
Los Thunder de Oklahoma City, con un arranque de 25-3 en la temporada 2025-2026 que los posicionaba como candidatos a romper récords históricos, enfrentaron un revés inesperado en su visita a Minnesota. Un cierre electrizante contra los Timberwolves no solo marcó su tercera derrota, sino que cuestiona su invencibilidad. ¿Qué debilidades se revelaron en este choque y cómo impacta en su persecución de las 73 victorias?
El cierre dramático que definió la derrota de los Thunder
El 19 de diciembre, los Thunder cayeron 112-107 ante los Timberwolves en un partido que comenzó con dominio visitante pero terminó en caos. Oklahoma City construyó una ventaja de 12 puntos en los primeros periodos, impulsados por un ataque inicial eficiente que los colocó arriba 33-23 al final del primero. Sin embargo, Minnesota, jugando en casa, mantuvo la presión y dio la vuelta en la segunda mitad, liderando la mayor parte del tiempo tras el descanso.
El momento crucial llegó en los últimos segundos. Con el marcador ajustado, Anthony Edwards, el alero de los Timberwolves, encestó un triple decisivo a 39 segundos del final para poner a su equipo adelante. Luego, en defensas consecutivas, bloqueó un intento de Shai Gilgeous-Alexander que habría empatado o dado la ventaja, y robó el balón al mismo jugador para sellar la victoria. Edwards terminó con 26 puntos, 12 rebotes, tres asistencias.
Por los Thunder, Gilgeous-Alexander lideró con 35 puntos, siete asistencias y cinco rebotes. Sin embargo, el resto del equipo flaqueó: Jalen Williams anotó 17 puntos pero con seis de 16 en tiros y cuatro pérdidas, mientras Chet Holmgren se limitó a 14 puntos y cinco rebotes. El porcentaje general de campo fue bajo, con 34 de 92 para un 37 por ciento, y solo 11 de 39 desde el arco para un 28.2 por ciento.
Minnesota dominó los rebotes 71-60, aprovechando la fatiga de Oklahoma City, que jugaba el segundo partido en noches consecutivas. Este resultado marca la segunda derrota en tres juegos para los Thunder, tras un inicio de 24-1 que los hacía parecer imbatibles. El entrenador de Minnesota fue expulsado temprano por protestar a los árbitros, pero su equipo mostró resiliencia física y mental.
Las implicaciones para el récord histórico y el futuro de los Thunder
Con esta caída, los Thunder mantienen un récord de 25-3, aún en ritmo para empatar las 73 victorias de los Warriors en 2015-2016. Sin embargo, proyecciones actualizadas estiman solo un 16 por ciento de probabilidades de superar o igualar esa marca, considerando la dificultad de mantener consistencia en una liga donde las noches malas son inevitables.
Antes de esta derrota, su diferencial de puntos era histórico, pero este partido expuso vulnerabilidades en tiro y reboteo bajo presión. Analistas destacan que alcanzar 70 victorias o más requiere minimizar errores, algo que Oklahoma City ha logrado en gran medida, con victorias abrumadoras en 18 de sus 25 triunfos por doble dígito. Pero derrotas como esta, contra un rival directo del Oeste como Minnesota, recuerdan que la fatiga, lesiones y ajustes defensivos pueden descarrilar planes.
Gilgeous-Alexander, actual Jugador Más Valioso, ha sido el pilar, promediando 32.4 puntos por partido, pero el equipo necesita más de sus secundarios en duelos cerrados. Mirando adelante, los Thunder tienen dos días de descanso antes de enfrentar a los Grizzlies el 22 de diciembre, seguidos de duelos contra los Spurs.
Esta derrota no acaba su temporada dominante, pero sirve como alerta, la persecución de la historia exige perfección, y cualquier tropiezo amplifica dudas. En un año donde defienden título, priorizar salud sobre rachas podría ser clave para playoffs, incluso si el récord se escapa.





















