots podrían complementar sus habilidades en la zona pintada, ofreciendo al equipo una presencia interior formidable.
Hayes aportará energía, atletismo y capacidad de salto desde el banquillo. Su presencia garantiza un nivel de intensidad en la pintura cuando Ayton descanse o necesite apoyo.
Además, ambos jugadores son protectores del aro. Hayes puede contribuir con tapones y dificultar las penetraciones rivales, sumando a la disuasión que ofrece Ayton.
Sin duda que la combinación de Hayes y Ayton asegura una batalla constante en los tableros, tanto ofensivos como defensivos, lo que es crucial para controlar el ritmo del partido.
La vuelta de Jaxson Hayes a los Lakers es un movimiento que busca dar mayor solidez a su juego interior. Con una cláusula contractual particular y su potencial para trabajar junto a DeAndre Ayton, Hayes podría desempeñar un rol importante en la aspiración del conjunto de Los Angeles por competir en lo más alto de la NBA y en la siempre difícil Conferencia Oeste.